Narra Jaemin.
La piedra de color verde esmeralda se deslizó con agilidad entre mis dedos. Ninguna alarma había sido encendida, ni mucho menos habían guardias. Me olía a una trampa, pero una vez que salí del edificio las alarmas sonaron alertando a todos los que se encontraban en el edificio. No quise ver más allá y me aseguré de mantener mis sombrero donde estaba para luego huir y subir al automóvil que había comprado hace unos días.
Mi licencia de conducir la había sacado hace unos días moviendo unos hilos para que me tuviera en mis manos lo antes posible. Seré un ladrón, pero tengo que respetar algunas leyes.
Llegué a casa con tranquilidad y bostecé cansado echándome en el sofá. Me quité el antifaz y cerré mis ojos suspirando tranquilo. La casa se sentía vacía y no habían ruidos por ningún lado, pues la televisión estaba apagada y no tenía ningún aparato que hiciera ruido más que los objetos tradicionales que se mantenían apagados.
—¿No Jam? —dí un salto en mi lugar alarmado observando a la figura desconocida frente a mis ojos. Por suerte traía conmigo una pistola que daba electro choques a las personas. Prefiero no arriesgarme al ruido de una bala.
—¿Quién eres? —pregunté olvidando por completo los honoríficos. Mi mano me delató tras mi espalda alarmado a la persona frente a mí.
—Si disparas, yo también lo haré. —dijo en un tono duro y yo bufé quitando la mano de mi espalda, él también copió mi acción quitando su mano de su espalda.
—¿Quién eres? —volví a preguntar. Estaba asustado, pero su vestuario formal no decía mucho más que "oficina" y que no era un criminal.
—Mi nombre es Lee Donghyuck, soy parte de la banda liderada por Lee Taeyong conocida como SR15B. —él extendió su mano hacia mí con un notorio nerviosismo debido al temblor de su mano. Recibí su mano levantándome del sofá y le di un fuerte apretón como un saludo.
—Ahora, ¿Qué quieres? —pregunté. No debo descartar que entró a mi hogar sin mi permiso.
—Pues, mi jefe quiere verte. —dijo dando unos pasos atrás para mantener espacio.
—¿Esas son formas de informar algo así? Quiero decir, entraste a mi casa sin mi permiso, por cierto, ¿Cómo entraste? —consulté observándolo.
—Había una ventana abierta. —se encogió de hombros. —El asunto no es ese, debo llevarte conmigo.
—Me opongo a ir con una persona desconocida. —negué con la cabeza. —¡Dios! Sabes mi identidad...
—¿Qué? —antes de poder llevar mis manos atrás en busca de mi pistola, un golpe en la cabeza me detuvo haciéndome desmayar cayendo al suelo volviendo mi vista oscura.
(...)
—Joder, hermano. Lo golpeaste muy fuerte.
—¡No fue mi intención! Donghyuck dijo que cuando se negará había que golpearlo.
—¡Sí, pero ni siquiera di la señal! Ahora Taeyong nos matará.
—¡Fue tu culpa!
Abrí mis ojos lentamente luego de oír aquellas voces y me quejé lentamente del dolor que mi cabeza no soportaba. —¡Hey, despertó!
Tres cabezas se asomaron en mi vista y solo dos de ellas se me hicieron conocidas. —Jaemin, ¿Te sientes bien?
—¿Jeno? —pregunté tocando severamente donde dolía. Me levanté lentamente procurando no obtener un mareo. —¿Dónde estoy?
—Estamos dentro de la camioneta, vamos hacia mami. —la segunda cara conocida habló y de pronto todos se rieron.
—¿Mami? —pregunté confundido.
—Exacto, con tu mami. —respondió la otra cara, que por cierto no había reconocido.
—Soy huérfano. —mumuré. Jeno golpeó la cabeza de dos de sus compañeros y luego intentó acercarse para ver la herida.
—Lo siento, Jaemin. A Mark se le fue la mano con la golpiza. —se disculpó Jeno revisando mi herida. —Te curaremos, no te preocupes.
