Amor de Aeropuerto - MeanPlan/2wish

Capítulo 32: Fiesta, fiesta

POV's Mean.

       Aprieto la lata en mi mano y muevo mi pierna incesantemente. Trato de contenerme, pero es que no puedo, aprieto la mandíbula cada vez más y más emputado. No puedo simplemente ver como ese tipo lo agarra de su pequeña cintura y lo atrae hacia él, danzando una canción, que para mi gusto, no se debe bailar tan pegados, les sigo cada movimiento que hacen, esperando un paso en falso. No puedo creer que él se esté dejando llevar tan así.

—Mean, deberías calmarte. – La voz tranquila de Earth me saca de mis pensamientos. —Mira, has abollado la lata.

       Miro mi mano incrédulo, tan solo un segundo, y sí, en efecto. Está abollada y regándose un poco de su contenido en mi mano y en la mesa. Respiro profundo, y la dejo de lado, toda doblada. A veces sufren los más inocentes.

—¿Quieres bailar? – Pregunto sin mirarle, mis ojos siguen fijos en ese pequeño cuerpo apegado a otro que n soy yo. Si quiere guerra, tendrá guerra, Plan Rathavit. –

—Mean... - Lo miro fijamente. No me digas que no. —Ahg, está bien. Solo quiero que sepas que él me cae bien, y no quiero que me odie más de lo que ya lo hace. – Rueda los ojos. —Y todo por tu culpa.

—Ya, ya. Sí. – Tiro de su brazo para llevarlo a la pista. –

       Nos posiciono muy cerca de Plan y su P', no sé si lo hace a propósito o no se ha dado cuenta, o yo soy un poco MUY exagerado, pero está bailando tan pegado a él, y ah que cosas. Han puesto una balada. ¿Así o más cliché? Afirmo la cintura de Earth, tratando de no hacerle daño por la fuerza de la rabia contenida que tengo y nos balanceo de lado a lado. Sin perderles de vista. Oh no, él ha rodeado el cuello de ese tipo con sus brazos. Que indignación.

—Mean... Si no quieres seguir carcomiéndote, ve por él. Se nota que él no hará nada. – Se queja entre mis brazos. —Sabes que te lo mereces, por intentar ponerlo celoso.

—No ayudas. – Refunfuño molesto. –

—No pretendo hacerlo. – Pellizca mi brazo. —Ve y cógetelo de una vez, joder. Dile ya que sea tu novio, no puedo soportarte más, estás con esa mierda desde hace meses, cuando aún no le hablabas. Me sacarás canas verdes. – Se suelta. —Mientras yo iré a beber algo y mírame. – Gira mi rostro hacia él, tomándome de la barbilla. —Cuando vuelva, espero no verlos ni a él ni a ti aquí abajo ¿entendido?

—Cállate, Earth.

—No lo haré. Espera. Un incentivo más para él también. – Y a quemarropa me da un beso. No apasionado, ni largo. Pero sí lo suficiente para dejarme shockeado. —Listo, a por él, fiera. Adiós.

       Lo miro y sus ojos están super abiertos, quiero transmitirle con la mirada que no es lo que parece pero es muy tarde, él también se ha besado a ese tipo. Obviamente, mis pies se movieron solos a pasos furiosos, hacia él. Empujo a su P' de mala gana y lo tomo de la muñeca arrastrándolo fuera de ahí, a pasos rápidos. Furiosos.

—¡Déjeme! Ya es la segunda vez que hace esto. ¿Qué le sucede? ¡Mean! – Lo ignoro y sigo tirando de él con fuerza bruta. –

        Lo llevo por las escaleras de servicio, soportando sus duros golpes en mi brazo y espalda.

—¡Deje la estupidez y suélteme! ¡Animal!

        Sus golpes se hacen más constantes con su mano libre, por lo que aprieto más mi agarre en su muñeca, tratando de no lastimarlo. Pero la molestia es mucha.

—¿Piensa subir tantos pisos a pie? ¿Está loco? – Camina a mi lado solo para seguir golpeándome, en la clavícula y hombro, esta vez. –

        Soporto sus puños como un buen guerrero. Ya me desquitaré.