01: Examen de graduación

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[TODO comentario de odio hacia CUALQUIER personaje será borrado y si persiste SILENCIARÉ a la persona en cuestión. no sería la primera vez que silencio a alguien por andar de castrosa en los comentarios, so don't try me. está bien que les disguste un personaje y lo expresen, pero NO hasta llegar a vejaciones e insultos]

(esta regla no corre a danzo y orochimaru, a ellos sí se les puede insultar a todo dar <3)


Esperaba fuera del salón a que Iruka, mi nuevo sensei, me llamara para entrar. Me balanceaba de atrás hacia adelante, con mis manos juntas en la espalda.

Por primera vez en mucho tiempo, me había puesto ropa que tenía estampado el abanico del clan Uchiha. No podía verlo pues estaba en mi espalda, pero en esos momentos parecía que ardía.

Estaba nerviosa, en las únicas cosas que podía pensar era en la reacción de cierto chico de cabello negro que estaba dentro de ese salón y en Itachi. No había querido separarme de él, no quería estar en la aldea. Konoha me era tan ajena como las demás aldeas ninjas, cuando había llegado el día anterior, no sentí nostalgia de mi aldea natal.

Extrañaba a Itachi, quería volver a estar con él. ¿Por qué Shisui-nii quería que yo estuviera en Konoha? ¿Para qué viajé con Itachi por tanto tiempo si de todas formas tendría que volver a la aldea?

La puerta que estaba delante de mí se abrió y pude ver la sonrisa ladina de Iruka.

—Entra, Hanako.

Suspiré bien fuerte, subiendo mi guardia y obligándome a dejar de pensar en mi hermano e Itachi. Entré al salón detrás de Iruka.

"—No tienes que levantar sospechas, Hanako, recuerda siempre actuar cómo lo acordamos... "

Ay, Itachi, decirlo es mucho más fácil que hacerlo.

Iruka me miró y lo noté nervioso. Parecía estar incluso más nervioso que yo.

—Preséntate, Hanako.

—Hola, mi nombre es Uchiha Hanako —dije, con mi voz sonando más profunda de lo que en realidad era.

—¡¿IGUAL QUE SASUKE?! —Chilló una chica de cabello rosa. Fue tanto su impacto que hasta se puso de pie al gritar.

Ella se puso roja, se tapó la cara y volvió a sentarse. Seguí hablando: —Acabo de llegar a la aldea, supongo que seremos compañeros de ahora en adelante.

No fue difícil dar con Sasuke. Aunque nunca antes lo había visto, fue muy fácil reconocerlo entre todos los alumnos en el salón. Sus ojos me miraban incrédulos, abiertos de par en par. Se fue poniendo pálido de a poco y dejó caer sus dos brazos sobre la mesa, deshaciendo esa postura cerrada que tenía segundos antes. Sus ojos eran tan negros como los míos.

Nos quedamos viendo fijamente y sentí que todos ahí eran conscientes de eso. El silencio absoluto duró unos segundos.

—Hanako, llegaste justo para los exámenes de graduación. —Tuve que voltear hacia Iruka para poder escucharlo. Tenía la sensación de que, si seguía mirando a Sasuke, no podría concentrarme en mi nuevo sensei. —Espero que puedas seguir el ritmo a pesar de incorporarte recién hoy.

Sonreí altaneramente sin poder contenerme. Sería fácil, Itachi me había entrenado bien.

—No se preocupe por mí, no soy de las que se quedan atrás.

Iruka asintió. —Puedes sentarte al lado de él. —Señaló a un chico de cabello negro en punta con una cola de caballo. La cara del chico era de aburrimiento total, era uno de los pocos que no estaba con la quijada casi hasta el suelo por verme ahí. Al lado de él había una niña muy bonita, de cabello rubio y ojos azules.

La última UchihaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora