Mi Psicóloga (COMPLETA)

36.Cuando quieras

35. Cuando quieras.

Sadie estaba al lado de Jungkook caminando hacia un lugar que ella desconocía. La suave brisa movía con lentitud su pelo, igual que sus pasos para nada acelerados. Kook miraba a los edificios y a las personas que también paseaban a esas altas horas. Y la pelinegra siempre miraba al suelo. No porque no quisiera hablar con Jungkook, era porque estaba tan sumida en sus pensamientos que no se daba cuenta del silencio para nada incomodo que se había producido. Cuando llevaron un par de calles recorridas, él le agarró el brazo sutilmente y cambió la dirección. Ella se sobresaltó.

-Lo siento, me había equivocado de calle - sonríe y ella también lo hizo por inercia. - pero estamos a punto de llegar.

-Gracias... - miró de nuevo al asfalto, sin embargo, estaba ya harta de luchar contra sus pensamientos, así que decidió hablar. - ¿A dónde vamos?

- Pues... - se rascó la nuca - es una discoteca a donde va mucha gente adinerada, por así decirlo. A los famosos les encanta ir allí porque pasan desapercibidos por la gente. Muchas veces me lo han comentado, pero siempre he rechazado la oferta. Aunque algunos de mis compañeros si han ido...

- Ah - comentó intentando no pensar en Jimin - supongo que debe de estar muy bien.

- Si, han comentado muy bien de ella... oh, esta creo que es - la pelinegra al levantar la cabeza vio un letrero sutil y atractivo que ponía ¨Cool¨.

Al entrar vio como muchísima gente estaba en la pista de baile, y mucha más en la barra y en las mesas. En ese instantes e sintió diminuta ante toda esa gente con sus conjuntos llamativos y sorprendentes y la música que retumbaba por todos lados del recinto. A la mayoría de gente le encantaba este tipo de lugares, pero...

-¿estás bien? - preguntó Jungkook en un grito. Ella lo miró con ojos expectantes y el solo observó su rostro - podemos irnos si ves que te sientes presionada...

-No, está bien así - entrelazó sus brazos y sonrió. - solo estoy un poco impactada, hace mucho que no voy a sitios así.

Jungkook sonrió y la empezó a guiar a la barra, donde pidieron algo para tomar. Tomaron dos bebidas alcohólicas, fue así como prefirió llamarlas sadie, porque los nombres que le habían dicho el camarero no era para nada sencillos.

Se sentaron en un ancho sofá donde estaban sentados otras dos personas. No les dieron mucha importancia y empezaron a beber de sus bebidas viendo como la gente se divertía moviéndose en la pista de baile.

-Algunas veces pienso en cómo pueden disfrutar estando entre tanta gente - comentó Sadie, Jungkook sonrió.

- Supongo porque se olvidan de que la gente les están mirando o algo así - miró a la pelinegra que miraba con curiosidad a aquel punto de la discoteca - es como el baile, sientes la música, te mueves al son de ella y punto.

- Ya veo... - mira a Jungkook que toma otro trago de su bebida, ella tragó saliva. Él no se dio cuenta.

- ¿Qué te hace estar así? - Dejó su bebida en la mesa e hizo como que llevaba gafas y una libreta - ¿Cómo te sientes? Puedo ser tu psicólogo por un día.

Le guiñó un ojo y ella rió de su propuesta, el hizo un puchero.

-Anda, dime - alargó la ¨e¨ y ella se apegó a él para hablar mejor sin tener que gritar.

- Corté con mi novio. Bueno, el cortó conmigo - el frunció el ceño.

- Ah... ¿Y ya está? Es decir ¿cortó sin darte ninguna explicación? - dijo extrañado, ¿Quién cortaría con alguien tan simpática como ella? - debe de ser muy tarado para cortar con alguien como tú.