LOST YEARS (a TEEN WOLF story)

14: "Nuevas Oportunidades"

Noah está caminando por las calles de Nueva York, mientras sabe que está siendo vigilado. Se sienta en una plaza mientras les da comida a las palomas. Sus pensamientos estaban junto a su hijo y como le gustaría estar con él. La verdad es que le cayó como balde de agua fría lo que Chris Argent le traía de noticias, aunque no había hablado con muchos detalles ya que los agentes de la rama sobrenatural del FBI estaban importunando, aunque no sabía porque pero si su hijo le había dicho que lo negara era porque debía hacerlo y porque algo andaba mal con ellos. Pero habían pasado días y gracias a los compañeros de Stiles en el FBI, más en específico Jughead, le enteraba de la vigilancia de los agentes de Jesse. Ellos a su vez en el bunker sabían que debían ser las personas más secretamente buscadas del mundo y el bunker no daba para muchos aunque Jughead lo había hecho en específico espacioso y para varios, pero de verdad estar en medio de la nada y tener cuidado con ser rastreados en un lugar subterráneo no era un panorama para un largo tiempo.

Y el tiempo no perdonaba y Chris debía hablar con Noah para saber dónde estaba Stiles y comentarle lo que había pasado con su hija Alison, que de por si estaba en una situación muy incómoda ya que estaba en la misma ciudad en la que también estaba Scott, aunque el alfa no estaba enterado aun de que su novia estaba viva. Alison estaba siendo cuidada por su padre e Isaac y este último se había vuelto a encariñar con la cazadora a pesar de que supo que esta prefirió a Scott antes de su estado comatoso. Era algo muy contradictorio y en su interior todo estaba revuelto. Para todos lo estaba.

ꟷ Estas preocupada por Scott ¿verdad?ꟷ le pregunto Isaac con una mezcla de tristeza y alegría. Ella olía a tristeza.

ꟷ No lo he visto en mucho tiempo y no sé qué pasara cuando lo veaꟷ dice la pelinegra un poco incomoda, porque sabía que el omega a su lado podía oler sus emociones y la situación entre aquellos lobos no se había solucionado y ella estaba más que confundida.

ꟷ ¿Aun lo amas?ꟷ pregunto Isaac poniéndose a su lado, pero sin mirarla.

ꟷ Isaac, yo...ꟷ intento responder pero el lobo se dio la vuelta rápidamente y se retiró mientras la cazadora le seguía por la casa hasta que le alcanzo tomándole la mano. Isaac quedo sin aliento ante la suavidad de la mano de la chica y se dio la vuelta inmediatamente.
De la nada un vigor le entro a su cuerpo como cuando estaba con ella, antes del coma, antes del nogitsune. Estaban frente a frente, ella con sus sentimientos confundidos porque Isaac se veía más maduro a pesar de los años con una barba descuidada que le hacía verse según ella muy atractivo.

Isaac aprovecho sus atributos y comenzó a leer a Alison por entre sus emociones y sabía que si daba el paso adecuado podía llegar a ella. Se miraron a los ojos e Isaac no titubeo en mirar su boca y rápidamente volver a ella, a sus inocentes ojos.

Sintió el cuerpo de ella y el estremecerse ante su mirada y respiración. Su cuerpo avanzo milimétricamente hacia ella y aunque sus cuerpos no podían tener contacto, estaban tan sensibles que hasta por a través de su ropa podían sentirse como si estuvieran desnudos. Ella sintió su cuerpo deshacerse, mientras que Isaac sentía cada musculo tensarse y ponerse firme. Realmente se veía bien con ese pantalón y botas estilo militar que llevaba puesto.
La química estaba ahí, intacta, hirviendo en sus cuerpos que no soportaron más. La musculatura del lobo era envidiable y Alison era la misma chica de los deseos del de rulos. Muy pronto sus cuerpos estaban unidos en un vaivén que paso del amor a la pasión más salvaje del que ambos claramente disfrutaron.
Cada estoque era más placentero que el anterior y más salvaje y el roce del abdomen de Isaac en Alison le provocaba delirar y quedar en blanco y solo ceder ante sus impulsos. Isaac se detuvo y le dio la vuelta a lo que la cazadora no se negó en absoluto, pero como todo hombre lobo, la anudacion era algo que se les había olvidado a ambos y es que cuando el lobo del hombre lobo estaba a gusto anudaba a quien le gustaba y eso fue lo que sucedió, hasta que llegaron al clímax máximo entre gemidos y el movimiento continuo y desmesurado de la cama en donde estaban.