you keep me coming for you - shawn mendes & camila cabello

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MARATÓN 1/3

Al otro día amanecí confundida. Me dolía la cabeza y todo me daba vueltas. Me senté despacio y al darme cuenta que no recordaba nada, me volví a acostar en la cama. A los minutos, entro mi hermana con una bandeja y al notar que estaba despierta se sentó en el borde de mi cama, mirándome con curiosidad.

- ¿Quieres una? - pregunto extendiendo la mano con una galleta
- No gracias, llego a comer algo y voy a vomitar - dije casi en un susurro y Sofi rio
- Se nota en tu cara, ¿Cómo te fue anoche en la fiesta? - preguntó aún entre risas
- No me acuerdo - dije sosteniendo mi cabeza e intentando hacer memoria, solo recordaba haber hablado con Ryan cuando recién empezaba la noche.
- Te dejo descansar - me dijo levantándose de mi cama – mejórate - agregó abriendo la puerta y volví a cerrar los ojos cuando la vi desaparecer.

Finalmente desperté, me sentía mejor, pero seguía con molestias. Busqué el celular entre mis cosas y llamé a Lily.

- Cam, ¿Cómo estás? - preguntó
- Hola Lil, me siento medio mal, tengo que hacerte una pregunta
- Dime
-¿Puedes contarme todo lo que hice anoche? No me acuerdo de nada – dije nerviosa y la escuché reír del otro lado
- No sé qué has hecho, solo te vi hablando con Ryan, y luego estaban abrazados - dijo y cerré los ojos con fuerza - me dijo Shawn que los vio cuando se fueron juntos, ¿en serio no recuerdas?
- ¿Que Shawn qué? ¿Me vio con Ryan? - pregunte alterada
- Si, y su cara expresaba todo menos felicidad... - dijo y hubo un silencio, en el cual me vinieron unos flashbacks de la noche anterior, más específicamente del beso con Ryan.

Mierda, lo había besado. ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Por qué? No tenía respuestas, solo recordaba el momento del beso y nada más.

- ¿Sigues ahí? - Preguntó Lily
- Si Lil, es que recordé algo - dije con la voz entrecortada
- ¿Qué? - gritó
- Creo que besé a Ryan, y no es Shawn, me siento culpable
- No tienes que sentirte culpable, además tu puedes hacer lo que quieras, él no es tu novio - me dijo y me relajé
- Tienes razón... Gracias amiga, te quiero
- Suerte, te quiero - dijo y sonreí antes de cortar.

Luego de unos minutos decidí hablarle a Ryan.

Camila: ¿Podemos hablar?

Me recosté en la cama esperando a que responda.

A los cinco minutos me llegó un mensaje, pero no era su respuesta, sino que era un mensaje de Shawn.

Shawn: Camila, debemos hablar. Ayer me porte mal contigo, pero no me pareció justo que te vayas con otro en frente mío. Ya no sé qué más hacer, te extraño

No respondí su mensaje, no sabía que contestar. Primero prefería hablar con Ryan, así que cuando me contestó el mensaje arreglamos para vernos esa noche. Me propuso ir a comer y acepté.

Me bañé, me cambié y escuche la bocina de un auto.

- Hola – dijo Ryan una vez que subí al auto
- Hola Ryan - dije acercándome para saludarlo, pero el corrió su cara y el beso fue en los labios.

Me aparté, un poco confundida y él lo notó.

- Lo siento, pensé que...
- No, está bien - dije interrumpiendo y sonrió levemente.

El viaje fue un poco incómodo, ninguno dijo nada. Creo que él se ilusionó, y no quería hacerle mal. Reaccioné cuando la comida ya estaba servida.

- ¿De qué querías hablar? - preguntó en un momento
- Sobre ayer, no recuerdo nada, bueno, solo me acuerdo del beso - dije con un poco de vergüenza
- ¿Cuál de los dos besos? - dijo y levanté una ceja sin entender
- ¿Cuál de los dos? El nuestro, ¿Cuál otro? - dije mirándolo fijamente.

Él estaba nervioso, al parecer no quería contarme pero lo hizo, me contó todo lo de Shawn y ahí logré entender el mensaje de hoy. Le pedí a Ryan que no me recordara más a Shawn y la noche siguió tranquila, terminamos de comer entre risas. Salimos del lugar y cuando llegamos al auto, antes de entrar, se colocó en frente mío.

- ¿Qué? - dije aún sonriendo y me recosté un poco contra la puerta del auto, mirándolo a los ojos.

No contestó, se acercó un poco más y apoyó sus manos en mi cintura. Mis nervios aumentaron. En cámara lenta acercó su rostro al mío y unió nuestros labios, nuevamente. Le seguí el ritmo, lento, pausado, y apoyé una mano en su hombro y la otra en su nuca para acercarlo un poco más a mí. No se que estaba haciendo, pero era lo que sentía en ese momento, no quería soltarlo, me transmitía paz con cada uno de sus besos, y sus abrazos. En un momento le mordí muy suave su labio inferior lo que provocó que ambos sonriéramos en la mitad del beso. Abrimos los ojos aun sonriendo y lo miré a los ojos. Me separé de él y me dio un beso en la mejilla antes de abrirme la puerta para que subiera al auto. Él hizo lo mismo y al cabo de diez minutos ya estábamos en casa. El camino fue silencioso, pero esta vez él no paraba de sonreír.

Todo lo que pasaba por mi mente en ese momento, era Shawn.

- Espera – dijo una vez que estaba bajando del auto
- ¿Qué? - pregunte confundida
- Quiero decirte algo - hizo una pausa - pero no sé cómo... como expresarme
- Habla, no puede ser tan malo - dije riendo
- Bueno es que... - hizo otra pausa y suspiré
- Si... - dije expectante
- Me gustas, de verdad - y me paralicé.