Doce

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Lalisa se sentía culpable por la discusión de Jennie y Jisoo, y no sabía como arreglarlo.

- P-perdón...– Dijo, mientras mantenía la cabeza agacha. Los ojos de la morena se posaron en ella, sintiendo lástima por verla tan vulnerable.

- No es tu culpa, Lalisa...No te preocupes.– Le sonrió, pero algo en el corazón de la pelirroja le decía que aquella sonrisa no era cien por ciento sincera.

- Voy a dar una vuelta...– Le dijo. Un momento a solas le ayudaba a reflexionar bien sobre las cosas, y ese era el momento.

Jennie asintió, sabiendo que aquella adorable chica necesitaba su espacio, y lo entendía, después del incómodo momento que acababan de pasar.

La pelirroja salió de la zona segura, adentrándose al bosque, ya que se le daba bien pensar en medio de la naturaleza.

- Vaya mierda...– Murmuró enfadada consigo misma.– ¿Como no puedes controlarte?.– Se regañaba entre dientes.

Llegó hasta un gran árbol, y lo admiró.

Decidió subir, una, porque era seguro, y otra, porque le gustaba la buena vista. Aunque lo único que pudiera ver son aquellas murallas, y al rededor infestado de zombies.

La tierna sonrisa de Jennie vino a su mente, haciéndola sonreír igualmente.

- ¿Qué es lo que siento por ella?.– Se preguntó, mientras se confundía aún más. Su corazón latía fuertemente cuando la veía, y sentía tantas ganas de besarla cuando la tenía cerca...– ¿Será que...– Se sonrojó al solo pensarlo. Su corazón palpitaba velozmente, y sus mejillas rosadas se acolchaban en una sonrisa. Pero recordó lo de Jisoo...

La sonrisa de la pelirroja desapareció, y su expresión cambió a una de tristeza.

¿Qué era lo que debía hacer?. Por una parte estaba Jennie, y por otra estaba Jisoo...

Tal vez Jisoo tiene razón. Ni siquiera ha sido valiente como para contarle a Jennie sobre su problema.

Tomó una decisión, y estaba segura de aquello.

Bajó del árbol, y se dirigió a la habitación de las Kim.

- Lalisa, quiero hablar contigo.– Dijo Jisoo, al momento en que la vió entrar. Un escalofrío recorrió la espalda de la más alta al escuchar su voz.

- C-claro.– Respondió.

- Pero aquí no. Acompáñame.– Le tomó la mano, y la arrastró a su habitación. Se sentaron en la orilla de la cama, y se miraron a los ojos. Jisoo suspiró pesadamente antes de decir siquiera una palabra.– Quiero pedirte disculpas...Yo no actué de la mejor manera contigo, y tengo mis razones. No quiero que lastimen a Jennie, ¿Sabes?. Ella es lo único que me queda, y no quiero que sufra. Comprendo que he sido muy sobreprotectora, y ese es mi error. Quiero que sepas que...Que si eres capaz de hacerla feliz, yo las apoyo. Solo no la lastimes.– Le pidió. En sus ojos no había nada más que sinceridad, y Lisa se sintió conmovida por eso.

- Y-yo...Aún no sé muy bien que es lo que siento, Jisoo. Lo único que sé es que...Jennie es lo mejor que me ha pasado en éstos dos años. No puedo decir que estoy enamorada, pero sí siento algo más que amistad por ella.– Le respondió con honestidad. Jisoo le sonrió comprendiendo.

- Primero averigua si realmente la quieres, y luego solo déjate llevar. El amor no es algo que eliges, pero no es necesaria tanta ciencia para saber que lo sientes.– Le dijo. Ambas se sonrieron, y se dieron un abrazo.

- ¡Aww!.– Se escuchó una voz que provenía desde el otro lado de la puerta.

Sobrevivir.- Jenlisa [G!P]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora