Después de un tiempo de estar sentada, sola, pensando en silencio desde que Shawn se fue, se acercaron Taylor y Lily para avisarme que ya se irían.
- Suerte amigas, tengan una bonita noche - les di un beso a cada una - y tu Tay cuida a Frank- No te preocupes - me dijo entre risas
Me despedí también de los demás que recién se enteraban que yo no iba a ir. Me saludaron todos con un abrazo excepto Shawn, que pasó caminando por al lado mío con su peor cara, indiferente, y luego se dio media vuelta para hacerme un pequeño saludo con la mano, a lo lejos. Moría de bronca por dentro.
Una vez que se fueron me dirigí a mi habitación. Al fin un poco de paz. Me quité el maquillaje y me cambié. Me coloque un short rosado y una playera blanca, suelta y corta. Bueno, ese era mi pijama. Me puse los auriculares y me quedé dormida, escuchando música.
Me levanté sobresaltada por unos ruidos extraños que provenían del piso de abajo. No sé cuánto tiempo había pasado desde que me había quedado dormida pero las chicas no estaban en sus camas y seguía estando todo oscuro. Me paré tratando de no hacer ruido y tome mi palo de hockey, No se por qué lo había traído pero al fin servía para algo. Salí de la habitación con el palo en mano y bajé las escaleras en silencio. Los ruidos se hacían cada vez más fuertes. A pesar de la oscuridad pude ver una sombra y fui corriendo, decidida a golpear al supuesto ladrón.
- ¡Espera! Soy yo - grito cuando estaba a punto de pegarle.
- Shawn ¿Qué haces aquí y a oscuras?- susurré para no despertar a nadie mientras encendía la luz
- ¿Te olvidas que hoy me quedo a dormir aquí? - dijo con dificultad, estaba más ebrio que la última vez que lo vi, hace unas horas.
- No, no me olvido, pero me asustaste - dije sentándome en el sillón, a su lado - mírate cómo estás Shawn, ¿Por qué no te bañas con agua fría? - dije corriéndole el cabello que no me dejaba ver sus ojos café que tanto me gustaban.
- No, no, no - se quejó como un niño de 5 años que lo obligan a bañarse porque no quiere. Me dio ternura y me mordí el labio - me quiero quedar aquí contigo - dijo abrazándome y yo sentía que moría en ese mismo momento. Pude sentir instantáneamente una mezcla entre el olor de su perfume y un olor a alcohol.
- Estas loco Shawn, basta, suéltame - no tuve éxito porque no se ha movido.
- Si estoy loco, loco por ti - susurró en mi oído y me estremecí. Cerré los ojos y suspiré.
Junté fuerzas, y me separé, aunque moría por seguir abrazándolo. Me paré del sofá, agarré su mano y lo arrastré, hasta el baño. Él no paraba de quejarse. Abrí el agua fría, y lo miré amenazante.
- Quítate la ropa y entra, ya - dije, obligándolo.
- Que directa, me hubieras dicho antes que era eso lo que querías y no me negaba - dijo riéndose y no pude evitar ponerme roja.
- Ya basta Shawn, solo quiero que te metas en la maldita ducha - dije pegándole y sonrió.
- Ayúdame - dijo
Me acerqué a él y con cuidado le quité la playera. Casi muero por dentro, en ese instante. Mis manos temblaban.
- El pantalón quítatelo tú - dije riendo y se quejó por lo bajo
Se lo sacó y me quedé observando. Sí, lo tenía en frente mío, en bóxer y totalmente ebrio.

ESTÁS LEYENDO
you keep me coming for you - shawn mendes & camila cabello
Teen Fiction¿Porque te has ido? ¿Porque has vuelto? No importa cuántas preguntas tenga en mi cabeza, lo único que se, es que siempre iba a regresar a él