→˚₊· 𝑩𝒖𝒍𝒍𝒚𝒊𝒏𝒈 🧣 ੭*

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Al llegar hasta la casa, sacó la llave de su bolsillo y la colocó en la cerradura, abrió la puerta lentamente, rogando internamente que no hubiese nadie en casa, al entrar noto que las mochilas de sus hermanos estaban ahí y la de otra persona, le restó importancia y subió las escaleras dejando la puerta abierta detrás de él, al llegar al segundo piso camino lentamente hasta el baño, noto que no había nadie en casa, habían salido, cerró la puerta del baño y encendió el grifo de la bañera dejando está llenarse con agua fría, se miró en el espejo de arriba a bajo, se quitó la ropa que traía ya que esta estaba toda mojada por la lluvia, volvió a mirarse y noto marcas aún visibles en su piel, sintió asco al recordar lo pasado y agarró lo primero que sacó de las gavetas y arrojo al espejo rompiéndolo al instante.

Se adentró en la helada agua hasta que esta llegara a su rostro, tenia sumergido todo su cuerpo y mitad de su rostro, cerró los ojos y se sumergió por completo en el agua, se quedó así por varios minutos, hasta un punto en el que el aire le hacía falta, en un momento de pánico sacó su cabeza rápidamente y dio fuertes bocanadas en busca de aire. Lágrimas comenzaron a bajar por su mejilla y sus pensamientos comenzaron a recalcarle lo inútil que era. Su plan no resultó, no podía morir ahogado, se quedó varios minutos dentro de la tina llorando, y limpiando con fuerza su cuerpo.

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—Esta lloviendo demasiado— dijo el azabache.

Los tres estaban en una parada de autobús en busca de mantenerse secos. Al llegar a la casa y ver que en esta no se encontraba Geno, habían salido en busca de él, pero mientras iban caminando comenzó a llover de repente, las gotas aumentaron su intensidad hasta el punto de hacerlos correr hasta una para de autobús en busca de techo.

—No podemos seguir buscándolo si el clima sigue así— murmuró el de lentes mientras sacaba la mano para que las gotas cayeran en esta.

El de capucha sacó su celular del bolsillo y lo desbloqueó, busco un contacto en especifico y llamo "el número al que usted a llamado se encuentra apagado o fuera de servicio" dijo la otra voz en la línea, soltó un ligero suspiro y se volteó a ver a los hermanos.

—Volvamos— dijo con una sonrisa que no demostraba felicidad —llamaré para que vengan por nosotros. Prometo que saldremos a buscarlo después de que la lluvia baje— dijo marcando un número en su celular —¿Dónde estás Geno..?— murmuró antes de que le contestaran.