Unidos por un grave error. [Michael Clifford]

Tejado.

Voy hacia el patio, no quiero ir a clase, ¿Por qué todos creen que me gusta Mike? A ver, no me disgusta cuando me coge de la cintura y sus ojos... No, nada de eso. Voy hacia unos arbustos para que ningún guardia m pille. Me recuesto en un banco.

-Sam, despierta, es hora de irse a casa.-Dice alguien en bajito en mi oído.

-¡Déjame¡-Digo gruñendo.

-Va.-Dice tirándome al suelo, ay joder.

-Me has hecho daño puta.-Digo lamentándome, es Megan.

-¿A qué viene lo del mensaje?-Dice extrañada.

-Megan, Ash ha venido esta mañana a mi casa con una navaja, me acosa.-Digo con la cara apagada evitando que una lágrima se deslice por mi mejilla al recordar la fría hoja de la navaja en mi cuello.

-Se lo tienes que decir a alguien que te ayude.-Dice levantandome con cuidado con cara de preocupación.

-No, no quiero que la gente se alarme, no creo que siga.-Digo quitándole importancia.

-Sam, te la estas jugando.-Dice apuntandome con el dedo índice.

-No tiene valor para hacerme nada.-Digo suspirando.

Llego a la esquina, la que será a unos metros de mi casa, oigo unos pasos detrás mía.

-Mike, que quieres.-Digo girandome en seco.

-Saber que me ibas a decir, me has dejado pensándolo todo el día.-Dice detrás mía.

-Ponte a mi lado, no me gusta que me miren el culo.-Digo.

-No te estoy mirando el culo...-Dice riéndose y yo le miro.-Vale, vale, te lo estoy mirando.

-A ver Mike, no pasa nada, ya esta.-Digo algo mosqueada.

-No se por que me da la sensación de que pasa algo, y muy grave.-Susurra y yo sigo andando hacia mi casa.

******

-Hija, a cenar.-Dice mi madre.

-Mamá, no tengo hambre.-Digo y ella no contesta. Salgo de mi habitación sigilosamente hacia las escaleras de la buardilla. Subo con cuidado, y veo que que hay una ventana. La abro y subo al tejado, aquí se está de puta madre. Me llega un mensaje.

-Sam, por favor, sea lo que sea lo que pase, lleva cuidado. Mike. (22:09)

-No pasa nada, olvida el tema. Sam. (22:10)

-Te estoy viendo, mira al frente. Mike. (22:12)

Alzo la vista y allí esta, observándome. Le sonrío inconscientemente, vive en frente mía y yo sin saberlo. Él me guiña un ojo mordiendo se el labio... AYYYY DIOOOS.

*Narra Mike*

Me muerdo el labio, le guiñó el ojos y ella me mira algo sonrojada. La verdad es que me atrae bastante, su carácter enigmático y su mirada sincera. La oigo reírse, creo que sabe que esta sonrojada.

-Mike, baja ya, alguien ha venido a verte.-Dice mi madre. Me despido de ella y me manda un beso. Bajo rápidamente hasta la puerta, mi jefe.

-Que pasa.-Digo serio.

-Nos tiene que llamar el o la nueva distribuidora de la cocaína, tu te encargarás del principiante.-Dice y se larga, joder, menuda mierda.