|Indescriptible Mente Complicado| ©️

1."Sheila"

Capítulo veintisiete.

Al principio,sonreir era un acto que me llenaba de amargura realizar,así que lo evitaba.

Con el tiempo un dolor bastante fuerte empezaba a consumir toda mi energia,parecia que mi visión se habia reducido en nada.

Eso fue...hasta que lo conocí a él.

Enero,20.

—¿Me puedo sentar?—Alzar la mirada sería lo más lógico en una escena como esta,pero para mi eso sería como dar un segundo de mi tiempo y todo el esfuerzo que puedo usar para seguir con la mentalidad en blanco.

Y no pensar en los dolores existentes de los que nunca podre huir..

—O bien,gracias—El alivio se me esfumo justo en el momento en que siento el calor corporal de su pierna rozar la mia.

Inconscientemente aprieto el lapiz con demasiada fuerza y segundos despues escucho el sonidito que hace la punta al ser destruida.

—Ya lo mataste,ahora dejalo descansar en paz—Giro mi cabeza con brusquedad en el momento en que mi lapiz es arrebatado de mis manos,sus dedos frios por el clima,crean un pequeño revoltijo en mi interior cuando roza mi piel.

Hago una mueca con mis labios cuando me topo con unos ojos profundos.Del mismo color que cómo veo la vida desde mis 5 años.

—Grises..—Mi voz sale ronca,casi diria que se escuchó muy aspera y retardada.¿Cómo no? Si es la primera vez que una palabra escapa de mi boca sin que me lo pidan a golpes.

Parpadeo unos segundos cuando siento que sus ojos me escuadriñan,soy incapaz de apartar la mirada,en vez de eso inconscientemente analizo cada detalle de su rostro.

Nunca habia visto tantas cejas en una misma cara,bueno,tampoco es como que eh logrado observar a muchos por tanto tiempo sin que alguien me lo impida...

—Verde agua—Vuelvo a subir la mirada y casi quiero retroceder cuando una pequeña inclinación hacia arriba curva sus labios—"Muy tranquila y bella,pero escondida dentro de un frondoso bosque"

Mi expresión debe ser penosa por lo que no tarda en reir por lo bajo.Inesperadamente un sonrojo se extiende sobre mis mejillas y es casi automático cuando mi cabeza se agacha en busca de esconderme de la vergüenza.

—Es un poema que inventé hace ya unos segundos—frunzo un poco el ceño pero aun asi no lo miro—El contraste que hace tu sonrojo con tu cabello es muy bonito, chica verde agua.

Muerdo el interior de mi mejilla y me sorprende la manera en que la sensación de ser alagada calienta mi pecho.

—Muy buenos dias a todos,hoy empezaremos con binomios cuadrados perfectos—Escucho a la profesora y mi cuerpo se vuelve a mover en automatico.

En mi mente hay mucho caos,ni siquiera sé cómo perdi el control y deje entrar emociones que desde hace mucho no sentía.

Miro de reojo a mi compañero de asiento,que está recostado en la silla con un boligrafo en la mano mientras presta atención a la maestra y me es inevitable no sonreir.