Mi dulce modelo

47.

Jenny pov

- Feliz año nuevo- gritaron todos nada más los fuegos artificiales empezaron a sonar.  Mi prometida abrazó primero a Javi, que estaba a su lado izquierdo, después se giró a mi dirección, con aquella sonrisa que me hacía perder la cabeza.

- Feliz año nuevo, mi amor- susurré envolviendola en un pequeño abrazo, acompañado de un beso inocente. Cuando nos separamos ella levantó su copa de champagne mientras que yo levanté mi copa llena de zumo de manzana.

- Pareja, feliz año nuevo- Mónica nos regaló un abrazo a ambas, riendo- Disfrutar de vuestro último año nuevo solteras, el año que viene seréis una aburrida pareja casada.

- ¿Estas celosa porque no eres la única dama de honor?- pregunté de manera irónica.

- Pues si, tengo que compartir la atención de los chicos buenos y eso no me gusta, deberías saberlo.

- Mónica, es la boda de Jennifer Turner y Lena Miller ¿Esperas que haya algún otro hetero aparte de tu y Vicky? - Mónica suspiró casi de forma dramática, pasando su mano por el pelo al oír las palabras de Javi.

- Supongo que tendré que conformarme- reímos un poco al escucharla tan decepcionada. La nochevieja pasó con rapidez y cuando miré mi teléfono ya eran las tres de la madrugada.

- ¿Nos vamos, no?- preguntó de forma dulce Lena al mismo tiempo que acariciaba mi mano.

- Si, ahora mismo- y a pesar de que dije eso tardamos aún media hora en estar en la puerta principal de la casa de Javi.

- ¿Estais seguras que no os quedéis quedar?- preguntó el maquillador casi desesperado, escuchando todo el alboroto en el interior del departamento.

- Si, segura. Buena suerte- El pobre de Javi tenía que pasar la nochevieja con Mónica, Vicky y algunos pocos más, ya que su novio se había ido a pasarla con su familia a Canadá.

- Buena suerte, Javi- la de ojos miel le dio un pequeño abrazo antes de volver a mi lado y engancharse a mi- Nos vemos mañana.

- Disfruten de vuestra comida- habló con doble sentido, obviamente.

- Eso haré.

Sin más dilación salimos de aquel lugar, yendo directamente al coche, hacia frío, no tanto como los años anteriores pero lo suficiente como para helarte.

Nada más subimos al vehículo puse la calefacción, dejando las manos sobre la salida de aire.

- Calentito.

- ¿Que no ibas a comer?- preguntó con cierto tono burlón la pequeña, poniendo sus manos junto a las mías- Supongo que prefieres esperar.

- No tengo problema en no esperar, si no te importa aquel accidente- recordé aquella vez en la que nos pillaron a Lena y a mi en el coche, bueno fue más bien un "pillaron" que un pillaron.

Acaba de salir de un desfile, y Lena me estaba esperando en un callejón apartado para poder ir al hotel. Nos dimos unos cuantos besos y una cosa llevó a la otra. Aún me acuerdo perfectamente de la cara de horror que hizo la pequeña cuando sintio que alguien se apoyaba en el coche, tuvimos suerte de que los cristales polarizados y la noche nos encubrieron, porque si no estaba segura que la portada del periódico al día siguiente íbamos a ser nosotras.

Con una sonrisa pícara la tomé de la mano e hice que saliera del asiento del piloto para que se sentara encima mía.

- Eres hermosa, te lo habían dicho?

- Si, me lo dices bastante a menudo- baje mis manos hasta su trasero, dejándole un leve apretón- Pero creo que solo lo dices por mi culo.

- ¿Tu crees? - metí mis manos dentro de su pantalón, haciendo contacto directo con su piel, amaba cuando llevaba tanga- Mmm... Tal vez.