El corazón a veces se equivoca [Aristemo]

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Tu eras mi casa, mi lugar

Todo se acabo, déjame reconstruir

Un nuevo lugar, un nuevo hogar

Para ti, para mí, déjame cuidar de los dos, de mí, de ti

"Hogar", El corazón a veces se equivoca, track 12

Por un momento, Temo parece eufórico y algo emocionado, pero también preocupado por hacer este plan de manera que nada falle, nada se nos escape.

-Dices que empiezas por la República y terminas en Europa ¿no?- Se para y comienza a caminar de un lado a otro en el pequeño cuarto. Yo me limito a asentir.  -Yo también termino en Europa... ¡ya sé!- se le iluminan los ojos con esperanza. Camina hacia mi y toma mi cara entre sus manos. -Obviamente jamás me permitiría que alguno de los dos renuncie a sus sueños. Pero tampoco me daré el lujo de volvernos a perder. Así que te propongo algo: has la gira y yo haré mis presentaciones. En algún punto de México coincidiremos, lo sé, o lo haremos posible. Los dos terminamos compromisos en Europa, mi agenda aún no está confirmada, puedo mover todo para coordinarla con la tuya.

Sigo sin saber si es buena idea o si funcionaría.

-¿No crees que es mucho problema? Para ti, para Martín...

-No, no creo... puedo hacerlo funcionar, dame la oportunidad.

La esperanza corre por mi cabeza ¿será que todo pueda salir bien? Tomo sus manos en mis manos. Quiero hacer algo por él, por nosotros.

-Temo... cuando yo acabe esta gira... Arturo prometió que me daría un descanso... pequeño, no te espantes. Quiero que me dejes ayudarte con lo que necesites en tus presentaciones. Hablaba en serio cuando dije que quiero ser lo que tú has sido para mi tantas veces. No podría estar más que orgulloso de ti y de tu trabajo ¿qué dices? ¿Me dejas ayudarte a brillar?

Sus ojos se llenan de lagrimas y sus palabras no salen. Solo asiente con energía y una gran sonrisa en su rostro.

Lo haremos. Funcionará. Y después de estas locuras, podemos estar juntos y estoy seguro que esta vez será para siempre.

Tenemos un plan y hay que empezar a aplicarlo. Nos bañamos y me acompaña al aeropuerto. Él tiene que quedarse para hablar con Martín.

Yo llego a Guadalajara en una hora y media. Me siento feliz y con energías renovadas. Es la primera vez en mucho tiempo que me siento realmente fuerte para darlo todo en la gira. Presiento que es algo que se nota a simple vista porque Arturo me hace comentarios al respecto.

-¡Vaya! Déjame felicitar a Temo cuando lo vea. No sé qué hizo pero sea lo que sea, funcionó. Te ves feliz, radiante. Solo espero sigas así en el concierto.

-Es amor, Arturo, amor puro.- sonrio

Me preparan para la noche. Pruebas de vestuario y sonido. Yo tengo una petición para hoy y espero Arturo y los músicos no me la mienten, pues es acerca de una canción que llevamos años sin interpretar, sé que estaremos algo oxidados pero lo quiero hacer, la quiero cantar.

Las horas pasan volando y de pronto ya son las 8pm. Unos chavos de unos 18 años serán mis teloneros. Son una banda de rock alternativo, me recuerdan tanto a mi. Su emoción y nervio es palpable y me contagian. Después de 45 minutos se bajan del escenario con una adrenalina que reconozco y ahora yo me pongo algo nervioso pues ahora es mi turno.

Mis músicos y yo hacemos el ritual de siempre y ellos salen primero. En cuanto escucho que comienzan a tocar las primeras notas, hago mi propio ritual.

Salgo y todo el mundo lanza un grito ensordecedor. Ya extrañaba esta sensación. Me hace sentir vivo de nuevo. Los siguientes días con sus respectivas noches sucede lo mismo. Tengo energía, como si tuviera 17 años otra vez.

