The Hell of Neverland | Peter Pan

Capítulo 8.

A los veinticinco días que ya había pasado en esta Isla, hubo que sumarle siete. Una semana después de todo lo ocurrido aquella noche bajo las estrellas, Kath seguía conviviendo con esos niños y descubriendo algo nuevo sobre la magia cada día.

Muchos de los niños perdidos no venían de su mundo, sino del Bosque Encantado, lugar en el que vivían los seres de los cuentos, desde princesas, hasta hechiceros y villanos.

Félix era el único que provenía del mundo de Katherine, "El Mundo sin Magia", aunque de una época mucho anterior. Una mañana, mientras él despellejaba varios animalillos que habían cazado, Kath se animó a preguntarle.

- ¿Cuánto tiempo llevas aquí?

Odiaba verle manipular los cadáveres de los animales, pero era el momento idóneo para que no la esquivara u optara por cambiarle de tema.

- ¿Por qué iba a llevar la cuenta?

- Yo la llevo. - apuntó.

- Eso es porque solo llevas días.

- ¿Cuánto llevas tú? ¿Años?

- Bastantes años, sí.

- ¿Décadas? ¿Siglos? - insistió.

Félix suspiró antes de responder. No le gustaban sus preguntas porque no sabía hasta qué punto Pan querría que las contestase.

- Varios siglos.

Katherine pestañeó atónita. Ese chico que aparentaba tener, como mucho, un par de años más que ella, en realidad había vivido durante siglos en esta Isla. Era inconcebible para cualquier ser humano racional, pero claro, en Nunca Jamás casi nada se podía explicar según la razón.

- ¿Nunca has pensado en irte?

- ¿Para qué iba a hacerlo? Este es mi hogar.

Esa misma tarde repitió la estrategia con Zorro. Durante los tres primeros días después de que Peter los descubriera en el bosque, el chico no había recibido ningún castigo, mas le había tocado realizar mayor número de tareas que el resto de niños; razón por la cual se les había hecho casi imposible verse.

- ¿Cuánto tiempo llevas aquí? - soltó Katherine de repente.

Zorro, quien estaba tumbado en una hamaca colgante entre dos árboles, abrió un ojo para mirarla con molestia.

- ¿A qué viene eso?

- Curiosidad. - masculló encogiéndose de brazos

- Llevo mucho tiempo. - respondió antes de volver a cerrar el ojo, aún sabiendo que eso no iba a bastar para que dejara de molestarle.

- ¿Más que Félix?

- No, claro que no. - se burló. - Él debió de ser el segundo niño perdido, seguramente.

- ¿El segundo? ¿Y quién fue el primero?

- ¿Quién va a ser? Pan.

La chica arrugó el entrecejo mientras en su mente trataba de conectar toda la información de la que disponía. Había supuesto que Peter ya sería un habitante de Nunca Jamás desde su creación, pero al parecer se equivocaba. Kath recordó que todos los niños que venían anhelaban la libertad y vivían marcados por la soledad; lo que le hizo preguntarse cuáles habrían sido los motivos de Pan para llegar.

- ¿Recuerdas a tu familia?

Zorro tardó más en responder, pero volvió a abrir los ojos y se dio la vuelta hacia ella para observarla de lado.