Inocente Tentación [ChanBaek]

Me Gustas...Capitulo 19

Era muy tarde cuando salió del coche y vio la puerta frente a él. Ya estaba en casa. Había vuelto y no igual a como se había ido. El padre Siwon lo había llevado al orfanato y habían pasado el día con los niños, comiendo, jugando,bailando. A ChanYeol le puso muy feliz volver a verlos y ellos se le lanzaron encima en cuanto abrió la puerta; aún le dolía el brazo del golpe, pero había merecido la pena. Tampoco había visto a JunMyeon de nuevo y eso lo apenaba, ¿cómo podía haber reaccionado de esa manera? Él sabía que se iba a enfadar, pero llamar a BaekHyun "siervo de Satán" era pasarse. Nadie tenía el derecho de insultar así a su ángel.

Se pasó una mano por el pelo y dejó que el chófer se fuera. Abrazándose a su chaqueta, miró el cielo y la vio, por primera vez desde hacía semanas, orgullosa de él. Abrió la boca sorprendido; la Luna volvía a alumbrarlo, a darle confianza, a quererlo como siempre lo había querido. La luna era como la serpiente que lo ahogaba, solo que ella lo ignoraba hasta el punto en que ChanYeol se sentía confuso y frustrado. Porque siempre había tenido el apoyo de aquel punto brillante del cielo nocturno, y no tenerlo era...como ahogarse. 

ChanYeol ya lo entendía.

Ya sabía porqué ella lo ignoraba y no a BaekHyun. La Luna quería que él cayera en la tentación.

-Bien. -le dijo, sabiendo que sólo ella podía oírlo- Has ganado.

Y como si le respondiera, una ráfaga de viento le acarició el rostro.

Se subió las gafas con el meñique y caminó hacia la puerta, respaldado por ella. Cogió aire, imaginando cómo reaccionaria BaekHyun ante la noticia. Se pondría contento, ¿verdad? Realmente esperaba que sí. Se mordió el labio,oyendo como la llave giraba desde dentro, luego el chirrido de la puerta abriéndose y un bostezo.

 BaekHyun se frotó los ojos y miró hacia arriba. Era precioso, casi como un sueño. El pelo largo se agitó contra el viento helado y se estremeció; ChanYeol dio un par de pasos hacia delante, cerrando la puerta a su espalda después. Como un sueño en el que abrazaba a su ángel y lo protegía del frío. Un sueño real.

-¿Dónde se había metido? -BaekHyun frotó la cara en su cuerpo y habló contra su pecho. Era un reproche y ChanYeol lo entendió a la primera. Sin embargo, los brazos finos que lo abrazaron no concordaban con el tono de su voz.

-En el seminario. 

BaekHyun se acurrucó más contra él. Le acarició la espalda y el pelo, y supo, porque era tarde y oía las noticias desde el comedor, que el menor se había quedado dormido en el sofá.

-Debe haber sido muy aburrido. -miró hacia abajo cuando notó la barbilla clavarse en su cuerpo. Los ojos marrones sonreían tanto como esos labios de gato- ¿Me ha echado de menos?

Las palabras del padre Siwon parpadearon en su mente. Echarlo de menos. Era lo que más había hecho en todo el día. Quería acariciar su pelo, besar sus labios, oír su voz, ver sus ojos y decirle que estaba loco por él.

Quería decir tantas cosas en respuesta a esa pregunta que ninguna salió de su garganta. En cambio, contestó con creces. Se estremeció cuando las hebras castañas le acariciaron el dorso de la mano. Cerró los ojos después de ver los de BaekHyun caer y oyó a su conciencia gritar: No sabes cuanto.

Cerrando los dedos en la cadera de BekHyun, dejó que éste se pegara a su cuerpo. Ladeó la cabeza. No sabía en qué momento había sacado la lengua, en que instante había lamido ese labio ni cuando había sido recibido. No sabía cómo había llegado a estar disfrutando de un beso sin arrepentimientos. Porque hizo a un lado a JunmYeon y se centró en el padre Siwon. BaekHyun era "lo que echaba de menos" y quería que lo supiera.