Llegaste, y mi abecedario perdió letras. Te fuiste, y solo supe pronunciar tu nombre.
Llegaste, y supe que fuiste la musa que inspiró a Sabines y a Benedetti. Te fuiste, y comprendí a Neruda al escribir "puedo escribir los versos más tristes esta noche".
Llegaste, y Roma ardió por tu amor. Te fuiste, y aquello solo fueron ruinas.
Llegaste a mi vida en primavera, y la dejaste en un invierno eterno.
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RandomGusanos que comen estrellas, ángeles que se disfrazan de demonios por miedo, mundos alternos, otoños que extrañan, primaveras que recuerdan, un par de canciones y más divagues en esta recopilación de relatos y poemas míos. Pasa y lee, no te arrepent...