My Biggest... ¿Mistake? (Brutasha)

Only What We Think Matters

- ¡No tenías porque haber dicho eso, Steve!

Escuchó Bruce gritar a Natasha. Se había encerrado en la recamara y había pasado todo el tiempo que llevaba ahí acostado en la cama, mirando al techo.

No le asombraba el hecho de que Steve no estuviese de acuerdo con la relación entre él y Natasha. Al final de cuentas, como él mismo había dicho, Bucky era su mejor amigo y era normal que Steve pensara que los dos terminarían juntos. Casados, con hijos y hasta un perro.

Lo que le molestaba, era que Steve hubiese decidido justo ese momento para vociferar dichos pensamientos. Y sobre todo, que lo haya dicho de tal forma, que Bruce sintió que Steve podía llegar a odiarlo si este matrimonio continuaba.

Lo cual provocaba más coraje en Bruce. Al final del día, Bucky estaba comprometido y parecía ser que Steve no quería entender eso. La realidad era, que aunque Bruce no estuviese en la vida de Natasha, un futuro entre ella y Bucky sería practicamemte imposible cuando el hombre estaba a punto de dar el "Sí" en el altar.

Bruce suspiró. No era así como había imaginado que la noche tomaría su curso. Mucho menos que la noticia de su bebé que venía en camino se vería empañada por eso.

Un toque en la puerta lo hizo perder el hilo de sus pensamientos, y creyendo que era Tony quien lo buscaba, gruñó enojado ante de contestar.

- Dejame en paz, Tony. Quiero estar solo.

- No soy Tony, soy Pepper - se escuchó del otro lado de la puerta - Por favor abreme, Bruce.

Bruce se levantó de inmediato. Algo tenía Pepper que hacía imposible que le dijeras que "no" a algo que ella pedía. Abrió la puerta y dejo que ella ingresara al cuarto antes de volver a cerrar la puerra con seguro.

- ¿Qué paso, Pep? - preguntó volviéndose a sentar en la cama y palmeando el espacio a su lado para que ella hiciera lo mismo.

- Nada, solo quería saber cómo estabas - Pepper le sonrió de tal manera, que Bruce permitió que todos los muros que había construido en los ultimos minutos se derrumbaran.

- Mal - confesó - No es fácil escuchar a alguien decir que tu esposa debería estar con otro hombre.

- Imagino que no, pero tampoco eso significa que lo que esa persona opine sea cierto - Bruce la miró confundido - Te lo voy a poner de esta forma. ¿A ti te gusta la pizza con champiñones?

- ¿Qué? - preguntó Bruce sin entender de qué estaba hablando Pepper.

- Tu solo responde.

- Ammm, no, no me gusta.

- Pues a mi sí - respondió - Y yo creo que la pizza debe ir acompañada de champiñones.

- ¿Estás queriendo decir que Natasha es la pizza y yo soy los champiñones? - cuestionó Bruce, entendiendo un poco a dónde quería llegar Pepper con su ejemplo.

- Exactamente - Pepper asintió - Podrá haber gente que opine que la pizza esta mejor acompañada de otra cosa, y habrá gente que opine que los champiñones es el complemento perfecto.

- Lo cual quiere decir que... - Bruce la miró con la intención de que ella terminara la oración por él.

- Lo cual quiere decir que Steve puede pensar que tu no eres lo mejor para Natasha, así como yo puedo pensar que ustedes son la pareja perfecta - Pepper explicó - Pero al final, no importa lo que piense Steve o lo que piense yo. La relación es entre Natasha y tu, así que lo primordial es lo que los dos crean.

Bruce sonrió al entender el punto al cual había llegado Pepper. Comprendió entonces que ella tenía razón. No podía permitirse derrumbar por una simple opinió de alguien a quien ni siquiera conocía. ¿Cómo podía Steve dar una opinión objetiva, cuando Bucky era su mejor amigo y había conocido a Bruce por primera vez apenas unas horas atrás?

- Muchas gracias, Pepper - le sonrió honestamente - Tony quizá no lo admita pero sin ti estaríamos todos perdidos.

- Yo solo cuido a mi familia, Bruce - Pepper le sonrió con cariño - Y eso es lo que son ustedes para mi, mi familia.

Ambos se fundieron en un fraternal abrazo, cargado de muchas emociones que se habían formado durante tantos años de conocerse y de amistad.

- Y ahora, Bruce Banner - habló Pepper en cuanto se separaron - ¿Me quieres explicar por qué no me había enterado de que ibas a ser padre?

Una sonrisa se dibujo en el rostro de Bruce ante la mención de su bebé.

- Quisimos esperar con Natasha a que el médico nos dijera que todo estaba bien - se escusó - Por eso preparamos esta cena. Para darles la noticias.

- Estoy muy feliz por ti - Pepper colocó una de sus manos sibre la de Bruce - Estoy segura de que serás un excelente padre, Bruce.

- Ojalá que así sea, Pepper.

- Bueno, ahora es mejor que salgamos - Pepper se pusó de pie - Tengo miedo de que Tony vaya a asesinar a Steve con un tenedor.

Bruce asintió, riéndo, y ambos salieron de la habitación. Cuando llegaron a la cocica, el ambiente estaba tenso y Natasha parecía estar regañando a Steve. Mientras Tony lo miraba en silencio, como planeando su asesinato.

- Lo siento, Bruce - interrumpió Steve a Natasha en cuanto los vio llegar - No fue mi intención hacer ese comentario ni mucho menos amargarles este momento.

- Pero lo hiciste, animal - habló Tony entre dientes.

- Tony - habló Pepper con tono de advertencia.

- Es la verdad, amor - respondió Tony - Solo porque ese tal Bucky sea el mejor amigo de Steve desde que estaban en pañales, no le da derecho a hacer sentir menos a Brucie.

- Esta bien, Tony - Bruce caminó hasta colocarse a un lado de Natasha y rodeó su cintura con su brazo - Ya comprendí que Steve puede pensar lo que él quiera. No a todo el mundo le gustan los champiñones.

Todos a excepción de Pepper, lo miraron extrañamente. Ninguno comprendiendo lo que Bruce había querido decir.

- Okay... - Steve respondió lentamemte, confundido - No sé si de verdad estamos hablando de champiñones o de otra cosa.

- El punto es, Steve, que tu estás en todo tu derecho de desear que tus dos mejores amigos estém juntos - continuó Bruce - Pero eso no tiene porque afectarme o cambiar mi vida. Natasha ahora esta conmigo, y yo la amo. Vamos a tener un hijo juntos y te puedo asegurar que no habrá un solo día en que yo no haga mi mayor esfuerzo por ganarme completamente su corazón.

Natasha lo miró con los ojos brillándole por las lágrimas y una sonrisa en su rostro.

- Tu ya tienes mi corazón, Bruce - fue lo único que dijo y eso solamente bastó para él.

Bruce le sonrió antes de besarla corta y castamente. Natasha era su esposa y la futura madre de su hijo o hija y Bruce no iba a permitir que se le fuera de las manos. Así se le fuese toda la vida en ello.