Crush. >> Min Yoongi 《Yoongi y Tu.》 EDITANDO

Capítulo Veintiocho. "Te extrañé".

T/N:

- Mi amor, ven siéntate. - Sook me tomó por los hombros, me guío hasta quedar sentada en el sofá de la sala de estar, el cual tenía aún el plástico, estaba nuevo.

Alce las cejas esperando una explicación a lo que acababa de ocurrir, no podía creerlo, me molestó, claro que me molestó, aún así lloré. ¡No se porque siempre lloro!. ¡Además... no, no tengo palabras, que estrés. Quiero decir muchas cosas, pero no se que cosas son las que quiero decir. ¿Me explico?. Es difícil, yo no quería que esto pasara, por alguna razón siempre lo tuve en secreto. No quería ser humillada en Internet, pero también confío en que lo hago bien, ¡aún así, no debieron!.

Aún no es todo tan explícito, Hoseok, es obvio que el fue, ¡pero!. ¡¿Porqué sin mi permiso?!. Hoseok, quiero lanzarte por el puente que está arriba del río Han, pero te amo tanto, no puedo hacer eso. ¿Qué dirán de mi?, no quiero ir a la cárcel por haber lanzado a mi mejor amigo por un puente, y sólo porque subió un vídeo mío ¡a YouTube! en donde yo canto. Que loco. No quiero manchar mi reputación.

Solté un suspiro cansado, mi rostro se relajó un poco, Lisa y Jisoo se encontraban sentadas en suelo al frente de mi, Sook a mi lado acariciaba mi cabello. Apoyé mis codos en mis rodillas, pasé las palmas de mis manos frustrada por mi rostro. No quería hacer el ridículo en Internet, eso era todo, ¿Porqué tuvieron que hacer eso sin mi consentimiento?.

- ¿Sólo quiero saber porque lo hicieron?. - solté. Mi madre sólo se fue a la cocina después de darme una mirada, sabía perfectamente lo que decía esa mirada, decía mucho; "ellas lo hicieron porque te quieren, no le reclames". Conozco muy bien a mi madre, sus miradas me dicen mucho a la vez que poco.

- Tienes un gran talento que debes aprovechar. - la primera en hablar fue Sook. Pasó su mano por mi espalda, yo llevé mi mirada hacia Lisa, la cual me sonrió para tratar de solucionar todo. - Tienes una hermosa voz que debes aprovechar, el mundo tiene que conocer tu talento. - las palabras reconfortantes de Sook resonaron por toda mi cabeza.

Sólo soy una de tantas. ¿Qué diferencia hay?. Yo... soy feliz con mi carrera de diseñadora, no quiero, aunque me encante cantar, escribir, no me siento cómoda expresando eso en público. Lo tuve guardado tantos años.

- Sin mi consentimiento. ¿Me preguntaron si yo quería?. - giré hacía Sook, su rostro de torno pálido. Oh no, creo que me pase, lo hicieron por mi, no para dejarme ridículo.

Respire hondo para poder calamarme, sin aviso sólo encadene mis brazos en la cintura de mi amiga, para así esconder mi rostro en su pecho cubierto por una camisa que ahora que me doy cuenta es de Jaebum.

- Gracias, pero no me siento segura con esto. - mi amiga rápidamente correspondió al abrazo, no pasó mucho cuando sentí a las demás chicas unirse al abrazo.

- Lo siento, no debimos hacer eso. - se disculpó Sook. Sonreí apegandome más a su pecho.

Mis amigas son mis amigas, son mis mejores amigas, como mis hermanas, son la familia que está en otro país muy lejano a donde estoy, ellas ocupan ese lugar. Aunque me molestó lo que hicieron, se que no lo hicieron con malas intenciones. Oh no, ¡¿Otra vez?!, ¡¿Porqué seré tal débil a todo esto?!. No pude retener mis lágrimas, salieron a la luz, como mi canción dedicada a la persona que más he amado en este mundo.

- No llores, mi amor. - habló Sook acariciando mi cabello, eso lo único que hacia era que me dieran más ganas de llorar.

- No le digas eso, va a llorar más. - escuché hablar a la persona que más me conoce; mi madre.

Escuché la puerta abrirse, a la vez cerrarse de la misma manera. Me separé un poco de Sook, las chicas hicieron lo mismo para ver la razón de porque se abrió la puerta. Con el dorso de mi mano limpié las gotas de agua salada que caían por mis mejillas, me incorporé por completo. Pronto mis ojos captaron esa cabellera roja que tanto conozco, había jugado mucho con ella ayer; Hoseok.