Malteada

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Chaeyoung POV

Un mes pasó volando, pasaron muchas cosas. Mi amistad con los chicos se hacía cada vez más fuerte, era cómo si nos conocieramos de años. Cuando no estábamos ocupados aprovechabamos en salir en grupo, las horas pasan como segundos cuando estoy con ellos. También me he percatado de que hay muy buena química entre algunos, parejitas se van formando.

Recuerdan a esa arrogante chica Tzuyu?, esa chica cree que estamos en una película como "Chicas pesadas". Trata de hacer menos a los demás sobretodo a mí, me encanta verla tan frustrada cuando no logra su cometido. Las chicas dicen que lo hace por que tiene celos de verme con Jungkook, pero ni al caso, nosotros sólo somos amigos.

Ya mencione que uno de mis lugares favoritos era la cafetería? Pues lo es. Me dirigo a nuestra mesa de siempre con una malteada de fresa en mis manos. Tenía muchas ganas de tomar una desde que llegué.

Lastimosamente no pude tomar ni un sorbo, por que ahora estaba esparcido por todo el piso y en parte de la ropa de Tzuyu.

- Mira lo que hiciste estúpida!!.- me gritó mientras veía horrorizada su condición.

- Lo siento, pero sabes que te lo buscaste.- ella no es la víctima, al estar frente mío trató de hacerme tropezar para que me cayera la malteada a mí, pero le salió al revés.

- Maldita sea!!.- sin previo aviso sentí cómo el líquido de un vaso de café recorría la parte superior de mi cuerpo.

- No trates de hacerte la fuerte Park, sabes que no lo eres.- me miró con recelo.

- Ya déjame en paz! Esto no es High School Musical niña, mejor concéntrate en estudiar que se nota que te falta.- desde que la conocí no para de molestarme y tratar de dejarme mal.

De pronto sentí su mano derecha chocar contra mi mejilla. Todas las miradas estaban sobre nosotras y se escuchaban murmullos. Escuché las voces de las chicas acercarse cuándo le devolví el golpe más fuerte.

Tzuyu iba a lanzarse sobre mí pero un chico desconocido para mí la cogió del brazo llevandosela consigo.

- Yo la mato!.- tomé el hombro de Jennie antes de que fuera detrás de ella.

- Chae te encuentras bien?.- Lisa tomó mi mejilla aún roja por el golpe.

- Te duele mucho?.- se acercó Jisoo para ver.

- Estoy bien, no se preocupen.- me ardía la mejilla pero no quería preocuparlas más.

- Está loca! Cuál es su problema!?.- Jennie se veía muy molesta y no era para menos, yo también lo estaba. Nose que habría llegado a hacer si ese chico no se la llevaba.

- Ni yo lo sé Jennie, pero no se saldrá con la suya.

- Te traeré ropa seca, ve a los vestidores.- Jisoo unnie me ordenó mientras se iba corriendo.

Fui a los vestidores de el gimnasio a esperarla.
Pasaron unos minutos cuando sentí unos pasos acercarse.

- Rosé, estás aquí?.- esa no era Jisoo.

- Jungkook?

- Eh sí, Jisoo me pidió que te trajera esta ropa, tuvo que ir a clases.

- Gracias Jungkook.- me asomé y lo encontré con una pequeña mochila que pertenecía a Jisoo. Me la entregó mirando hacia un lado con un leve sonrojo.

Mi blusa! El café hizo transparente mi blusa!

Rápidamente me tapé con la mochila y fui a cambiarme.

Cuándo salí Jungkook seguía ahí con su celular.

- Jennie me contó lo que sucedió.- fue lo primero que me dijo al verme.

- Aish fue tan vergonzoso.- me tapé la cara con frustración, hicimos un espectáculo frente a todos.

- No entiendo, Tzuyu siempre fue muy linda y tierna.- no puede estar hablando enserio.

- Estás bromeando?! es arrogante, engreída, narcisista.. - podría haber seguido si no fuera por Jungkook.

- Tranquila, tranquila... La odias tanto?

- De que estás hablando? Ella se ha empeñado en hacerme la vida imposible desde que llegué.

- Yo la conocí de diferente forma

- Puede ser "tierna" contigo, pero conmigo es el diablo.- cómo puede ser tan falsa?.- además no pude ni probar mi malteada por su culpa.- hice un puchero.

- Podemos ir por una saliendo de la universidad.- me ofreció con una sonrisa.

- Enserio?.- lo miré esperanzada.

- Claro que sí, ahora vamos o llegaremos tarde a clases.- me rodeó por los hombros y salimos de los vestidores.

Salí de mi salón y me dirigí a mi casillero, era la hora de salida.
Jungkook apareció apoyándose en los casilleros al lado del mío.

- Lista Rosie?.- me preguntó mientras colgaba mi mochila en su hombro.

- Lista, vamos.- comenzamos a caminar por los pasillos hacia la salida.

Volteé mi vista hacia las escaleras, encontrándome con Tzuyu. Si las miradas matarán, yo ya estaría enterrada. Seguí mi camino hacia la puerta. Aún sentía una mirada posada sobre nosotros, supuse que era Tzuyu.

Llegamos a la cafetería donde me reencontré con las chicas y nos sentamos en una mesa al lado de una gran ventana. De inmediato un chico alto se acercó a nosotros.

- Buenas tardes, que desean ordenar?.- nos preguntó con una sonrisa.

- Yo quiero un americano y un sándwich por favor, Rosie..?

- Eh yo quiero una malteada de fresa y una torta de chocolate por favor.- ordenamos y el chico se dirigió al mostrador dejándonos solos.

Miraba con atención el parque frente a la cafetería, las familias paseando y jugando me recordaban a mi infancia. Lamentablemente el tiempo no se puede retroceder.

La voz de Jungkook hizo que dejará esos pensamientos de lado.

- Y que tal vas en tus estudios? Estudias fotografía verdad? Al igual que Taehyung.- me preguntó mientras esperabamos nuestra orden.

- Sí, voy muy bien, es genial cuándo es algo que te gusta. Y tú estudias..

- Administración de empresas, ya sabes, futuro heredero de Jeon's company..- claro, era obvio.

- Cierto, pero te gusta?.- a veces algunos se ven obligados a estudiar algo sólo para seguir con la tradición familiar. Espero no sea el caso.

- No te preocupes, fue mi elección.- parece que leyó mis pensamientos.- ver a mi padre manejar la empresa me dió ganas de hacerlo también.- soltamos una pequeña risa y casi al mismo tiempo trajeron nuestra comida.

- Que lo disfruten.- nos dijo amablemente el mesero.

- Gracias.- dijimos al unísono provocando otra risa de parte de ambos.

Me siento tan cómoda con él, al fin siento esa seguridad que por mucho tiempo no tuve.


Desde cero - RosekookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora