Oblivion: Olvidado. [#1]

Capitulo 33

—Entonces, tendremos que avisarle —dijo Nick calmándose.

—Ella te hará más caso a ti que a mi —respondió Mike.

—Entonces vamos a su casa, apuesto a que su madre ya sabe y nos va a dar aquella charla de "si fallas mueres"

—En camino cadete Black.

—Muy divertido —dijo Nick sarcásticamente.

Unos minutos más tarde se encontraban ambos en la puerta.

Ding dong

Abrí la puerta para encontrarme con ellos—¿Que pasa?

—¿Están tus padres Luna? —Preguntó Nick.

—Si, mi madre está un poco triste no entiendo porqué.

—Necesitamos hablar con ustedes -respondió Mike.

—Pasen.

Dentro estábamos sentados todos en la sala—Ava me ha comunicado —dijo Nick haciendo una pausa—Que quiere que nosotros te entrenemos Luna.

—¿Ustedes? —pregunté confundida—Pensaba que los entrenamientos eran hechos por los padres.

—Y lo son, pero Ava lo decidió de esta manera y si quieres entrar a Quimera, deberás para diciembre poder manejar un tipo de arma, cuchillo o pistola, al menos.

—¿Mamá? —pregunté preocupada mirándola.

—Hija, es lo mejor, no tenemos el poder para cambiar eso, además no hay nadie en quien confíe más que ustedes dos —dijo mi madre.

—El entrenamiento comenzará el lunes Luna —dijo Nick, notaba poca, pero había preocupación si no había miedo, desde mi sueño ayer, no dejaba de pensar en Nick y cuando o como lo pude haber conocido, pero decidí ignorarlo.

—Luna, ¿puedes ir a tu habitación un segundo? Quiero hablar de algo importante con ellos —yo asentí y subí las escaleras.

—¿Ustedes saben lo que está en riesgo verdad? —preguntó la señora Coteman.

—Si, si no logra entrar, morirá —dijo Mike.

—Desde ahora la vida de mi hija está en sus manos, si fallan en protegerla.

—Pagaremos nosotros, estamos de acuerdo señora Coteman —respondió Nick.

—Entonces, ustedes eligen donde entrenar, en su casa o en la nuestra —respondió la señora Coteman.

—Gracias señora Coteman.

—No hay problema chicos —la señora Coteman miró por la ventana—Se hace tarde chicos, apuesto a que tienen escuela mañana.

—Cierto señora Coteman y todavía necesitamos hacer tarea —respondió Mike mientras ambos se levantaban—Buenas noches.

—Buenas noches chicos

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El siguiente día al despertar hice la misma rutina de todos los días, mire la corona de plástico que estaba en mi escritorio la cual me había quitado hace días y había ignorado su existencia, decidí guardarla en mi mochila teniendo cuidado de que no se rompiera, bajé a desayunar, antes de salir recordé mis útiles de pintura y corrí de nuevo a mi cuarto a recuperar mi estuche especial para mis brochas y pinturas, bajé justo cuando habían llegado los hermanos, me subí al carro corriendo—¿Que pasa, por qué corres? —preguntó Nick mientras me subía y bajaba mi respiración.

—Solo corrí por mis cosas y no se me ha pasado.

—Pfff —respondió Mike—Vámonos —dijo mientras aceleró.