"Tu precio"

Parte 15: Pasiones atadas y desatadas

15-Pasiones atadas y desatadas

**Byakuya**

Ah! Me cuesta respirar. Pero esta vez, disfruto esa sensación de ahogo que me provoca la lengua de Renji quemando cada rastro de mi piel por donde me lame, mi cuello, mi nuez, mi oreja, mi rostro incluso hasta llegar a mi boca entreabierta que pide más de esa deliciosa boca que jadea sobre mis labios haciéndome sonreír ínfimamente. Puedo sentirlo. Debajo de mis muslos, sentado sobre sus piernas, cómo su erecto miembro está latente por mí, como el resto de su cuerpo tenso y presa de la excitación, no deja de temblar contra el mío al igual que tiembla mi corazón.

-Byakuya....Byakuya.....- Echo la cabeza hacia atrás escuchando mi nombre pronunciado una y otra vez de los labios de Renji que jadea cada vez que yo lo hago. Nuestra ropa ya es un montón de harapos lejos de nosotros y nuestros cuerpos desnudos se acarician y abrazan transmitiéndonos cada vez más calor. Más deseo.

-Renji....ah, Renji estoy....ah!- Renji agarra mi erección tras darme un lametón cariñoso en la oreja y sonríe mientras mueve su mano de arriba abajo arrancándome unos gemidos tan roncos que no reconozco mi voz excitada.

-Lo sé mi amor....hazlo....déjame ver cómo te corres....- aprieto sus hombros cuando el orgasmo se apodera totalmente de mí y apenas soy consciente de que me he corrido en su mano cuando descanso mi frente contra la suya y él sonríe tontamente mirándome. Abro los ojos encontrándome con los suyos y meneo la cabeza al oír su carcajada antes de besarnos apasionadamente.

-¿Estás bien?- le asiento entrecerrando los ojos y le agarro del cuello para aspirar el aroma de su cabello rojo suelto hasta su trasero. -¿Tienes miedo?- Renji me retira para poder ver mi rostro ante esa pregunta y yo frunzo el ceño para después suspirar.

-Sinceramente, me avergüenza no estar a la altura-

-¿En serio?? Entonces estamos igual, jaja-

-¿Tú no....? –

-¿Creías que había follado con otro que no fueras tú? Me subestimas. Me he hecho muchas pajas pensando en ti, eso no te lo voy a negar, pero esperaba....que algún día...pasara esto....-le miro aún sorprendido pero mi instinto me hace hundir mis dedos entre su cabello para atraerle hasta mi boca y besarle salvajemente mientras nuestros cuerpos se frotan el uno contra el otro y al final Renji termina sobre mí, ambos tumbados en el suelo y yo debajo mirándonos con la respiración agitada. Me parece increíble que un chico como él, que ha podido tener a cualquiera a sus pies, haya decidido esperar a que yo me decidiera a dar este paso. Me enternece. Me hace desearle mucho más. Sin dudar.

-¿Pu...puedo tocarte? Ya sabes..."ahí"....- resoplo mirándole más serio y asiento haciéndole soltar una carcajada. Giro la cabeza a un lado algo avergonzado por cómo me ha abierto las piernas de golpe y está embobado mirándome los bajos.

-¿Cuánto piensas seguir mirando? Empiezo a tener frío-

-¡No te enfríes, enseguida te caliento!!!-

-¡Renji!!- no puedo evitar gritarle cuando me pone casi boca abajo para tocar mis nalgas con sus dedos y me ruborizo cuando me separa las nalgas y pasa un dedo por la rugosa piel de mi agujero haciéndome gemir.

-Jeje...tan pequeño y apretado...se ve delicioso....-

-Idiota....te estás burlando-

-¡Para nada! ¡Me moría por tocar tu agujerito desde hace años!! Se me derrite la polla de solo pensar que voy a....- ve cómo le estoy mirando por su vocabulario tan soez y se rasca la cabeza volviendo a ser él.

-Vale, vale, necesito centrarme. Estoy muy nervioso....-

-Lo he notado. Hazlo de forma natural...como lo sientas...-