-Tú también eres linda, no seas celosa - dijo apenas salíamos de casa y largué una carcajada
- Gracias
- ¿Te sucede algo? Ayer no parabas de hablar, torturaste a mis pobres oídos y hoy estas rara- Es que no lo sé, es raro, volver a verte, y a eso agreguemos que no me acuerdo casi nada de lo que sucedió ayer. Me da un poco de vergüenza - dije agachando la mirada
- ¿No te acuerdas de nada?
- ¿Que insinúas Mendes? ¿Qué es lo que hice?
- Por empezar le diste un beso a Adam - dijo con cara enojada
- Ya lo se, ¡ni me lo recuerdes! - dije cerrando los ojos y negando con la cabeza - ¿Qué más?
- Estabas coqueteando con el que te entregaba los tragos en el antro
- Mentiraaaaa - interrumpí pegándole suave en el hombro
- Eso mismo hiciste, me pegabas - ambos reímos -y tuve que sacarte del antro porque gritabas como una loca que te querías quedar allí - hizo una pausa - y también me abrazaste y no me soltabas, bipolar - sonrió y yo también
- Vos no me soltabas - dije riendo para disimular la vergüenza que me daba - me acuerdo todo hasta ese momento, luego de eso nada - dije desesperada por saber
- En el camino no paraste de cantar y gritar, y cuando llegamos no me querías dejar ir, me quede unos minutos más, te hice un café, que lo escupiste - yo lo miraba atenta, roja como un tomate - fui al baño y cuando volví estabas dormida sobre la mesa en la cocina, te tuve que cargar hasta tu habitación, y ahí te escribí la carta, porque no me pude despedir - dijo apenado por esto último y yo sonreí.
Seguimos hablando por un largo rato sobre ayer hasta que él cambió de tema, de la nada.
- ¿Qué casualidad verdad? Que luego de tanto tiempo sin vernos nos hayamos reencontrado aquí de vacaciones- dijo mirándome serio y yo asentí con la cabeza
- ¿Dónde estuviste todo este tiempo? Quiero decir... después de aquel día... en esa fiesta, no te vi nunca más, ¿Por qué? - dije ya un poco angustiada
-Trate de evitarte, pasaron los meses y después me mude con mi familia. Pensé que iba a ser lo mejor para mi, que te iba a olvidar, pero no deje de extrañarte. Aunque, después con el tiempo no tuve más opción que superarte - dijo mirándome con los ojos brillosos.
- Y ahora ¿Dónde vives? - pregunté, con curiosidad
- Estoy viviendo solo en un departamento, pero me mude yo solo y no con mi familia, porque realmente extrañaba mi ciudad natal. ¿Y tú? Cuéntame algo sobre ti - dijo volviéndome a mirar a los ojos
- Yo sigo viviendo con mis padres, en la misma casa de siempre. Y también te extrañe mucho - listo, lo he dicho – Luego de la fiesta, no sabía que había pasado contigo, estaba enojada por eso, nadie me supo decir nunca que había sido de tu vida. Creo que elegí odiarte, para que no se me hiciera difícil tu despedida - dije mientras una lágrima empezaba a salir, y Shawn la limpió con su mano antes de que llegara a mi mejilla
- Es bueno saberlo - dijo intentando sonreír. Me encogí de hombros, apenada.
- ¿Piensas que tal vez podríamos empezar desde cero? Me refiero, ¿Podríamos estar bien como antes?
- ¿Por qué no? No creo que haya sido casualidad este reencuentro - dijo girando su vista hacia el mar.
Estábamos sentados en un banco, contemplando el atardecer, en silencio.
- ¿Algún día tú me vas a explicar qué ha pasado entre mi primo y tu? - dijo después de un largo silencio, sacándome de mis pensamientos. Reí.
- Si, algún día...
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you keep me coming for you - shawn mendes & camila cabello
Teen Fiction¿Porque te has ido? ¿Porque has vuelto? No importa cuántas preguntas tenga en mi cabeza, lo único que se, es que siempre iba a regresar a él