Inocente Tentación [ChanBaek]

Titanic... Capitulo 25

ChanYeol aún no comprendía cómo había podido pasar tanto tiempo. Tal vez en cualquier otra ocasión un mes le hubiera parecido muy lento, pero en aquel momento, mientras veía a su ángel perderse a saltos en el aeropuerto, la voz de un altavoz dio la bienvenida a febrero en muchos idiomas. Metió las manos en los bolsillos del pantalón,caminando junto al señor Lee y esquivando personas por doquier, tratando de no pensar en que a partir de ese día iban a tener aún menos momentos a solas. Durante todo enero, desde que la abuela se había marchado el primer día del año, BaekHyun y él habían tenido para ellos únicamente los pocos minutos que usaban para comer entre clase y clase. Bien podían haber usado cualquier otro momento, pero la anciana les había avisado, con ojos encendidos, deque el menor debía aprobar el examen igual que cualquier persona de su edad que estuviera yendo al instituto. Así que habían estudiado, se habían mirado y habían apartado los ojos del otro cada vez que la tentación llegaba. Y los fines de semana el señor Byun insistía en que su hijo se fuera a hacer deporte con él. El año había terminado con un beso mágico y había empezado con la casa llena de gente; definitivamente no habían tenido un buen comienzo.

Su conciencia se apretó el puente de la nariz y ChanYeol suspiró.

-¡Mamá! -la voz de BaekHyun llamó su atención. El menor saltaba, con un cartón blanco en la mano y el nombre de su madre escrito en él. Un montón de gente se agolpaba a la espera de la gente que bajaba del avión. Cuando la señora Byun hizo su aparición, una sonrisa orgullosa apareció en el rostro de su marido. BaekHyun gritó más fuerte- ¡Mamá!¡Aquí, aquí!

La mujer, que se había cortado el pelo casi a la altura del de ChanYeol, abrió la boca en una enorme sonrisa y corrió con la maleta balanceándose de un lado a otro entre sus manos. BaekHyun dejó caer el cartón para ir hacia ella. El señor Byun y él avanzaron tranquilamente hacia ellos, aunque el hombre a su lado se estaba conteniendo las ganas de correr hacia su esposa.

-Bebé. -a pesar de que tenía las manos ásperas y las uñas rotas,  no se quejó por el tacto de las manos de su madre en su cara. La mujer le apretó las mejillas, le besó la frente más veces de las que ChanYeol pudo contar y le acarició el pelo con ansias, demostrándole sin parar cuánto lo había echado de menos- Mírate. Si estás más guapo que yo.

Entonces ChanYeol oyó el suspiro profundo del señor Byun. El hombre a su lado fue corriendo con los brazos abiertos cuando BaekHyun dio un paso atrás y la dejó libre. La pareja se besó durante pocos segundos y entrelazaron sus manos. Era increíble el aura rosa que los rodeaba, como si un enorme corazón palpitara sobre ellos mientras hablaban. No oyó lo que decían ni se hizo a un lado para dejar pasar a la gente porque su mente viajó a otra parte, aun día en que los padres de BaekHyun se habían dado cuenta de todo y lo alejaban de su ángel.

Sacudió la cabeza. ¿Por qué pensaba en eso? Apretó los ojos y su conciencia movió las manos, indicándole que eso no iba a pasar. Le creyó por completo. Subió los párpados y una sonrisa boba cruzó su cara cuando se topó con un par de pupilas marrones que lo miraban curioso.

-¿Qué piensa? -BaekHyun se balanceó sobre los talones. Pensó en decírselo, miró a sus jefes hablando, sumidos en su mundo, ignorando por completo que su hijo sonreía de forma adorable al hombre que lo amaba; luego movió la cabeza. Pero el menor no se lo creyó- ¿No va a contármelo?

-No es importante. -mintió. Hizo viajar su mirada por el aeropuerto y la retornó al bello rostro; estaban tan cerca que podría inclinarse a besarlo, pero lo suficientemente lejos para que nadie sospechara sus deseos por hacerlo.

Minutos después estaban caminando hacia la salida, con un BaekHyun que lo miraba inquisitivo de reojo, una pareja que seguía en su mundo varios pasos por delante y un chófer a metros por delante. ChanYeol miró al menor por el rabillo del ojo y este cruzó los brazos y giró la cabeza para encararlo.