A pesar de que había regresado al dormitorio para dormir, Katherine no consiguió pegar ojo hasta altas horas de la madrugada. No podía dejar de pensar en la niña, de preguntarse por qué la Sombra actuó de esa forma y de idear posibles razones por las que Pan quisiera que se quedara en la Isla.
- ¡Ay! – se quejó al sentir un golpe contra la cabeza. Al darse la vuelta, se encontró a Jack riendo. – ¡Jack! ¡¿Qué diablos te crees que haces?!
- No he sido yo. – se excusó. – La piedra la ha lanzado Charles.
Miró al chico de pelo castaño y esté se encogió de hombros, negando con la cabeza inocentemente. Los dos eran buenos mentirosos, y también parecían igual de sospechosos.
- No les riñas por eso. – masculló Zorro agarrando un par de troncos para transportar al campamento. – Si estuvieras más atenta y dejarás de embobarte todo el rato, no serías un blanco tan fácil.
- No estoy embobada, – protestó. – tan solo pienso.
- ¿En qué? ¿En tu escapada de anoche? – cuestionó con burla.
- Se rumorea por ahí que Pan y Katherine... – comenzó Charles con picardía.
- No es un rumor. – bufó Jack. – Es la pura verdad.
- Callaos los dos. – gruñó Zorro. – ¿No tenéis trabajo que hacer?
Ambos niños asintieron con la cabeza, dejaron de lado las bromas y volvieron a coger varios trozos de leña antes de desaparecer entre los árboles en dirección al campamento. Sin embargo, lo que menos deseaba Katherine en esos momentos era quedarse a solas con Zorro.
- ¿Es verdad? – inquirió mirándola de reojo.
- ¿El qué?
- Que otra vez te has escabullido para ir con Pan.
- No pienses nado raro.
- ¿Qué debería pensar? – la interceptó.
- Solo estuvimos hablando. Me contó una historia de algo que ocurrió hace años en la Isla.
Sus palabras parecieron llamar la atención del chico, por lo que se giró para mirarla, aunque seguía sin tener buena cara.
- ¿Y bien?
- No lo sé. – se encogió de hombros. – Creo que aún falta bastante parte de la historia.
Zorro seguidamente negó con la cabeza y suspiró. Su actitud comenzaba a molestar a la chica cada vez con más rapidez.
- ¿Por qué no puedes dejar de tratarme como si te decepcionara cada cosa que digo?
- Porque es la verdad, Kath. Porque me decepcionas.
Ella abrió la boca con indignación, dispuesta a rebatir sus palabras, pero ni si quiera sabía cómo hacerlo si no entendía sus motivos.
- Así que acusas a los niños de vagos y tú tampoco das un palo al agua, Zorro. – la voz de Félix a sus espaldas logró cortar la conversación. – ¿Por qué no haces algo en lugar de molestar a Katherine con tu actitud?
- Sí, Félix, por supuesto. – la ironía y la molestia eran palpables en su voz. El moreno agarró otro trozo de madera y pasó al lado de la chica bruscamente, aunque el golpe de su hombro no se lo llevó ella, sino Félix.
- ¿Estás bien? – le preguntó Kath al estar solos.
- Sí, claro. – aún así, los huesos de su mandíbula estaban apretados, aunque puede que fuera de rabia.
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The Hell of Neverland | Peter Pan
أدب الهواةNunca Jamás no es el paraíso donde desearías estar. Peter Pan no es el chico del que te deberías enamorar. 15/9/2020 ➞ #1 peterpan #1 neverland 26/5/2022 ➞ #1 pan #2 peterpan #2 storybrook ⇝ Originalidad. Di no al plagio. ⇝ No lectores/as fantasmas