Lluvia

25 0 0
                                    

Gemidos ahogados y luces cegadoras,
me mantienen alerta,
a la espera.

Donde aquellos tus trazos,
suaves, constantes, dulces, firmes,
me llevan a en tu piel descubrir versos, 
y en tu boca recuperar mi aliento.

Caricias y deseo, 
aunados en calidez y desvelos,
llevas en los ojos nada más que esperanza, 
vida.

Refugio, 
donde la lluvia ya no es fría,
el ocaso deja de ser turbio,
y las voces resonantes cobijan.

Ante aquella tempestad avecinante,
aún hay calma,
y aunque el horizonte muestre desastre,
sé que en tu mano encuentro el alivio que necesita mi alma.

Memorias y asperesasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora