Mi dulce modelo

16.

Jenny pov

— Jenny— escuché que me llamaba mi novia y en menos de un segundo había abandonado la aburrida conversación que estaba teniendo con la diseñadora para atenderla— ¿podemos irnos ya?— preguntó mientras hacia un pequeño puchero.

— si, me despido y vamos a dar una vuelta— Lena inmediatamente sonrió, pero no era una sonrisa como las otras, me recordó a cuando nos conocimos. La observé con el ceño fruncido unos segundos antes de ir a despedirme de todos

Una vez termine volví con Lena quien estaba concentrada en su teléfono con una pequeña sonrisa.

— ¿vamos?— pregunté mientras le tomaba de la mano disimuladamente. Odiaba no poder haberlo hecho durante todo el día, pero no tarde mucho en soltarla al recordar donde estábamos. Lena asintió y empezó a caminar dirección a la puerta principal no sin antes darle una mirada rápida a Estefanía. Así que de eso se trataba.

— adiós, Estefania— la saludo formando una sonrisa cinica antes de tomarme del brazo y acercarme a ella. Era la primera vez que la veía celosa o algo así.

Lena observaba a la otra mujer con aires de superioridad, y Estefania parecía querer arrancarle la cabeza en cualquier momento.

— vaya, no sabía ese lado tuyo señorita Lena— me burlé una vez estábamos fuera de la habitación haciendo que ella soltara mi brazo y caminara— vamos cariño no te enfades. Pero tienes que admitir que tienes celos de ella.

— si, tengo celos de ella y todas las mujeres que te tocaron antes que yo— se cruzó de brazos como una niña pequeña.

— mi amor, no tienes que sentir celos de mi pasado, en vez de eso deberías sentirte orgullosa de ser mi presente. Eres la única chica la cual he salido seriamente durante mis 25 años de vida, eres la única chica que hace que mi corazón se acelere y lo más importante eres la única chica que le dejó que se ponga mis calcetines de conejito.

— tonta— dijo con las mejillas completamente rojas— si te sirve tu eres la única chica con la que he estado.

— pero eso es porque estabas antes con chicos— replique y ella simplemente se encogió de hombros sonriendo.

La puerta de la habitación se abrió y ambas tomamos distancia de seguridad. Lena miraba con algo de molestia detrás mía, suspiré mientras me giraba sabiendo ya quien podría ser.

— ¿seguro que no quieres ir a dar una vuelta conmigo, Jenny?— otra vez me llamaba así ¿Como tenía que decirle que me llamara Jennifer?

— si, esta segura que no quiere ir contigo— la miré unos segundos como si estuviera regañandola y ella simplemente giró la vista hacia otro lado.

— ya la has oído. Además ya había prometido pasar con ella el día. Adiós Estefania— me despedí nuevamente de ella y empecé a caminar. Escuché de fondo las quejas a la diseñadora más veterana pero no le di importancia.

— podemos ir un momento a mi casa, tengo que cojer el monedero para pagar la comida.

— ni creas que voy a dejar que pagues la comida.

— oh vamos, es tu cumpleaños déjame invitarte— sonaba bastante desesperada porque la dejara pagar, tanto que terminé aceptando su propuesta. No me gustaba la idea, pues el dinero que ganaba era desmesurado comparado con lo poco que gastaba. No era de lujos, a pesar de llevar ropa cara la mayoría no era comprada si no que las marcas me la regalaban. El apartamento lo compré hace tiempo y ahora solo producían el gasto de una persona en luz, agua y todo eso. De vez en cuando me daba pequeños detalles pero no muchos, prefería gastarme el dinero en cosas que valieran la pena. Lena por ejemplo, con ella me gastaría todo mi dinero si hiciera falta con tal de verla feliz.