you keep me coming for you - shawn mendes & camila cabello

12

Cerré la puerta de entrada y me tiré, literalmente, en el sofá.

- Camila ¿dónde andabas? ¡Estaba preocupada por ti!
- Mamá, deje una nota, ¿No la haz leído? Fui caminar a la playa, quería estar sola y pensar. Me hizo bien - dije y le sonreí
- ¿Y se puede saber en qué piensas? ¿Pasó algo?
- ¿Te acuerdas de Shawn? - me miro sin entender – Shawn Mendes, mamá, mi amigo de la infancia...
- Como no me voy a acordar, si pasaban todo el día juntos, pero ¿que tiene que ver?

Le conté a mi mamá todo lo que había pasado con Shawn y ella me miraba sorprendida, emocionada, creo que más que yo...

- Me voy a cambiar ya que en un rato vamos a ir a caminar - dije antes de irme y la abracé, amaba contarle todo y no tener secretos con ella.

Agarré algo para comer de la cocina y subí a la habitación. Mis amigas ya se habían levantado, por fin, y se estaban cambiando. Les conté todo a ellas también y no pararon de hacerme preguntas.

- ¿Y ayer que sucedió? Te perdimos en un momento y no hemos visto más en toda la noche - preguntó Lily
- Me encontró Shawn, muy ebria, y me acompaño hasta aquí - dije
- Mmm y ¿pasó algo? - dijo Taylor curiosa, haciendo caras.
- No pasó nada mal pensadas! Va, eso creo, lo último que me acuerdo es un abrazo. Me prestó su chaqueta porque hacía frío, pero no me acuerdo nada más - dije preocupada, ¿habré dicho o hecho algo de lo que pudiera arrepentirme?

Seguimos hablando sobre la noche anterior, mientras seleccionábamos ropa y nos arreglábamos un poco, hasta que sonó el timbre.

- Es él - grité y los nervios me invadieron al instante.
- Suerte - dijeron las chicas al unísono y me dieron un fuerte abrazo.

Bajé las escaleras lo más rápido posible, salteándome un par de escalones. Me acomodé el pelo y suspiré. Nervios, muchos. Finalmente abrí la puerta y lo vi. Automáticamente sonreí, es que estaba tan lindo. Tenía puesta unos pantalones negros y una musculosa blanca que le resaltaba bien los músculos. Me devolvió la sonrisa y hubo un silencio medio incómodo.

- Hola - dije. ¿Hola? Reacciona Camila!
- Hola - dijo dándome un beso en la mejilla. Le hice señas para que pasara.
- Mi mamá te quiere saludar, sospecho que siempre te quiso más que a mí - ambos reímos

Salió mamá de la cocina apenas escuchó eso y corrió hacia él, abrazándolo, siempre tan efusiva

- ¡Shawnie! ¿Cómo estás? ¿Recuerdas cuando te llamaba Shawnie? - dijo con una sonrisa cuando se separaron
- Si – dijo riendo – Me alegro de volver a verla señora - dijo y se notaba a kilómetros su nerviosismo.
- No me llames señora, me haces sentir más vieja, tutéame mejor - ambos sonrieron
- Bueno, ¿vamos? – Dije interrumpiendo
- Si, vamos - dijo para luego dirigirse a mi madre - un placer volver a verte
- Igualmente Shawnie, espero verte más seguido por casa, como en los viejos tiempos...
- Ojalá asi sea - dijo él mirándome a los ojos y no pude evitar sonreír.