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#32: mascara.

   𝒦ou sonreía al ver la linda flor color rojo, le recordaba a ella. Decidió hacerle un lindo ramo de flores a su amada.

   Porque si, Kou Mukami estaba se enamoró profundamente de Alyssa desde la primera vez que la vio en ese pasillo. No le gustaba aquel plan que tenía con sus hermanos, pero no tenía otro remedio.

   Se sintió un poco mal al recordar que tuvo que stalkearla un poco para saber lo que le gustaba, pero era la única manera de saber como no podría cagarla, así que, básicamente, era consciente de casi todo sobre ella. Bueno, hasta cierto punto, no quería ser tan meticuloso. En esa búsqueda por su pasado fue que había encontrado el porqué ella no olía a nada. Era una semi-vampiro.

   Asimismo, bueno... Digamos que también descubrió cosas que no le hubiera gustado saber.

   Se preguntó dos veces si tocar o no la puerta, "¿y si las rosas le dan alergia? No creo que sean sus flores favoritas, pero tampoco se cual otra le gustaría que le diera..." pensaba constantemente, tomó un suspiro y se llenó de valentía.

     —¡Pasa!— escuchó del otro lado. Tomó un gran suspiro y entró.

    —¡Sweetie! ¡Ta-da! Te traje un regalo— Kou le entregó las rosas un poco dudoso, pero seguramente su sonrisa le servía de máscara para ocultar sus inseguridades. Ella abrió los ojos de sorpresa.

   "Bien, ¡Parece que le gustan!" Pensó en sus adentros.

     —¿Son para mi?— sonreía con un brillo en sus ojos.

     —¡Sí! Como símbolo de...— "lo mucho que me gustas" pasó por su cabeza, pero cambio las palabras—. Nuestra amistad, claro—rió nervioso—. Espero te gusten.

     —Que...Que lindo detalle Kou— sonrió Alyssa tomándolas y oliéndolas—. Muchas gracias.

     —Que bien, entonces... Espero que me devuelvas el regalo.

   Alyssa lo miro extraño, ¿A que se refería esta vez? Kou era su Mukami favorito, él iba a...

     —¿No puedes creer que te las di sin querer algo a cambio, cierto? Yo también quiero una muestra de tu gratitud.

   "No quiero hacer esto" pensó el rubio en sus adentros, mordió sus labios "pero Ruki me lo ha ordenado, así que, respira y hazlo. Tienes que sonar creíble. Además, seguramente lo disfrutarás"

      —¿Una muestra de mi gratitud? No se que podría darte Kou, yo...

     —Es sencillo— sonrió, tomándola de la cintura y dejando las flores de lado—. No creo que sea tan difícil de pensar.

   Kou sentía que el corazón se le escapaba del pecho, era la primera vez que la tomaba de la cintura de esa forma tan cercana.

     —Kou. Sé a que te refieres pero por favor. No puedo darte de mi sangre, estoy débil.

     —Agh— cambió su voz por una más gruesa. Sinceramente no le gustaba cuando le negaban algo—. Esto es lo que recibo por ser bueno contigo, ¿Quién te crees para pensar que no debes devolver? Dámelas.

   Kou agarró las rosas que había hecho con tanto amor, dispuesto a destrozarlas, debía hacerlo. Tenía que seguir con su actuación.

   Le dolía en el alma, pero eso era lo que tenía que hacer.

     —¡Detente!— Alyssa lo agarró del brazo antes de que las volviera nada, en serio le habían gustado, no quería que la historia de las flores que tuvo con Kanato se repitiera.