C a p í t u l o 13

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Narra Tin

Después de la plática que tuve con la chica sin nombre tuve que bajar casi unos segundos después que ella porque estaba seguro de que mi padre también se enojaría si no me ve presente en la fiesta.

Cuando llegué abajo solo vi a mi hermano que estaba tomando algún líquido en una copa y él al verme se acercó a mi.

- Papá te esta buscando, hermanito. ¿Dónde andabas?

- Que te importa. Dime donde está papá.

- Por la mesa doce, te quiere presentar a mi futura cuñada - él muy idiota me guiñó un ojo y se perdió.

No quería que me presenten a nadie, menos a la tal Sukhon esa. Seguramente era una niñita mimada que obtenía todo lo que quería con tan solo señalarlo con el dedo. ¿Por qué carajos tuvo que poner los ojos en mi? Hay más chicos en este mundo.

Vi de lejos a mi padre que estaba con el señor Suchart y una chica a su lado. Lo que me causó intriga fue que mientras me iba acercando esa chica se me hacía más y más parecida, hasta que caí en la cuenta de que era la niña que estaba hablando conmigo hace tan solo unos minutos en el piso de arriba.

- Tin, al fin apareces, hijo - dijo alegre mi padre. Odio esto - Mi amigo te quería presentar a su hija mayor, Sukhon, tu futura esposa.

La chica o bueno, Sukhon me miraba con ambas cejas levantadas y con la boca entreabierta.

- Hija, el es Tin. Tin, mi hija mayor - nos presentó su padre. Yo estaba tipo ya no se que más pensar.

- Ya nos conocimos - dijo de pronto Sukhon atrayendo la atención de los tres - Si, arriba, no tengo por qué esconderlo - se encogió de hombros.

- Bueno...vaya, así será más fácil - dijo el señor Suchart.

- Suchart, dame un momento a solas con mi hijo, por favor - pidió mi padre amablemente con una sonrisa en el rostro.

Una vez que él y su hija estuviesen lejos, comenzó a hablar

- Más te vale que hayas tratado bien a Sukhon, Tin.

- ¿Y que si no? ¿Eh? Dijiste que era muy bien portada y acaba de hablar como si se dirigiera a cualquiera de sus empleadas.

- Ella...no se comportó así cuando la conocí y no me cambies el tema.

- Para que estés tranquilo sí. Si la traté bien. ¿Feliz? Ahora me largo de aquí, ya tuve suficiente.

Me giré para poder marcharme pero mi padre me tomó del brazo deteniendome.

- Tin, no te atrevas a irte así como así ¿que pensaran todos?.

- Me importa una mierda lo que piensen, tienen peores conceptos de mi.

Me solté de su agarre y tomé el ascensor para luego salir a la calle y tomar un taxi. Los camarógrafos aún seguían ahí pero eran dos o tres, así que los evadí fácilmente sin parecer descortés.

El taxista me preguntó a dónde y yo simplemente le dije lo primero que se me vino a la mente. Le di la dirección de la casa de Can. No estaba del todo seguro de lo que estaba haciendo y mientras iba en el auto vi que Can había respondido a mis mensajes. Con mucha más razón quería estar con Can en ese momento. ¿Por qué siempre tanta mierda tiene que estar en mi camino? Can es lo único bueno que tengo en este momento y no pienso cambiarlo ni perderlo por nada.

Cuando llegué a su casa me bajé del taxi y le pagué al chofer. No sabía que hacer así que por unos minutos estuve afuera de su casa hasta que me decidí en llamarlo. Al sexto timbre respondió con voz ronca. Creo que lo había despertado.

- ¿Tin? ¿Qué pasó? ¿Estás bien? - preguntó seguramente preocupado por la hora en que llamaba. Ya era la una de la mañana.

- Si, estoy bien...creo - contesté.

- ¿Crees? Tin, dime que pasa.

Suspire profundamente - Estoy afuera de tu casa.

Después de decir esa frase no escuché nada, solo silencio y eso me incomodó un poco.

- ¿Can? - creí que había colgado pero me contestó.

- Lo siento, me sorprendió un poco por la hora. Ahora voy a abrirte.

Y sin dejarme decir nada más, colgó. Unos tres minutos más tarde vi el delgado cuerpo de Can salir por la puerta de su casa y cuando llegó a la reja la abrió rápidamente.

- Hola - saludé nervioso - perdón si te estoy incomodando, solo quería verte y no podía esperar hasta mañana.

- Tin, nunca me incomodarías, si necesitas quedarte en mi casa o visitarme no dudes en venir.

- Gracias, ¿puedo pasar? - pregunté.

Entramos a su casa y subimos con sigilo las escaleras, Can no quería despertar a su familia. Luego entramos a su cuarto y él entre cerró la puerta.

Cuando se volteó hacia mi me pegué a él tomándole por la cintura y a atrayéndolo más a mi cuerpo. Simplemente tenía la necesidad de estar muy cerca de él.

- Tin - dijo Can en un suspiro mientras yo le acariciaba la mejilla derecha con una de mis manos.

Yo era un poco más alto que él así que Can estaba con la cabeza levantada para poder mirarme.

- Te extrañé, Can - le dije esta vez empezando a retroceder hasta caer sentado en la cama con Can montado en mis piernas.

- Yo igual - dijo con un hilo de voz. Sus ojos tenían un brillo especial y de vez en cuando se dirigían a mis labios. Eso no hizo más que provocarme y poner a saltar a mi amiguito.

Can podía ser tan tierno y tan sexy a la vez y que se vaya a la mierda quién piense que eso no es verdad.

No me resistí más y atrapé sus labios de un mordisco que hizo que Can diera un pequeño gemido casi inaudible. Mis manos recorrieron su cuerpo involuntariamente, yo no las controlaba, ellas iba por donde querían y eso a Can le gustaba.

De repente se abrió la puerta.

- Can ¿Por qué estas haciendo tanto rui...? - Lemon había entrado y se quedó petrificada al ver la escena - ¡OH POR DIOS!

¿Por qué tenía que estar pasándome eso a mi?

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No puedo creer que si llegamos a los 30 votos y hasta pasamos!! GRACIAS! 💕💕
Los amo! 💙💚💙💚

Sukhon en multimedia

21/03/19
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🌻🍁🌼 M.E.Silva 🌼🍁🌻

Del odio al amor (Tin x Can) [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora