you keep me coming for you - shawn mendes & camila cabello

18

- Estás ebrio Shawn. Olvídate de esto y báñate - dije saliendo del baño, sin dejarle hablar.

Cerré la puerta de mi habitación con cuidado de no hacer ruido y me cambié, moría de frío, todo por culpa de Shawn. No pude evitar recordar todo lo que había sucedido. No sabía si estar feliz o triste, había sido mi primer acercamiento con él, pero estaba ebrio, por lo tanto seguramente mañana no recordaría, y eso me hacía sentir más patética aún. Me volví a recostar pero el sueño tardaba en llegar, y mi cabeza no dejaba de pensar. De repente me vino a la mente la imagen de Shawn besando mi cuello y no pude evitar sonreír.

Me estaba por dormir cuando sentí el ruido de la puerta abrirse. Simulé estar dormida porque supuse que eran Taylor y Lily que ya habían llegado y no quería hablar del tema Shawn con ellas ni con nadie.

- Vine a reclamar mi beso de las buenas noches - era SU voz, susurrándome en el oído.

Sonreí y me di media vuelta para poder verlo. Estaba en el suelo y mirándome.

- ¿No te pareció suficiente todos los anteriores? - dije intentando parecer enojada
- No, porque esos fueron de mi parte, quiero que me lo des tú
- No te voy a dar nada Shawn - dije cerrando los ojos - quiero dormir, no me molestes - por dentro sonreía, me estaba gustando ser mala.
- No seas mala conmigo - dijo acercándose

Me hice la dormida y se acercó a mi cara, y me dio un beso en la comisura de los labios. Sonreí con los ojos aún cerrados provocando que se apartara de mí. Abrí los ojos y me estaba mirando, con una sonrisa igual a la mía.

- Que linda eres cuando simulas hacerte la dormida - dijo y reímos los dos
- Deja de decir estas cosas, seguro mañana cuando estés sobrio no te animarás
- Ya verás - dijo y depositó un beso sentido en mi frente para luego atravesar la puerta de mi habitación como si nada hubiese pasado.


Me levanté y me cambié con lo primero que encontré para bajar a desayunar. Mis amigas continuaban durmiendo, así que me fui sin hacer ruido. Bajé las escaleras y estaban mis padres, Sofi, Helen y todos los demás, incluido Shawn, desayunando juntos.

- Buen día - dije con voz de dormida mientras me sentaba y todos me miraron y comenzaron a reír, menos mamá, papá, Frank y Shawn que me estaban mirando seriamente, y yo, que no entendía nada.
- ¿De qué se ríen? - dije aún sin entender y lo miré a Adam que disimuladamente señalaba mi cuello.

MIERDA. Me puse pálida al instante y no sabía cómo reaccionar. Disimuladamente fulminé con la mirada a Shawn y salí corriendo para mi habitación ya que no existía la posibilidad de que me tragara la tierra en este mismo momento