4."Johnny"

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Capítulo veinticinco.

Estoy seguro que desde la conocí nunca vi ese tipo de sentimiento empañando su mirada,sus lagrimas se mezclan con el maquillaje y puedo decir que jamás quice volver a sentir cómo mi pecho se oprime a causa de verla caer una vez más.

Yo...—Su voz se quiebra y no tengo la suficiente rapidez para sostenerla cuando sus piernas fallan y se desploma contra la vereda.—Estoy tan jodida..—murmura soltando un hipo mientras lágrimas nuevas vuelven a mojar sus mejillas.

De rodillas me observa,su cabello revuelto se descontrola con el viento,causando que algunas hebras queden aferradas a su rostro.

Quiero decirle muchas cosas,tengo el deseo de colocarme junto a ella y sostenerla entre mis brazos como antes,mi mente se adelanta,imaginando la escena con añorancia pero una parte de mi,me detiene,por que sabe que eso no es lo correcto.

Por que ella está pérdida y yo no sé si aguantaría los años luz que tengo que seguir avanzando para encontrarla.

Lo lamento,yo...—Un sollozo la invade y se agarra el pecho como si le doliera.A mi me duele.

Miro la oscuridad del callejón donde la encontré y no puedo dejar de sentir como la sensación de pánico me desgarra cuando pienso lo que hubiera sucedido si alguien mas la hubiera encontrado primero.

Vamos,necesito llevarte a un lugar seguro—digo moviendome hacia ella,con la intención de ayudarla a levantarse.

No,...yo,...no quiero,Johnny.—dice agarrandose de la pared,que de seguro las manchas que lleva no son de pintura seca—...no,yo te qu-quier...qu-quiero cerca.No,yo no...

Un pequeño pinchazo me atraviesa pero aun asi la ayudo a levantarse,una parte muy escondida dentro de mi me dice lo estúpido y masoquista que soy,pero no me importa.

Mi única meta es ayudarla y llevarla a salvo a su casa.

Ya después podré recoger otro pedazo que se cayó de mi corazón,por que ella volvió a tocarlo con el fin de seguir destrozando lo último que quedaba unido.


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Beber un trago de la cerveza caliente que tengo en mi mano me hace formar una mueca con los labios.

—¿Porqué cojones tengo que beber esto?—replico de nuevo dandole una mirada resentida a la pelirroja que está al otro lado del mesón,meneando las caderas con la simple polera grande que lleva cubriendo la mitad de su cuerpo.

Rodando los ojos me da la espalda,un gran truco ya que sabe cuanto me distraigo con sus piernas y mitad del trasero desnudo.

—Por que estás enfermo y no quiero besar a alguien que puede toserme en la boca mientras me caliento—Rio un poco por sus palabras a lo que ella sigue tarareando la canción que sale de su iphone.

Me fijo en sus movimientos tan fluidos y cómodos mientras sigue destruyendo mi cocina,antes de tomar otro pequeño y amargo trago de la mini botella llena de mierda.

Se ve tan relajada que no puedo dejar de pensar que soy un idiota total.

¿Cómo fue qué me permití dejarme llevar por el deseo?

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