Lo que callamos -Marco Asensio

Capítulo 17

Último día en Mallorca

Narra Victoria

Hoy nos vamos a Zaragoza. Tengo una mezcla de sentimientos que no me entiendo ni yo: estoy triste, nerviosa, entusiasmada, deprimida, feliz, enfadada... Este tiempo ha sido genial, todos se han esforzado en hacerlo inolvidable y estoy y estaré eternamente agradecida. Tienen un gran corazón.  Las cosas con Marco son igual que antes y estoy super contenta por éso. El Mallorca entendió que me tuviese que mudar y me vendió al Zaragoza como con los futbolistas profesionales. Lo que siento hacia Marco no se lo he dicho, pero es que no merece la pena porque no voy a estar y para que encimame diga que no me quiere pues paso. El avión sale por la noche, a las 22.30 pero tenemos que estar ahí a las 20.00 porque siempre hay que ir con tiempo de margen por lo que pueda pasar. Nuestras cosas ya están en Zaragoza,  en nuestra futura casa porque se las llevó hace unos días el camión de la mudanza. Hoy por la mañana he quedado para despedirme de todos.

-Victoria- me grita Laura al verme llegar.

-Hola, te falta tiempo para gritar- nos reímos todos.

-Como todos sabemos que las rubias son tontitas no me tomaré eso enserio- contrataco.

-Cuidado con el Premio Nobel- todos estallamos a carcajadas, y es que, aunque parezca una conversación de gente que se lleva mal nosotros somos así. Eso sí, estamos para todo, para lo bueno y para lo malo.

-Chicos hoy tiene razón la rubia. Eso si tenemos que compadecernos por los pobres zaragozanos que la van a tener que soportar y eso es un castigo.

-Definitivamente Asensio eres inútil- nos reímos y me da un abrazo, cuanto voy a echar de menos estos momentos, sólo de pensarlo me entran ganas de llorar.

La tarde transcurre tranquila, entre despedidas, recordando momentos del pasado, abrazos, risas y alguna que otra lágrima. Cuando llega la hora que me tengo que ir porque sino pierdo el avión y aún tengo que comer.

-Chicos, ya es la hora, me tengo ir o pierdo el avión y encima me voy sin comer y el castigo os lo quedareis vosotros, aunque no.estoy de acuerdo con eso de soy un castigo porque lo que soy es una bendición- intento bromear porque sino sé que voy a llorar y no quiero- Os voy a echar muchísimo de menos, nos tenemos que ver pronto. Si alguna vez vais a Zaragoza tenéis una casa allí. Os quiero, gracias por todo- me despido de ellos mientras nos abrazamos, esto está siendo demasiado duro-  Me tengo que ir ya, os quiero.

- Victoria, te acompaño que me va de camino para mi casa que hoy tengo que llegar pronto. Hasta luego chicos- mejor, así me puedo despedir más tranquilamente de mi mejor amigo.

Vamos caminando tranquilos, haciendo bromas y riéndonos. Hasta que empezamos a estar muy cerca de mi casa y me entran unas ganas tremendas de llorar que intento contenerme. Al llegar a la puerta:

-No me puedo creer que te mudes. Te voy a echar tanto de menos, ahora que lo habíamos arreglado todo. Gracias por todos estos años Victoria, pero que quede claro que no es un adiós, que es un hasta luego porque nos vamos a volver a ver y vamos a estar en contacto. Demuestrales a los zaragozanos quien manda y mete muchos goles porque aunque no los pueda ver y no compartamos ningún entreno sé de sobra que les vas a dejar con la boca abierta desde el minuto uno. Te quiero rubia- es estos momentos yo ya estoy llorando entre sus brazos.

-Gracias por todo Marco, por estar ahí siempre aunque hayamos tenido nuestros altibajos, por aguantarme, comprenderme, apoyarme cuando ni yo lo hacía, por dar la cara tantas veces por mí, por intentar protegerme siempre y mucho más. Estoy y estaré eternamente agradecida. Eres el mejor, sigue jugando a fútbol como lo haces porque quiero ver como levantas la Champions con el Real Madrid y cumples tu sueño, nuestro sueño y el de ella. Pero sobre todo se tú mismo porque eres una persona fantástica. Gracias por todos estos años Marco, te quiero. Nos vemos muy pronto Asensio- nos volvemos a abrazar y estamos así unos minutos hasta que me tengo que ir ya.

Llegamos al aeropuerto, hoy está siendo un día de muchas emociones y mañana será otro día con muchas emociones.
Acabamos de embarcar, me ha tocado ventanilla, no paro de mirar el paisaje y recordar todos los momentos y personas que dejo atrás. En Mallorca he sido muy feliz pero a la vez he sufrido muchísimo, hay una cosa que me está matando y es dejar ahí a mi padre porque ya no podré "hablar con él". Entre pensamiento y recuerdo me duermo con la cabeza apoyada en la ventana. Tras una hora y pico de vuelo me despierta mi madre para decirme que vamos a aterrizar. No puedo dejar de mirar por la ventanilla, tengo ganas de ver cómo será mi nueva vida.

Acabamos de llegar a casa, la inspecciono y elijo la que será mi habitación, ahora sólo falta acabar de  amueblarla porque tiene casi todo, sólo le falta el escritorio y una estantería. El armario, mesilla, cama ... ya los tiene. La casa está casi entera  amueblada sólo falta algún pequeño detalle. Como no hay nada en la nevera bajamos a cenar al restaurante de abajo y al acabar de cebar subimos a casa y nos vamos directamente a dormir. Mañana ya colocaremos todo en su correspondiente sitio, limpiaremos la casa entera y buscaremos muebles para acabar de amueblarla. Nada más me meto en la cama caigo rendida, hoy ha sido un día movidito y necesitaba descansar.

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Feliz Semana Santa. Espero que os guste el capítulo, dadle a me gusta, comentad y decid cómo y en qué puedo mejorar.

Una lástima lo de la Catedral de Notre Dame de París. Se ha perdido un monumento de incalculable valor cultural a nivel internacional y cultural.