"Tu precio"

Parte 16: Deseos de locos

16-Deseos de locos

**Sen**

--Flashback—

-A ver...llevo crema, champú, la ropa...- sonrío cuando cojo entre mis manos un pequeño body de bebé que compré hace unos días en una tienda. A pesar de estar corriendo un gran riesgo tras haber decidido seguir con el embarazo y tener que llevar una malla ajustada apretándome mi vientre de seis meses, cada vez estoy más ansioso por conocer a nuestro bebé. Un hijo de Zangetsu...dioses, ¡podría chillar de emoción!

-Sen- casi se me sale el corazón por la boca cuando oigo la voz de mi yakuza más protector, Kariya Jin. Escondo el body a tiempo en la maleta antes de girarme para mirarle algo molesto por su repentina interrupción.

-¿Qué quieres? Estoy a punto de irme-

-Sigo molesto por no poder ir contigo de vacaciones. Necesitas que te protejan, eres un dragón, no lo olvides-

-No lo olvido ¡pero no necesito que me atosiguen! Voy a estar con unos amigos en casa de un profesor de confianza ¡no va a pasar nada!-

Mentira. En realidad el único "profesor" que estará conmigo será mi querido Zangetsu con el que disfrutaré las vacaciones hasta que llegue el momento del parto. Son casi tres meses fuera de casa y solo espero que al bebé le dé por nacer antes de que vuelva a retomar el instituto. Aún estamos dando vueltas de cómo compaginaré su crianza, porque Zangetsu puede quedársele en casa pero yo tendré que inventarme mil excusas para poder estar todos los días con ellos. Algo complicado, pero me arriesgaré.

-¡Sen!- Kariya me engancha de un brazo haciéndome abrir los ojos de par en par cuando veo su mirada rojiza y celosa taladrándome. No tarda en darse cuenta de cómo se está poniendo y me suelta haciéndome una reverencia.

-Temo por ti. Llevas meses esquivando a toda la familia y no sé porqué, pero algo te pasa. Me jode no poder ayudarte-

-No necesito que me ayudes, ya has hecho bastante. Protege a mi familia en mi ausencia, Jin- le sonrío viendo su cara de estupor y salgo de la mansión con la maleta para coger un taxi y reunirme con Zangetsu sin ver cómo Kariya me observa desde la ventana de la habitación con los puños apretados y una mirada agresiva que podría atemorizar a cualquiera....menos a mí que era inconsciente e inocente de lo que con el tiempo se me vendría encima.

Las semanas que pasé con Zangetsu jamás podré borrarlas de mi mente y mucho menos la noche en que mi parto se adelantó tanto que temimos por la vida de nuestro hijo. Ya teníamos concertada una cita clandestina con el doctor Ishida Souken que guardaría nuestro secreto con tal de ayudarnos a traer a mi hijo al mundo. Un hijo que con solo mirarle al nacer, lloré de felicidad al besar su carita mientras que Zangetsu nos abrazaba a ambos y me susurraba al oído un "te quiero" que me llenó el alma....

--Fin del flashback—

-Ten...sa....- abro los ojos al oír otro golpe de martillo que me desvela completamente haciéndome refunfuñar. Como me pasó en mi primer embarazo, tengo tanto sueño a todas horas que no me apetece salir de la cama, pero necesito moverme o me dolerán los huesos. Maldición. Me doy asco con solo mirarme al espejo, menudos pelos llevo...y las ojeras, más mi apatía, hacen un cuadro perfecto.

-¿Qué demonios estás haciendo? Todo ese ruido molesto y....- abro los ojos al ver el salón recogido y de aspecto limpio con dos estanterías de libros adornando la pared y al impostor sentado en un sillón con un libro en sus manos leyendo. ¿Pero qué...?

-Al fin despiertas ¿tienes hambre?-

-¿Qué es todo esto? ¿Lo has robado de la biblioteca?- veo como levanta su enorme cuerpo para venir hacia mí y posar ambas manos en mis mejillas haciéndome sonrojar ante su intensa mirada oscura.