En cada ocasión que tengo, hablo con Temo. A él también le está yendo bien. Sus libros se venden como pan caliente, las personas hacen filas para conseguir su autógrafo y tomarse una foto con él, también para intercambiar ideas y opiniones. La prensa nacional está fascinada con él y no los podría culpar. Él está muy feliz y eso llena mi corazón.

Pronto, mi gira nacional acaba y es momento de continuar. Como Temo dijo, hicimos todo para poder coincidir en un Estado de México, Yucatán. Tuve dos noches de conciertos y un día después, Temo estaba en la FILEY. Ese fue un tipo de entrenamiento para mi.

Tuve que trabajar de la mano de Martín, repasamos los momentos y palabras clave de Temo y organizamos la firma y convivencia de ese día.

Yo estaba tras bambalinas, por así decirlo. Nuestra relación no iba a ser pública por el momento. Los dos merecíamos el reconocimiento por nuestros proyectos individuales y no quisimos distraer a nadie con lo nuestro. Después del evento, tuvimos la tarde para los dos.

Por cierto, la prensa se entretuvo con Jaime y su nuevo romance. Poco se habló de nuestro rompimiento, no hubo mucho escándalo al respecto, lo que fue un alivio para todos, dando lugar a que Temo y yo fuéramos reconocidos por nuestro trabajo.

Además, Jaime y yo nos hicimos amigos, no fue nada fácil, pues si le dolió lo que pasó, pero con el tiempo aprendió a aceptar lo que ya todos sabíamos. Y ahora es un gran admirador de Temo, aunque le cueste admitirlo.

Mi vuelo hacia Colombia salió en la madrugada. Me despedí de él en el hotel. Latinoamérica tiene su encanto. Las personas son cálidas, cada país tiene sus bellas costumbres y en todos lados me reciben con mucho cariño.

Rápido pasan dos meses y llega la hora de Europa. Mi gira está por terminar, llevo 52 de los 60 conciertos. En una semana llegará Temo a Madrid y yo ya no puedo aguantar las ganas de darle la sorpresa que se ha cocinado desde el principio de las giras y que de algún modo he logrado ocultarle.

Por fin, el tiempo pasa rápido y Temo llega a las 4:30pm y uno de los choféres va por él y Martín al aeropuerto. Los llevan al hotel. Obviamente es el mismo hotel donde me estoy hospedando. Mientras yo estoy en pruebas de sonido, ellos se instalan. Después, a las 6pm. nos vemos para comer.

En cuanto lo veo, no aguanto las ganas y corro hacia él, lo cargo y le dejo un beso en los labios, lo necesitaba mucho. Tanto Martín como Arturo nos dan "privacidad' y mientras ellos comen en alguna de las mesas más visibles del restaurante del hotel; Temo y yo estamos en la última mesa, al fondo, alejados de todos.

-Te tengo una sorpresa. Pero no te la puedo dar ahorita.-digo y alzo una ceja de manera juguetona.

Se ruboriza y suelta una risa nerviosa -¡Aristóteles Córcega! ¡Nos van a escuchar!

Me río con él. Lo extraño de todas las maneras que se puede extrañar a alguien... pero por ahora, no me refiero a "eso".

-Menso, no, no me refiero a... eso...- vuelvo a alzar una ceja.- es otro tipo de sorpresa. Sólo te puedo decir que esta noche, te necesito en el escenario. No, no te asustes, no saldrás, ni nada; estarás atrás. Junto a Arturo... puede estar Martín también, si quieres.

Me lanza una mirada de extrañeza

-¿Qué tramas, Ari?

-Ya verás... tu déjamelo todo a mi ¿O te da frío?

Niega con la cabeza y sonríe.-Sabes que yo contigo me atrevo a todo. 

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¡Hola, hola! la hermosa foto es del Instagram de Mi marido tiene más familia, fue del musical de este fin de semana en Guadalajara, la amé demasiado. Bueno, esta historia ya va llegando a su fin; espero la estén disfrutando tanto como yo. Nos leemos mañana, ¡gracias por todos sus votos y comentarios!