La última Uchiha

12: Los diez novatos se encuentran

—¿Examen de selección chunin...? —preguntó Naruto.

—Es para escoger entre los genin quiénes tienen aptitudes para convertirse en chunin —expliqué—. Hay grados para los shinobis: genin, chunin, jounin, ANBU y kage. Y nosotros somos aún el grado más bajo, genin. Lo siguiente es chunin, y para eso hay que dar este dichoso examen, que normalmente se da en equipos.

—¿Kage? —preguntó emocionado Naruto—. ¡Estaré ahí, daré los exámenes chunin!

Gaara rodó los ojos y suspiró con cansancio. Se dio la media vuelta junto con sus compañeros y se dispusieron a caminar en dirección contraria a la de nosotros.

—Hey, tú, identifícate —demandó Sasuke dando unos pasos adelante.

—¿Uhm? —preguntó la chica de coletas, Temari—. ¿Me hablas a mí? —y se sonrojó.

—Ugh, es obvio que a ti no —respondí por Sasuke—. ¿Cómo a él le interesaría una persona como tú?

—¿Tienes algún problema? —preguntó avanzando un paso hacia mí.

—¿Quieres saberlo?

—Me encantaría averiguarlo —contestó amenazante.

—Las dos, cálmense —ordenó Gaara cruzándose de brazos.

Temari retrocedió los pasos que había avanzado con algo de temor.

Ni Kakashi-sensei me hacía callar cuando me golpeaba en la cabeza. Es más, mis ganas de decir tonterías aumentaban.

—¿Y tú quién te crees que eres para hacerme callar, eh? Quizás tus dos subordinados te tengan miedo, pero te informo que yo no. No te tengo miedo, enano.

Sí que le tenía miedo, en realidad. Su tono de voz hacía que mi cuerpo temblara y sus ojos tan fríos hacían que me preguntara qué había de mal con él.

Gaara apretó sus puños con enojo y vi que sus compañeros se aterrorizaban y retrocedían.

—Basta, Hanako —me llamó la atención Sasuke, me giré a verlo y él miraba detenidamente a Gaara—. Vamos, dime tu nombre.

—Sabaku no Gaara ―respondió él—. Tú también me llamas la atención, ¿cuál es tu nombre?

—Uchiha Sasuke.

—¿Y tú? —me preguntó señalándome con su barbilla.

—Si es para ligar te doy un nombre falso, pero como no te veo cara de pervertido o algo por el estilo, mi nombre es Uchiha Hanako.

—¡Hey, qué tal! ¡De seguro mueren por saber mi nombre! —dijo Naruto señalándose.

—De hecho, no —respondió Gaara

Si este chico supiera quién es realmente Naruto, sí que se interesaría por saber de él.

Se dieron media vuelta nuevamente y se fueron, desapareciendo del rango de mi vista.

Naruto se quedó con tal cara de perdedor que me debatí seriamente entre reírme de él o intentar consolarlo. Opté por ambas.

—Vamos, Naruto, no te tomaron en serio ahora porque tienes cara de idiota, pero cuando te vean pelear de seguro que les llamas la atención.

—Hanako-chan, siempre que intentas defenderme o subirme los ánimos solo haces lo contrario —lloriqueó.

Me reí con algo de culpa y le pasé un brazo por los hombros.

—Ay, no seas así, lo hago con la mejor de las intenciones.

—¡Jefe, tendrá que enseñarles a esos perdedores de lo que usted está hecho! —le dijo Konohamaru mientras daba puñetazos al aire con mucha energía.