tattoo // changjin

v e i n t i d ó s

Changbin sonrío cuando abrió la puerta de la habitación esa noche. Había sido un largo día y había pasado la mayor parte de este alejado de Hyunjin, así que lo único que le apetecía en ese momento era estar con él, abrazarle y dejar dulces besos por todo su rostro. Era lo único que iba a hacer, o al menos, lo mínimo.

Por eso cuando entró en la habitación y vio a Hyunjin riendo junto a Jeongin y Seungmin se frustró un poco. No le molestaba en absoluto que estuvieran ahí, pasándolo bien. Es más, adoraba ver a sus amigos reír así, pero sí que quería estar a solas con Hyunjin.

Sin embargo, sonrió ampliamente sin poder evitarlo al ver como Seungmin empezaba a golpear a los otros dos chicos y se lanzó a la cama, cayendo sobre dicho chico. Este al principio se quejó pero después empezó a reírse también, luchando por librarse del mayor.

—Es muy tarde para que unos bebés como ustedes estén jugando todavía —rió Changbin, despeinando al menor de todos.

—A veces eres peor que Chan —bufó este, haciendo un divertido y adorable puchero sin darse cuenta.

—¡Oye! ¡Yo soy mejor que Chan! Soy más guapo y divertido...

—Ah, en serio, hyung. Es mejor que lo dejes —Seungmin sonrió, negando con la cabeza, pero no se esperaba que fuese atacado por el aegyo del mayor—. Listo, me voy de aquí.

—Yo también.

Los dos menores se levantaron de la cama, haciendo que Changbin hiciera un puchero, todavía con más aegyo.

—Chicos esperen, hoy dormiré con vosotros también —añadió Hyunjin, levantándose de la cama tras los dos chicos.

—¡Oye! —se quejó Changbin entre risas, pero alcanzó a coger la mano del rubio. Los dos menores salieron de allí y se podían escuchar sus risas alejándose por el pasillo. Changbin aprovechó que aún sostenía la mano de Hyunjin para tirar de él y acercarle a su cuerpo.—. ¿Ibas a irte?

—Quizás si haces aegyo otra vez.

—Sabes que te encanta que lo haga —dijo Changbin, haciendo reír al menor. Este simplemente besó sus labios dulcemente, colocando ambas manos en las mejillas del más bajo mientras que este rodeaba su cintura.

Los labios de ambos se movían al mismo ritmo, poco a poco exigiendo más, profundizándose hasta que ambos chicos quedaron tumbados en la cama, Changbin tumbado bajo el menor.

Al moreno siempre le había gustado llevar el ritmo de los besos, de las caricias y del sexo. Le gustaba ser el dominante... pero con Hyunjin, con Hyunjin todo era diferente. Le gustaba que le tratase con superioridad, como si fuera un bebé. Le gustaba que le llenase la cara de besos y que le exigiese que hiciese cosas. Le gustaba tenerle sobre él, dominando la situación, quizás un poco tímido pero con las ideas claras.  Y le gustaba sentirle dentro. Ansiaba repetir aquel momento de la otra vez, ansiaba volver a ver los ojos de Hyunjin llenos de lujuria, con las pupilas dilatas y brillantes. Ansiaba...

—Changbin, todavía no hemos hecho nada y ya estás duro —se rió el menor, cortando los pensamientos del chico, quien gruñó.

—¿Acaso es un problema eso?

—Nop —rió Hyunjin—, solo quería asegurarme de que tu mente no estaba en otro lugar.

—Solo en ti, pequeño.

Hyunjin escondió su rostro enrojecido en el cuello del menor y aprovechó para comenzar a dejar una larga hilera de besos húmedos. Le sacó la camiseta tan pronto el mayor se lo permitió y comenzó a dejar besos por ahí, permitiéndose marcar la piel. Changbin jadeaba lentamente, acariciando la espalda del menor, sacando poco a poco su ropa.

Pronto, Changbin giró a Hyunjin, sentándose sobre él, ambos aún con la ropa interior puesta. El menor estaba duro y Seo podía sentirlo bajo él. Aquello le excitaba cada vez más. Comenzó a hacer movimientos sobre él, rozando su trasero y su entrepierna con la del rubio que le miraba mordiéndose el labio inferior.

