Kim Taehyung

224 9 0
                                    

Mine.

La noche se sentía más fresca de lo que recordaba en aquella enorme casa, con la pijama puesta, dientes lavados y recién salida de la ducha me acosté sobre el suave colchón, tomé mi celular y comencé a leer un libro en PDF que había dejado hace unas semanas inconcluso pero ahora que por fin había un espacio libre no perdería la oportunidad de retomar, después de algunos minutos sentí un peso extra a un lado de mi, por las luces apagadas más el reciente deslumbramiento debido a la pantalla del móvil no podía asimilar quién era al verlo pero sabía perfectamente de quién se trataba cuando su barbilla se acomodó con delicadeza sobre mi hombro escabulléndose dentro de las sábanas y sentí su respiración sobre mi cuello la cual causó un cosquilleo involuntario.

—Ya es es tarde, deberías dormir.— escuché su profunda voz con un tono dulce.

—Lo mismo puedo decirte, tú lo necesitas más que yo.— sonreí levemente sin despegar los ojos de mi móvil.

—¿Qué lees?— preguntó con su característico tono curioso y sentí que giró su rostro para poder ver la pantalla.

—Es una novela de amor de hecho, sobre un chico que está profundamente enamorado de su novia y a pesar de lo que puedan llegar a pensar los demás hace de todo para que ella sepa que la ama y que nunca se irá, eso es básicamente de lo que trata.— expliqué.

—¿Es cómo nuestra historia?— volvió a preguntar en un tono que para nada era juguetón, todo lo contrario, por el sonido inocente de su voz podía deducir que lo decía bastante en serio. Aquella pregunta me hizo sonreír mucho más ampliamente y mirarlo.

—Sí, como nuestra historia— me regaló una sonrisa de aquellas en las que lucía bastante más pequeño la cual me derritió el corazón como solo él lograba hacerlo.

—¿Puedo dormir aquí?, hace frío y no tengo una almohada extra.— solté una pequeña risa y asentí con la cabeza, se acomodó de nuevo con su rostro entre mi hombro y mi cuello pero esta vez rodeó mi cintura con ambas manos y sus piernas repitieron la acción aferrándose a las mías. Sentía su pecho subir y bajar en un tranquilo vaivén contra mi, su respiración se volvió tranquila después de unos minutos, amaba que se sintiera tan cómodo conmigo que no le costaba nada quedarse dormido. Su presencia francamente me desconcentró totalmente de mi libro pues solo podía prestarle atención al chico a mi lado así que sin moverme mucho puse mi teléfono a cargar y lo dejé en el buró al lado de la cama quedando en oscuridad con la luz de la luna como nuestra única fuente de iluminación. Junté mi cabeza con la de mi precioso niño, acaricié unos segundos su suave cabello y después coloqué mis manos sobre sus brazos, por milésima vez en ese rato se me escapó una sonrisa acompañada de un suspiro, era imposible no sonreír teniéndolo cerca, me hacía sentir feliz y completa, como nunca nadie lo había hecho jamás y en esa cómoda posición sentí mis ojos cada vez más pesados hasta que junto a él me dormí en un santiamén.

Aún con mis ojos cerrados me encogí en el colchón y tapé más mi cuerpo, me di cuenta que el chico que estaba hace unas horas a mi lado había desparecido lo cual me hizo fruncir mi ceño aún adormilada pero estaba más dormida que despierta como para interrumpir mi preciado sueño de no ser por el estruendoso sonido de la puerta chocando contra la pared.

—Shhh, vas despertarla— escuché un intento de lo que yo suponía era un susurro proveniente de una voz familiar.

—Lo siento—

—Shhh— expresó una tercera voz, aunque más que susurros parecían gritos silenciosos y estaban alterando mis nervios cada vez más. Era bastante irritable cuando me despiertaban de una manera poco amigable. Las pisadas menos delicadas de la historia se hicieron sonar por mi habitación provocando que mis puños se apretaran debajo de las sábanas en un intento de calmar mi creciente enojo. De repente sentí a una persona posicionarse en mi lado izquierdo, otra persona se arrastraba con saltos nada cautelosos sobre mi y una más estaba en el lado derecho de la cama sin poner mucho peso sobre esta. Abrí mis ojos parpadeando algunas veces seguidas para poder observar bien a los dueños de mi cólera mañanero, me quedé viendo a la persona sobre mi y él a mi por uno segundos sin decir nada.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jun 25, 2019 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

One shots. | allDonde viven las historias. Descúbrelo ahora