Inocente Tentación [ChanBaek]

Me vuelves loco....Capitulo 14

El resto de la tarde fue tan tranquila que cuando el chófer llegó a por ellos, atravesando el cielo lleno de estrellas con un coche de repuesto, BaekHyun estaba bostezando. Se sentaron uno al lado del otro y ChanYeol se encogió en el asiento,metiendo las manos en los bolsillos de la chaqueta. BaekHyun apoyó la cabeza en su hombro, cerró los ojos y se quedó dormido. Era precioso; su cara tranquila brillaba aún más con la luz de la luna que atravesaba la ventana, su respiración acompasada una dulce música que llenaba el silencio del coche. ChanYeol tuvo que morderse el labio cuando el menor se le abrazó, porque tenía frío y él era una fuente de calor.

-Ya estamos. -susurró el chófer, mirándolos sobre su hombro- Yo no lo despertaría; tiene muy mal carácter. Se lo digo por experiencia. 

Entonces lo vio salir, rodear el coche y abrirle la puerta, con la mirada puesta en el castaño que dormía profundamente. ChanYeol miró al chófer y la cabeza que tenía sobre su hombro, imaginó a un BaekHyun cabreado y suspiró. ¿Tendría que llevarlo en brazos?

-¿No puedes llevarlo tú?

No era porque no quisiera o porque no pudiera con él. Más bien era porque quería, porque ya lo había tenido sobre sus brazos una vez y estos se habían quemado. ¿Cómo iba a soportarlo todo el camino hasta su habitación? Se mordió el labio y miró de nuevo al chófer, que acababa de recibir una llamada.

-En diez minutos estoy allí. -después de colgar, se encogió de hombros y se inclinó en una reverencia- El señor quiere que vaya a por él.

Se pasó una mano por el pelo y asintió. Tenía que hacerlo. No le quedaba más remedio que hacerlo. Así que se apartó lentamente de BaekHyun, salió del coche y metió las manos bajo ese cuerpo angelical. Las puertas del coche se cerraron y tragó saliva mientras lo veía irse.

-Ayúdame. -le pidió a la luna que los miraba desde el cielo. Ella sonreía y ChanYeol lo sabía aunque no tuviera boca. Sujetó al menor contra su cuerpo y este, por inercia, ronroneó contra su pecho. ¿Ayudarlo? Lo único que hacía era empeorar la situación. Miró la puerta de la casa con desdén hacia ella, porque cada vez confiaba menos. Dio un paso y sintió el movimiento sobre sus brazos. 

BaekHyun lo miraba, con los ojos entreabiertos.

-¿Ya hemos llegado?

-Sí. -quiso decir algo más, pero no sabía qué. También quiso celebrar que se había despertado y dejarlo en el suelo, pero BaekHyun cerró los ojos y se durmió otra vez.

Chasqueó la lengua, miró el cielo y la oyó reírse de él. Era patético, ¿verdad? La forma en que caía y caía por un niño, en que se perdía en esos ojos marrones y en esos labios finos. Seguro que ahí arriba lo señalaban y murmuraban lo fácil que estaba siendo tentarlo. Ya imaginaba a Satán bailando invisible a su alrededor, entregándole brillo y belleza a BaekHyun, cortándole las alas de ángel para disimular.

Se imaginaba muchas cosas, pero no cómo podría llevar a la habitación de BaekHyun sin pararse a observarlo demasiado,sin volverse loco o caer aún más profundo. Tenía miedo de no saber dónde estaba el límite. Había más que besos, deseaba hacer más que eso con BaekHyun, su cuerpo se lo decía, su mente intentaba decirle que estaba mal y BaekHyun solo lograba hacerla callar con cada palabra, con cada sonrojo y cada mirada. Con cada beso.

-Buenas noches. -lo saludo Minah, que le había abierto la puerta y lo miraba extrañado- ¿Todo bien?

-C-claro. Solo se ha dormido.

La mujer se hizo a un lado para dejarlo pasar y ChanYeol entró en la casa con las manos temblándole y el corazón acelerado.Oyó la puerta cerrarse a su espalda, los pasos de ella alejándose hacia la cocina y los suyos propios acercándose a las escaleras. El bello ángel frunció el ceño y se relajó en segundos. ChanYeol se preguntó qué estaría soñando.