"Tu precio"

Parte 30: El precio de la felicidad

30-El precio de la felicidad

**Renji**

La sonrisa viene a mis labios de forma automática cuando veo a mi hija Ichika acariciar los mechones grises del cabello de su abuelo Ginrei mientras éste la mira con tal devoción que es imposible ocultar. Ishida Souken también sonríe a nuestro lado por los actos de la pequeña y está claro que cada día que pasa, es más evidente la estrecha relación que cada vez une más a mi jefe con su médico.

-Pese a su cabello rojo, es una Kuchiki en potencia-

-Lo lamento...- agacho la cabeza resoplando y oigo la risa de ambos ancianos al unísono.

-Renji, no agaches la cabeza. Eres un hijo más ¿no? Y ahora más que nunca los Kuchiki son tu familia. Mi hijo y mi nieta son todo para ti-

-Tenía miedo de su reacción, Oyaji....porque la relación secreta que tenía con Byakuya, yo...-

-A estas alturas estoy más que curado de cualquier espanto. Es más...para mí es un orgullo ver como mi hijo ha regresado a una felicidad que tú vas a brindarle toda su vida-

-¡Por supuesto que lo haré! Aunque aún se esté recuperando y sea difícil, yo....estoy aquí...siempre lo estaré....-vuelvo a ver la sonrisa en el rostro de mi padrino y salgo de la habitación dejando a Ichika con ellos un rato más. yo suspiro con entusiasmo mientras camino por el pasillo hasta que llego a la sala de entrenamiento donde me encuentro una escena sumamente familiar.

Byakuya está dando golpes en el aire con una espada de madera vestido con un kimono deportivo y sudando mientras jadea por el esfuerzo. Verle así, me trae recuerdos que me remueven tanto que hasta mi cuerpo reacciona físicamente con "alegría". Mierda. Pese a que he decidido contenerme para estar a su lado sin tocarle y ayudarle a recuperarse, no puedo controlar estos impulsos...

-¿Qué haces ahí parado?-

-¿Eh?...- reacciono al oír su tono de voz algo malhumorado y me acerco a él cuando me hace una señal para que coja otra espada y me ponga frente a él.

-¿Estás seguro?-

-Me prometiste ayudarme a llegar a lo más alto ¿no es así?-

-¿Eso....significa....??- casi no puedo contener la emoción cuando veo ese brillo altivo en los ojos de mi amante y sonrío de forma bravucona cuando me pongo en guardia y empezamos a pelear como solíamos hacer siempre.

-Te estás conteniendo, Renji ¡no dudes!!!- más de una vez recibo un golpe mal dado por intentar no sobrepasarme así que termino poniéndome tan en serio que en uno de mis movimientos golpeo su espada dejándole indefenso y le empujo contra una de las paredes para acorralarle entre ésta y mi cuerpo haciendo que ambos jadeemos contra nuestros labios fuertemente por el esfuerzo. Dioses....había echado tanto de menos esta conexión, este acercamiento....que con solo mirarle pudiera perderme en sus preciosos ojos, que únicamente me dejara unos segundos eternos para poder mirarle solo yo.

-Renji....- me estremezco levemente al sentir la yema del dedo pulgar de Byakuya sobre mi mejilla retirando una lágrima que se me ha escapado tras ser consumido por los recuerdos. Es tal la necesidad que tenía de recuperarle, que parece como si nunca se hubiera ido. Como si jamás...le hubiera dado por muerto...

-Gomen....solo necesito un rato, enseguida se me pa....- no puedo ni terminar cuando Byakuya enreda sus dedos tras mi nuca y me besa con tal pasión que todo mi cuerpo se dispara internamente. Emito una especie de gruñido contra sus labios y le abrazo para pegar todo su cuerpo al mío notando como al principio se tensa por mi reacción, pero se deja poco a poco acariciar.