Colors (Yaoi/BL)

Cap. 7

El sirviente que se encargó de nuestras mochilas cuando llegamos me encontró en el jardín, di sin muchos problemas con la salida al jardín que utilizo Claus para sacarme a tomar el aire, y tampoco es que conociera la casa para andar vagando por ahí.

–Me han pedido que le informe de que sus padres adoptivos no pasarán la noche aquí, mañana procederemos a llevarle a su antigua casa a que recoja todo lo necesario y comprar muebles para una habitación personalizada para usted –Explicó con parsimonia sin exigirme que entrara.

–Gracias, pero... podría pedir no tener que ir yo a mi casa? –Pregunté suspirando ligeramente.

–Se lo diré de su parte a los señores Archer –Contestó haciendo una reverencia y volviendo sobre sus pasos.

En cuanto sentí como cerraba de nuevo la puerta comencé a caminar, la hierba aún no estaba mojada por el rocío. El jardín parecía inmenso, tenían una piscina bastante grande y una zona de setos bastante altos que parecía ser un laberinto, una zona mucho más alejada parecía destinada únicamente al cuidado de plantas y flores y era la entrada a un invernadero que parecía de cristal, a saber que más recovecos ocultos tendría.

Pero me conformé con acercarme al pie de la piscina y mirar el agua, algunas hojas y pétalos habían caído en ella y flotaban sin preocupación sobre la superficie esperando a hundirse.

Este sitio estaba muy lejos de la playa, y de Chad, y Andre, como les iba a explicar esto? Mi vida normal definitivamente se había terminado por completo.

Si fuera la playa me sumergiría en el agua con ropa y todo.

Mi sorpresa fue que no necesite sumergirme para mojarme, los aspersores se activaron automáticamente y yo debía de estar en el punto de mira de todos que me dieron varios de lleno.

–Joder! –Grité sin pensar huyendo de nuevo a la puerta para entrar dentro.

Si es que hoy no era mi día.

–Ya decía yo que había oído algo –Escuché decir a mi lado a Siro.

Cuando me giré efectivamente estaba ahí parado con una taza de leche caliente en la mano.

–Ven, tienes que secarte –Indicó sonriéndome y pasando su mano por mi espalda para que caminara–. Mira que salir a esta hora, son las 12 de la noche.

–Vives aquí también? –Pregunté sin oponer resistencia.

–Si, mi familia sirve de guardaespaldas privados a los Archer desde hace milenios, ya no estamos obligados realmente a trabajar aquí, el resto de mis tíos se fueron, pero mi padre y yo estamos bien aquí y los Archer son agradables, me crié con Claus y esta es mi casa igual que puede ser para ellos –Explicó sin problemas antes de tomar un sorbo.

Me guío por los pasillos hasta la zona donde antes me había advertido que me podía perder, abrió una puerta y encendió la luz para que entrara antes que él.

La habitación era más o menos del tamaño de la mía, las paredes estaban pintadas de un blanco básico y la cama era de una única persona con una colcha de Guardianes de la galaxia y el uniforme negro estaba tirado de cualquier forma sobre ella, tenía un escritorio de madera con una silla a juego, un ordenador de gamer y una mesilla llena de libros, a demás de una estanterías con más libros y videojuegos, el armario era de puertas correderas y estaba abierto de cualquier forma dejando ver el interior desordenado, no era una habitación tan lujosa como el resto de la mansión, estaba más destinada a ser de una persona normal y corriente.

–Está es la zona de sirvientes, cocineros, jardineros y guardias, justo al lado de la cocina, así da gusto –Explicó sin necesidad de que preguntara nada dejando la taza en el escritorio y la puerta abierta–. Una toalla...