El Internado Harrison

40

P.O.V Alex

A la hora del almuerzo, todos sólo tienen ojos para ver mi mano entrelazada con la de Brandon, el-sexy-jugador-"novio"-de-mi-Némesis, desfilamos mientras TODOS tratan de averiguar algo. Cuando nos sentamos en mi mesa, Grove tiene sus ojos azules apuñalando a mi novio-es raro llamarlo así, siendo sincero-, Loki obviamente no puede ocultar el rasgo que nos hace tan parecidos: la curiosidad.

-¿Son novios?-pregunta achinando los ojos. De ninguna manera va a confiar en ese rubio.

Brandon se pone rojo y baja el rostro, avergonzado. A pesar de que es un chico tan grande y musculoso, él es exageradamente tímido. La verdad mi corazón aun duele un poco por Jean y muchísimo por Grove, pero ahora estoy con él.

-Sí, él es mi novio.

Ninguno de los presentes dice algo, por lo que comemos en santa paz, por supuesto esto no puede durar mucho, alguien agarra la camisa de mi chico y lo lanza al suelo. Me doy la vuelta en seguida para encontrarme con los ojos de hielo de Jean Dunois, antes de que pueda saber qué es lo que me impulsa-y mientras ese par pelea-me levanto de un salto.

Mientras, de nuevo, todo el comedor observa fascinado.

-Basta.-gruño separándolos y poniéndome entre ambos, que ya estaban levantados.-¿Por qué hizo eso profesor Dunois?

El susodicho me ve como si no me reconociera, entonces sale prácticamente corriendo del comedor, entonces es cuando me doy cuenta del que rubio quiere ir a ahorcarlo, por eso lo abrazo antes de darle un beso.

-Cálmate, bebé.

Para mi sorpresa, esto calma por completo toda la ira de Brandon.

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P.O.V NARRADOR

-¿Por qué Alex? ¿Por qué?-se pregunta en voz baja Dunois.

Pero que riñones tiene este hombre, él había enviado al demonio a Alex y ahora lo quería de vuelta. De cualquier forma esto no importa porque tiene que casarse. Él.

¡Él tenía que casarse!

Por culpa de su estúpido padre. La cólera lo está devorando vivo. No soportaba aquello, ver a Alex, a su Alex, con otro chico.

-¿Pero qué puedo hacer? Si igual me caso en un mes. ¿Qué puedo hacer para tener a Alex solo conmigo?-grita desesperado.-Ya conseguí que Moshimoto lo mantenga alejado de Kalassi y ahora está con ese idiota.

Sinceramente, no había nada que hacer. Dunois lo dejo no porque Alex no lo recordara, sino porque tiene que ponerse la corona del imperio de su padre. ¡Él no quiere esa maldita corona! No quiere dejar de dar clases, pero luego de que estuviera casado con... Ella, tendría que volver a Francia. A su país natal. Maldijo hasta que se canso y luego se fue a dar clases.

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P.O.V NARRADOR

Grove no resiste aquello, ver como su chico, Alex, SUYO, hace aquello con ese descerebrado de Brandon. ¿Pero qué puede hacer? Después de todo es su hermano. Cuando Moshimoto se lo conto al principio no lo creyó, pero luego hablo con sus abuelos y ellos le confirmaron que tiene un medio hermano por parte de papá. La cosa era que ninguno lo conoce y como Kenji estaba tan seguro de que era Alex, el rubio termino por creérselo.

Pero esto era demasiado. No puede aguantarlo ni un segundo más, por lo que termina yéndose muy rápido del comedor. Alex tiene que ser feliz, y si Brandon va a ser el responsable de aquello, pues que así sea. Pero él no tiene porque verlo.

Termina en su residencia, a punto de dejar correr sus lágrimas, pero no va a dejar que nadie lo vea de esta forma, abre y gracias al cielo el lugar está vacío. Se deja ir y comienza a dar gritos de dolor, aquello es como tener una herida abierta y que le echen sal. Los alaridos despiertan de su tranquilo sueño a Leo, intrigado más que asustado salen corriendo por las escaleras hasta llegar al lugar donde está el sonido.

Para su sorpresa se encuentra con una muy conocida mata de cabello color oro.

-¿Grove?

Genial, absolutamente genial. Tuvo que haberse imaginado que su líder estaba en la casa. ¿Ahora que iba a hacer?

-¿Estás bien?

-No, Leo, no lo estoy.

El joven líder se sienta a su lado antes de abrazarlo como si fuera su cría a la cual necesita proteger, le acaricia el cabello mientras Grove deja todo el dolor en forma de mocos y lagrimas sobre él.

-Me rompieron el corazón, lobito.-carraspea.-No sé qué hacer.

-Tranquilo, Gro. Por ahora solo tienes que tratar de sacar todo el dolor, luego averiguas que vas a hacer.

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P.O.V NARRADOR

Kenji no deja de llorar mientras conduce, sinceramente no le gustaba causarle dolor a ninguno de sus amigos y tras ver el dolor en las facciones supo que Grove estaba rompiéndose por dentro. Consiguió que el director le prestara su auto, necesita ir a verla.

Estaciona frente a la casa de Alexandra Zeller, toca tres veces mientras intenta calmar el llanto. La mujer, de treinta y siete años abre la puerta. Tiene el cabello castaño en una trenza. Viéndola es idéntica a sus hijos. Ella se impresiona de verlo allí, ¿Qué hacia uno de los amigos de Alex ahí?

-¿Puedo pasar?-pregunta, cortes como siempre.

-Claro-dice ella haciéndose un lado para que pase.

Ambos se sientan frente a frente, la tensión puede cortarse fácilmente con un cuchillo.

-¿Y bien?-pregunta amablemente

-Necesito que me prometa...-su voz se quiebra, por lo que carraspea.-Necesito que me prometa que va a decir la verdad.

-¿Qué verdad?-ella se pone nerviosa y a la defensiva.

¿Qué rayos quiere este chico de ella? Dios sabe que ha hecho lo mejor para sus hijos, siempre.

-Que Alex es hermano de Grove.

Por un lado siente alivio y por el otro no tanto, este chico sabe que Alex tiene otro hermano, pero no es Grove. Ese chico rubio amigo no es hijo de Valerio, eso era imposible.

-No sé cómo te enteraste de que Alex tiene otro hermano aparte de Alyssa.-ella respira profundo para no gritar.-Pero no es Grove.

Aquello cae en su cabeza como un montón de piedras, aun así el no puede decirle nada a Grove. Después de todo aquel imbécil que lo contactó sabe su mayor secreto.

-Disculpe por esto, fue mi error.