—Puedes decirme a dónde vamos. —dije cerrando los ojos una vez que Jeno empezó a hacer sus primeros auxilios.
—A donde mami. —Donghuck habló encogiéndose de hombros.
—Estamos llendo a nuestra base. Solemos decirle mami, porque cuando nuestro último colega llegó dijo que quería ir con su mami. Muchas veces nos burlarmos de él. —Jeno presionó la herida con un paño limpiando, lo que a mí parecer, era sangre.
—¿Y tú qué haces aquí? —pregunté hacia Jeno confundido aún.
—Ah, soy parte de SR15B. Tuve la misión de vigilarte y cuidarte de Kang ______. —contestó Jeno dándome una sonrisa.
—Lastima que se terminó enamorando de ella. —molestó el chico Mark.
—Cállate, Lee. —objetó prestándole atención a mi herida.
—¿Sabías que eras No Jam? —cuestioné por último.
—Sí, aunque no podía creerlo, así que lo tuve confirmar aquella vez que le robaste el collar a la señora Fleur. Desde ese día me he mantenido vigilando todo lo que haces, ya sabes, como un espía. —respondió quitando sus manos de mi cabeza.
—Pero no somos espías. —confirmó Donghyuck.
—No, claro que no. —le siguió Mark negando con la cabeza.
—¿Entonces? —pregunté sin entender a lo que se referían.
—Ni siquiera nosotros lo sabemos. Solo recibimos órdenes. —terminó Jeno.
—Oigan, estúpidos. Hemos llegado, bajen al gusano. —la persona que conducía la camioneta volteó su cabeza para hablarnos y luego quitar el cigarrillo de sus labios. —Apúrense. Es para hoy.
—¿No has pensado en ser menos quejica, Moon? —le preguntó Mark a la defensiva.
—Cállate, Lee, si no quieres que te rompa el cuello. —amenazó.
Jeno ayudó a bajarme de la camioneta preocurando no golpearme en la cabeza o no caerme debido al dolor. —Ahora iremos con nuestro jefe, lo mejor sería que no hagas ruido porque están todos trabajando, ¿Si?
Asentí a su pedido y nos adentramos a la mansión más grande de la historia de mansiones. Dentro del lugar, chicas con un gran escote y faldas cortas, caminaban moviendo las caderas de un lado a otro. El lugar olía a alcohol, cigarrillos y algunas cosas que no podía identificar con exactitud.
Pocos hombres se veían a los alrededores y algunos de ellos jugaban con aquellas jovencitas lanzando risas. Parecía un prostíbulo elegante para gente rica. Hombres vestidos elegantemente con un anillo de compromiso de oro en sus dedos. Infelices, menos mal que estaban trabajando.
—Lee Taeyong debe estar arriba junto a Doyoung o Ten. Así que te ayudaré a subir. —dijo Jeno hacia mí. Yo asentí y ambos caminamos escaleras arriba seguidos por Donghyuck y Mark. Una vez llegamos a la segunda planta, el olor a sexo se hizo insoportable para mí nariz y no pude evitar estornudar más de una vez aumentando el dolor de cabeza.
—Yo abro. —se ofreció Donghyuck hacia la puerta más grande de todas. Ya cuando abrió la puerta, se reveló un dos hombres conversar alegremente seguido a una música de jazz relajante. La vista de ambas personas se dirigieron hacia nosotros y luego sonrieron al verme.
—Na Jaemin, hijo mío. —dijo uno de ellos extendiendo sus brazos triunfante.
—Él es Lee Taeyong. —susurró Jeno en mi oreja.
ESTÁS LEYENDO
Thief of Hearts |Na Jaemin (NCT) & tú|
FanfictionUn ladrón ha llegado a las ciudad de Seúl. Se caracteriza por nunca ser atrapado y vestir un traje de terciopelo rojo. Un detective reconocido entre la comunidad intenta atraparlo, pero en intentos fallidos su hija intenta interferir a escondidas pa...