26 La misma jugada de inmaduros.

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Lunes.

Estoy con Mena y Henri hablando y caminado por el campo de la escuela, les enseño las fotos que me tome con Zack el Sábado en el cine. A lo lejos observo a todos los chicos populares del colé con su anfitrión en primer lugar riendo por los comentarios de los otros. Su mirada se cruza con la mia, se le borra la sonrisa por unos segundos pero pronto se recupera y mira hacia otro lado, por curiosidad miro el punto que llamó su atención y son nada más y nada menos que las Bratz versión plásticas, todos le hacen comentarios que no logro decifrar hasta que Macarena se acerca a él y se pone de puntitas para ¿besarlo?, exacto, lo besa a medio campo, la mayoría de los obserbadores capturan el momento con sus celulares, otros susurran cosas y yo no tengo palabras, no tengo expresión alguna ¿odio? ¿pena y lastima? ya nada es claro para mi. Se separan, Harrison la toma de la cintura y le da vueltas como si fuera una princesa. - Idiota! esa porquería no es ni la mitad de buena para estar con él. - Mena.
- o no Azul?

- Azul? - Henri. - esto no es nada seguro y es una confusión.

- No trata de ninguna confusión Henri esto que vieron es real. - siento algo muy raro dentro de mi. - no se ustedes pero yo no estoy de humor para soportarlo. - me doy media vuelta caminado lejos de ese lugar, nada me hace sentir bien ni siquiera mi helado favorito ¿estare enferma? preferiría ser un vampiro y tener el poder del control de las emociones para sacar ese nudo que siento desde que vi a Ashton con la Naca flaca y anoréxica de Macarena.

Me dan ganas de vomitar con solo pensarlo, siento una impotencia extrema que no se me quita y no tiene la intención de hacerlo.

Martes.

Estoy en la biblioteca leyendo libros de Filosofía Contemporánea.

- Que pasa calabaza. - Henri.

- Amiguito no me siento bien, de hecho me duele la cabeza, todo es culpa de el profesor Brown.

- Es un pesado y no lo digo de forma literal.

- Gracias pero necesito leer otras 247 paginas de 300 que he leído desde hace - miro no reloj.  - 3 horas.

- Tu problema es que lees con aburrimiento pensando que al terminar una pagina todavía te faltan 276 más para leer.

- Me choca leer a menos que sean historias románticas juveniles.

- Te dejaron esto sobre en la puerta, dijeron que es importante. - me lo entrega y se retira.

Abrí de mala gana el mismo: Azul hoy a las ocho hay una fiesta en mi casa ¿que dices, vienes? no me dejaras esperando con este ramo de rosas de tu color preferido. Zack

Pensé en escribirle un mensaje de texto y decirle que estoy enferma de gripe. Para Zack: Muchas gracias por la invitación tan formal pero he tenido días complicados acá en la universidad así que espero a la próxima poder asistir.

Estaba apunto de mandar el mensaje pero al ver a Macarena entrando a la biblioteca pude ver que me dijo algo de ¿celular? saque mi celular y vi aquella foto: La belleza de mi nueva reina - es una imagen donde esta Macarena besando a Ashton, se encuentran frente la mansión.

Miro el mensaje que iba a enviar a Zack, borro todo y solo escribo: Cuenta conmigo.

Dejo el libro en la estantería y al darme la vuelta me encuentro cara a cara con Sharpey y a alias la Macarena ¿el mundo esta en mi contra hoy?

- Se les ofrece algo?

- Que Patetica te ves.

- Algo más? - les miro. - permiso. - paso en medio de ambas.

- Me quede con Ashton. - me burlo de ella en su cara.

- Pues te felicito. - aplaudo divertida. - nada de lo que hagas cambiara mi opinión, Harrison es idiota y tú una estúpida que cree llamar la atención pero en realidad nadie te soporta. - salgo de la biblioteca harta. - Estúpidas. - a lo lejos veo al chico fresa hablando con su hermana, en mi opinión están discutiendo.

- Estas equivocado Ashton. - Mena se aleja enfadada.

- Qué pasó chico fresa? problemas entre hermanos. - me mira de arriba a abajo.

- Me estas hablando a mi?

- Hay otro idiota apeidado Harrison aquí?

- Que graciosa, y la unica idiota aquí eres tú.

- Así es como tratas a las damas señor amargado. - se acerca a mi rostro amenazante.

- A ti te vale lo que haga o no haga ¿queda claro?

- Muy claro, extremadamente claro.

- Lo unico que me choca de vivir en el edificio K (la mansión) es tenerte a un lado de mi puerta fresita.

- No tenias un insulto complejo, ah se me olvidaba que eres Ashton Harrison un tarado odioso y sobre todo egoísta.

- Que linda. - me empuja y se dirige hacia la biblioteca seguro a ver a su noviesita plástica.

- Ojala te atragantes con esa cara de muñeca operada. - me di media vuelta directo a la mansión.

Justo a las ocho de la noche.

- Lista? - Cris.

- Saldré solo unas horas.

- Siento que para mañana tendrás un novio que te merezca.

- Te agradezco.

Al girar la perilla de la entrada principal.

- Ya te ibas? - Jay.

- Si tengo una especie de... cita.

- Bien.

- Solo Bien?

- Hiper bien? - le sonrio.

- Ya me voy. - el taxi silbo afuera.
- vuelvo pronto. - ya en la fiesta.

- Princesa. - Zack me abraza. - pensé que no vendrias.

- Esta vez celebramos el cumple de mi mejor amigo Fede.

- Federico?

- Si el que te presente cuando fuimos al cine.

- La otra chica era su novia.

- Si ella se llama Fátima es Rusa.

- Eso explica cosas.

- Ya se de que hablas yo tampoco logro entender a la pobre chica.

- Pronto aprenderá español.

Pasamos un rato con su amigo brindando y festejando, hasta que veo al fondo de la pista a Ashton con Macarena besándose como si se fuera a acabar el mundo.

- Ese es tu amigo no? - Zack. - el que salvaste de las brujas.

- Ya no somos nada ni amigos, ni compañeros, nada.

Él me mira a lo lejos.

- Azul he estado pensando que... - me harte de que no me quitara la mirada de encima. Jale a Zack de la camisa y lo bese como si no hubiera mañana.

Me aparte de él y mire al chico fresa que ahora besaba a su Maca Naca de una manera comprometedora. - Azul yo...

- No digas nada. - volví a besarlo pero no por gusto sino por ¿coraje? No, yo creo que solo necesito distraerme.

Simplemente tú. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora