Amaneciste en la cama de un hospital sin recordar quien eres o como llegaste ahí, ¿que podría pasar?
Hay veces que dicen que mientras menos sepas mejor será, ¿esta será una de estas ocasiones?
—Perfecto Luna —dijo Ava, se escuchaba complacida—Los detalles de tu entrenamiento llegarán a tus padres más tarde —dijo Ava.
—Ya está hecho —dije colgando el teléfono mirando a mis padres, ellos me abrazaron.
—¿Has bajado al sótano? —Preguntó mi padre.
—No, ¿tenemos un sótano? —pregunté.
—Ven —dijo mi madre mientras nos levantamos y ellos se dirigieron a un estante de libros en la sala, examinó los libros y agarró un libro azul, una el estante se separó en dos mostrando una puerta, mi madre la abrió y daba a unas escaleras—Por aquí —dijo ella, los tres bajamos las escaleras hasta llegar a un pasillo—Luna, aquí aprenderás todo lo que debes aprender, tenemos equipos de tiro, lugares de pelea, entre más cosas —dijo mi madre—Puedes venir aquí cuando quieras, pero nada puede saber de aquí, solo miembros o hijos de los miembros de Quimera pueden saber de este lugar.
Explore las puertas y justo lo que decían, habían pistolas de diferentes calibres, pero eran de caza, las mismas que encuentras en los supermercados, las balas eran diábolos, habían diferentes objetivos simulados, habían de gente en diferentes lados, mientras se movían, era un campo de tiro, luego salí de aquella puerta y encontré una sala, que tenía varias colchonetas en el suelo, equipamiento para lucha y cosas para ejercitarte, salí de esa puerta y entre a la tercera puerta, eran dos tipos de punterías, la primera eran blancos que tomaban la forma de personas y la segunda era como una diana, era para lanzar cuchillos, era sorprendente lo que había en esta casa y lo escondido que estaba, nunca pensé que habría algo así aquí.
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—Black —respondió Nick a la llamada de su teléfono.
—Que tal —respondió Ava.
—Grey, ¿que necesitas?
—Primero, quiero saber porqué faltaste a tu entrenamiento hoy y segundo, tienes la tarea de darle a Luna el entrenamiento formal.
—¿¡QUE!? —Gritó Nick por el teléfono—¿Que hiciste Ava?
—Nada, solo te daré la obligación y creo que para ti el privilegio de darle a Luna el entrenamiento formal, tú y tu hermano se encargarán de ella y cuando esté lista me harán saber.
—Ava... —dijo Nick antes de ser interrumpido por Ava.
—Agente Grey Black, Agente Grey —dijo Ava por el teléfono corrigiéndolo.
—Agente Grey, se supone que los entrenamientos formales se dan por los padres o por la misma organización, ¿por qué debemos de darlo nosotros que estamos en entrenamiento?
—Verá Black, que usted y su hermano apenas tienen 17 años y ya han asesinado políticos importantes, en casas con seguridad de una fortaleza, que la mayoría de nuestros agentes en entrenamiento no logran siquiera pasar la reja, lo he hablado con mi padre y él está de acuerdo, si son incapaces de poder entrenar a la futura agente Coteman, Quimera decidirá eliminar a Luna del sistema.
—¿En que te refieres al sistema?
—No creas que solo de nuestro sistema Black, ella ahora sabe de nuestra identidad, la policía es nuestro amigo, pero no somos amigos del gobierno, hay agencias que darían lo que fuera por un nombre, así que si te rechazas a entrenarla, ella deberá ser eliminada.
—Escúchame Ava, si pones un dedo en Luna —dijo Nick furioso antes de que ella lo interrumpiera.
—¿Me matarás? —Preguntó ella—Quiero verte intentarlo, ademas, no será mi culpa, tú sabes que es mejor para ella, quiero saber sus primero avances antes de navidad, o tomaré esto a mis manos y sabes que soy una chica práctica, aquí matas o mueres, que tengas un excelente día Nick —Ava colgó el teléfono, Nick lo aventó al sillón y gritó furioso.
—¿Que pasa? —Preguntó Mike bajando las escaleras.
—Es Ava —dijo Nick furioso—Si no entrenamos a Luna, ella morirá.
—¿Hizo QUE?
—Mike —dijo Nick más calmado—¿Crees que me equivoqué, que indirectamente asesine a Luna por un chance de que vaya a la escuela?
—No Nick, es hora de que tú aceptes, conociste a Luna cuando era débil, ella ya no es débil, entrénala, de todos modos ya no tienes opción.
—Mike, ella morirá si entra a Quimera.
—No morirá allá, morirá ahora si no la entrenamos, ella sabe a que se metió.
—No hermano, no lo sabe,
—Escúchame Nicolás —dijo Mike irritado—No la puedes proteger de todos los males, pero debes de protegerla ahora, Ava tiene razón, ella sabe ahora demasiado, es tu decisión.
—Tienes razón Mike, ¿pero sabes lo que se siente? Preparar a alguien para un peligro.
—No creo saberlo, pero entiendo que hace más fuerte que sea alguien que amas.
—¿Desde cuando?
—Desde que vi como la mirabas antes de entrar a clases, soy tu hermano, soy tu gemelo, lo sé todo de ti.
—Bueno, prepárate maestro Mike.
—Ja. Ja. Ja —rió Mike sarcásticamente—Pero no tienes sentido del humor.
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—¿Agente Coteman?
—Agente Grey, ¿a que le debo el gusto?
—lo siento Agente Coteman, esto es sobre el entrenamiento de la joven Luna Coteman —respondío una voz muy grave en el teléfono, que hizo que a la señora Coteman le recorriera un escalofrío.
—S-Señor —la señora Coteman intentaba no tartamudear mientras hablaba con el director de Quimera, aquel que solo una persona conocía su rostro, su propia hija.
—Agente Coteman —respondió la voz—Dados los antecedentes de los cadetes llamados Nicolás Black y Mike Black, como una prueba de lealtad como puede llamarse, ellos serán asignados el entrenamiento de su hija Luna Coteman.
—¿Mi hija? —Preguntó la señora Coteman más preocupada de lo que había estado en toda su vida—¿P-Por qué?
—Queremos saber la capacidad que tiene ambos, he escuchado que gran aporte de las habilidades de lucha de la joven Coteman viene de los Black, no tiene de qué preocuparse de todos modos Agente Coteman, pero usted sabe no, que si el águila pierde una de sus plumas más pequeñas, habrán más plumas que la remplacen, o se ha encariñado con la pluma.
—S-Señor.
—Está hecho Coteman, quiera o no, puede hablar con los nuevos entrenadores de la joven Coteman, quiero sus primeros avances el día 13 de diciembre.
—Está bien Señor —dijo la señora Coteman, su jefe colgó el teléfono, y la señora Coteman gritó de rabia—¿Que he hecho? —Preguntó mientras se rompía en llanto en la silla, su esposo llegó.
—Lara, ¿qué pasa? —Preguntó él corriendo a abrazarla.
—El Grande quiere asignar a Nick y a Mike como los nuevos entrenadores de Luna, si no es aceptada en Quimera, será asesinada —dijo la señora Coteman—No quiero perderla Carl, no a ella.
—Entonces ellos la entrenarán, y lo harán genial o terminarán como 68-B.
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