Los Matices De La Palabra Amor.

21

Jungkook y su miedo al amor.

—Jungkook, no voy a irme, así que abre de una vez. — Jimin estaba tras mi puerta desde hace quince minutos. Yo estaba en mi sillón, brazando mis pies, en pleno colapso mental por un simple beso que sucedió hace más o menos trece horas. —Si no me abres, me iré. No puedo estar todo el día aquí por tu capricho de desaparecer cuando algo te pone nervioso. — Taehyung hubiera esperado, él esperaría días ahí por mí.

Y ahora tengo miedo de verle la cara.

—Entonces vete, yo no te pedí que vinieras.

—Se que necesitas hablar de lo que pasó. Sólo quiero ayudarte...

—Si sabes lo que pasó, sabes que no puedo hablarlo contigo.

—Dijimos que seríamos amigos. Puedes contarme lo que sea, estoy para escucharte.

—No esto, sabes bien que estos temas no. Eres mi ex...

Hubo silencio por un momento.

—Tienes razón... Yo tal vez no esté listo para oírte hablar de ti con alguien más.

—Ni yo lo estoy para contartelo.

—Pero con alguien debes hablar, alguien que ayude a aclarar tu mente. Llama a Namjoon, él es tu amigo. No vuelvas a alejarlo.

—Lo-Lo haré, Jimin. Hablaré con él. Gracias... —silencio. —¿Jimin?

—Aún aquí.

—¿C-Cómo está Taehyung? ¿Está molesto?

—¿Cuándo lo viste molesto? —rió — A demás, ¿por qué lo estaría?

No contesté. Se supone que él ya sabe porqué. ¡Lo bese, por dios!

—Él estaba bien, contento diría yo, pero preocupado por ti. Por eso vine a hablarte. No puedes hacer algo como eso y simplemente correr.

—Hablaré con Nam. Ya te puedes ir.

—Sólo quiero que seas feliz, Jungkook.

—Lo soy.

—Quiero que lo seas, no que digas que lo eres sólo para que me vaya.

—Entonces sólo diré vete.

—Adiós.

No sentí más ruidos, por lo que supuse que sí se había ido.
Me levanté del sillón y fui al celular, le marque a Namjoon.

—¿Hola? Habla Namjoon.

—Lo sé, yo te llamé.

—Claro.

—Soy Jungkook.

—Lo sé, tengo el identificador.

—Ah.

Rió por el silencio provocado. —¿Qué pasa, chiquitín?

—Necesito hablar sobre algo que me está matando la cabeza.

—Mm, pues ahora estoy en la ruta en camino a vacunar unas vacas, pero soy todo oidos si quieres.

—Me besé con Taehyung.

—... Eso es algo que los novios hacen, Jungkook. ¿Tengo que explicar lo de la abeja y la flor?

—No, tonto —reí —Él en realidad no es mi novio.