Nunca Los Quise Olvidar

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El salón al que habían entrado era bastante grande con bancas repartidas por filas. Un pizarrón verde estaba al frente y al borde varios gises blancos.

-Aquí fue donde conociste a todos menos a Annie- dijo Tamara.

- ¿Eres la menor verdad Annie? - preguntó Vanessa.

-Si, soy la menor por dos años, aunque no me llevo muy bien con los de mi salón- dijo y se recargó en el escritorio.

-Quería curarlos de algo- pensó Vanessa.

- ¿Estaban enfermos? ¿Recuerdo que los quería curar de algo? - preguntó.

-Bueno veo que si funciona que te hayamos traído aquí- dijo Annie un poco incómoda moviéndose de lugar.

-Todos somos rechazados por la religión católica y por ende tus padres también nos rechazan- explicó Richard.

- ¿Rechazados? ¿Enfermos? Sigo sin entender- dijo Vanessa confundida.

- ¿No recuerdas que nos querías "curar"? - dijo Tamara haciendo comillas con los dedos. Vanessa negó con la cabeza y Tamara soltó un suspiro.

-Bueno entonces deja te aclaramos la memoria, este es el bisexual de mi novio- dijo Richard y pasó un brazo por los hombros de Jacob y éste le respondió el abrazo.

-Y él es el gay de mi novio- dijo Jacob y le besó la mejilla.

-Yo nací en un cuerpo que no me representa así que decidí empezar un tratamiento para poder sentirme cómoda- dijo Tamara. Vanessa pensó que eso explicaba un poco el tono de voz raro que ella tenía.

-Y tanto Stephen y yo creemos en Dios, pero no en la iglesia ni en la biblia- explicó Annie.

- ¿Por eso mis padres dicen que están enfermos? - preguntó Vanessa.

-Si y hasta hace tres años tú también lo creías- explicó Stephen.

Un ligero dolor de cabeza atacó a Vanessa. Recordaba sentirse asqueada por la forma en que sus amigos vivían, siendo paganos y opuestos a la iglesia. Se recargó en una mesa y se llevó la mano derecha a la nuca. Sus dedos palparon la cicatriz y deseó, como todos los días, que no estuviera ahí.

- ¿Estás bien? - preguntó Jacob que se había acercado a Vanessa.

-Si, es solo que no entiendo por qué cambie mi parecer. Mis padres estaban tratando a que volviera a ser la de antes, pero, no sé es como si algo me dijera que hay algo importante que falta- explicó Vanessa.

-Falta que te expliquemos muchas cosas, pero todo a su tiempo- dijo Annie.

Siguieron con el recorrido en la escuela, según lo que le explicaron a Vanessa al llegar a la preparatoria se encontró con Jacob, Stephen, Richard y Tamara en su salón. Esta última aún en su etapa de tratamiento así que les contó a sus padres y estos le alentaron a que los "curara" de su enfermedad. Sin embargo, al conocer al grupo completo empezó a ver qué no era malo ser como eran.

- ¿Ustedes viven en la casa solos verdad? - preguntó Vanessa. Había hecho muchas preguntas en todo momento y los demás las respondían sin problema.

-Así es, la casa la compraron mis padres hace seis años aproximadamente y gracias al trabajo de todos hemos vivido bien ya que mis padres decidieron que podía vivir con todos los demás, aunque los primeros años se quedaron con nosotros- dijo Stephen.

- ¿Y sus padres? - preguntó. Todos parecieron tensarse ante esa pregunta.

-Los míos nos visitan una vez al mes, los de Stephen se mudaron a la ciudad, pero le llaman varias veces a la semana y nos visitan algunas veces- dijo Richard.