—Hyung —jadeó.

Changbin frunció el ceño y se acercó a los labios del menor para besarlos, todavía moviéndose lentamente sobre su entrepierna.

—Me llamas así de nuevo y paro —le amenazó.

—No seas malo, Binnie.

Le gustaba que le suplicase.

Sintió la mano del menor en su trasero y poco a poco Changbin se quitó de encima de él. Bajó la ropa interior de Hyunjin, liberando su erección y la envolvió con mano. El chico jadeó con fuerza al sentir los fríos dedos del menor envolver y moverse en su pene, pero eso no era nada con el placer que empezó a sentir cuando observó como se introducía el miembro en la boca.

—Bi-binnie...

El chico trató de no sonreír mucho y se centró en lamer el pene del menor, recorriendo con su lengua toda la longitud de este y haciendo círculos en el glande, incluso mordiendo ligeramente sin hacerle daño. No había ninguna duda de que Changbin sabía hacerlo bien.

Hyunjin estaba extasiado por el placer. No podía esperar más, quería hacerlo ya, quería entrar en el menor y hacerle sentir igual de bien. Por eso no se cortó en tomar la mandíbula del mayor y acercarlo a su rostro para dejarle un nuevo beso mientras le bajaba la ropa interior. Changbin captó la indirecta tan pronto como sintió un dedo del menor introducirse en su trasero.

Sonrió y simplemente esperó a que el chico le dilatase un poco más la entrada antes de sentarse lentamente sobre la entrepierna de Hyunjin. El menor jadeó al sentir las paredes estrechas del chico y este se quejó por el dolor inicial, pero este cesó enseguida.

Changbin comenzó a moverse sobre el rubio, primero con lentitud, observando los ojos del menor, sus labios entreabiertos y su pecho subir y bajar agitado por la respiración. Sonrió y poco a poco comenzó a moverse más rápido, aumentando el placer que estaba sintiendo. Hwang gimió y se incorporó para rodear con sus brazos a Changbin y ayudarle con sus movimientos, eso hizo que pudiese entrar más profundo y que el mayor gimiera quizás demasiado alto.

Hyunjin no cabía en sí de excitación al ver al moreno sentado sobre él, moviéndoselo sensualmente, gimiendo y con pequeñas gotas de sudor recorrer su frente. No pudo evitar dar un par de embestidas al chico, mientras este clavaba las uñas en su espalda.

—Mi-mierda Jinnie —gimió el mayor.

El chico lo entendió enseguida al notar como las paredes del chico se apretaban un poco y supo que el mayor estaba a punto de correrse, por lo que llevó su mano al miembro del moreno y la movió allí mientras daba algunas embestidas más. Changbin llegó enseguida, manchando la mano del menor, pero sin dejar de moverse hasta que poco después sintió como Hyunjin también llegaba, llenándole por dentro.

Changbin suspiró, levantándose lentamente y tumbandose en la cama. Hyunjin le imitó y el mayor apoyó la cabeza en el pecho del rubio, todavía agitados por lo que acababa de pasar.

—¿Está muy mal que me gustes tanto, Jinnie? —suspiró. El mencionado sonrió y acarició con delicadeza el pelo del mayor.

—A mí también me gustas mucho, Binnie.

Minutos después, ambis chicos se habían quedado profundamente dormidos.

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Nuevo lemon, jeje. Todavía soy muy nueva escribiendo este tipo de escenas así que tengan paciencia (? Igual espero que os haya gustado.

Por cierto, quería decirles que si alguna vez quieren hablar conmigo o necesitan ayuda con cualquier tema, pueden mandarme un mensaje por privado. Me encantaría conoceros e interactuar más allá que los comentarios, no sé. Cualquier cosa que quieran decirme pueden hacerlo, no muerdo (?

En fin eso es todo.

Pregunta del día: ¿cuál es su canción favorita ahora mismo? La mía quizás sería I smile de Day6. Estoy completamente obsesionada con esa banda desde hace unos días, uff.

Nos vemos pronto.

¡Besos! 💞