¿Señorita?

A celebrar

-A sus puestos-anunció Juan llamándonos a todas.

Seguimos lo indicado y nos colocamos en nuestros lugares. Respiré profundo cuando Carlos comenzó a hablar y extrañamente Mildred también había vuelto aparecer.

La música de entrada comenzó a sonar y todas comenzaron a salir y comenzamos a hacer la coreografía que Juan no enseño-y me costó mucho aprender-pasamos cada una por separado mientras decían nuestros nombres y desfilábamos nuestros vestidos únicos. No había caído y no había hecho el ridículo, pero ahora tocaba lo difícil. Las preguntas. Uno de los jueces nos hacía diferentes preguntas y debíamos responderlas con sinceridad. Estaba nerviosa aunque las preguntas eran relativamente fáciles. Al llegar mi turno, respiré hondo y comencé a caminar a la silla frente al juez.

No te caigas, no vomites, no tartamudees, pero sobre todo, no hagas el ridículo de nuevo frente a las cámaras.

Me repetía mentalmente mientras llegaba a salvo hacia la silla y me sentaba con cuidado y sin quitar la sonrisa de mi rostro.

-Muy bien, Shelye-me miró con severidad. Creo que este señor me tenía rencor por vomitarle encima, mi respuesta debía ser excelente para que no me sacaran-¿Cómo ha sido tu experiencia en este lugar?

Agarré el micrófono frente a mí y medite mis palabras.

No metas la pata.

Me repetí mentalmente con nerviosismo.

-Maravillosa-sonreí y noté como el juez me miraba esperando otra respuesta, una más concreta y larga-A sido una experiencia diferente pero me ha enseñado mucho. Muchas de las chicas son muy amables mientras que otras...-hice una pausa pensando si decir que son unas zorras o no-No mucho-terminé por decir-Pero debo decir que esta experiencia por ahora, con lo poco que llevo en este lugar, me ha gustado mucho.

-Muy bien-meditó removiéndose en su puesto-¿Qué les dirías a las chicas como tú que quieren ser modelos?-enarqué una ceja ante su pregunta tan fuera de lugar.

-¿Una chica como yo?-él asintió-¿Y cómo soy?-preguntó firme cruzándome de brazos y comencé a escuchar murmullos de la audiencia.

-Pues-el juez comenzó a meditar y a balbucear, comenzó a ver hacia los lados y sus compañeros le indicaron que prosiguiera-Torpe-terminó por decir.

-Gracias por tu honestidad-sonreí colocando nuevamente el micrófono cerca de mí-Pues-alargue la "s" pensando un poco-Nunca deben rendirse, si yo, que soy un desastre andante, llegué hasta acá, sé que muchas lograrán hacerlo, ya que la belleza de una Miss no se basa solo en lo físico, sino también en su corazón y por eso ya muchas chicas son Mises sin saberlo-dejé el micrófono en su lugar y me levanté dispuesta a irme.

-Espera. Una pregunta más-me detuvo y yo me giré para acercarme de nuevo con algo de fastidio.

Mis nervios me estaban ganando y ya estaba comenzando a sudar, sin duda este hombre me estaba atacando y antes de decirle algo que resultara en mi descalificación inmediata, quería irme de allí.

-¿Algo que decir sobre el desfile pasado?-sonrió con burla y los murmullos aumentaron.

Había tardado en soltar la bomba.

Agarré el micrófono con cuidado dispuesta a soltarle muchas palabrotas allí mismo, frente a la prensa y muchas personas más. Miré hacia los demás jueces expectantes por mi respuesta y luego vi al público con disimulo que esperaban lo mismo. Relamí mis labios y respiré hondo para guardar la calma.

-Lo siento-solté cerrando los ojos y los abrí para ver a los jueces en general-En serio lo lamento y espero me perdonen por ser un desastre-dejé el micrófono en su lugar y me dirigí con las demás chicas.