S T R O N G

50.Estaremos a salvo.

Las puertas de el mall fueron abiertas de un momento para otro por las manos de Steve.

-¡Oh, oh diablos! ¡Esto si es un auto!-celebra Harrington dándole vueltas a las llaves.

-Debes estar bromeando-murmura Richie viendo al carro fijamente.

-¿¡Toddfather!?-sonríe Camila viendo a la placa-¡Chicos, es Todd!-le señala a los Losers.

-Ese maldito bastardo-sonrió Mike H negando divertido.

-¿Lo conocen?-pregunta Dustin con confusión mientras se subía.

-Bueno, digamos que tuvimos un encuentro con él cuando llegamos a Hawkins-responde Stan con diversión.

-Puedo prevenir que ese "Toddfather" es un idiota-bufa Robin.

-Ugh, a la mierda Todd ¡Steve es su daddy ahora!-ríe Harrington montándose.

-¿Te referiste a ti en primera persona?-pregunta Erica asqueada.

-Si, y se dijo "daddy"--suspiró Ben subiendo al vehículo.

Al todos ya estar montados, voltearon a mirar a Richie, Camila y Mike H con sonrisas.

-Nos vemos cuando todo esto acabe-dice la peliblanca alzando sus cejas.

-¡Adiós!-canta Steve encendiendo el auto-Bien ¿dónde vamos?-

-La granja de Nelson-responde Dustin.

-¿De quién?-frunce el ceño.

-¡Solo conduce!-exige Henderson.

-¡Ya, ok!-bufa retrocediendo el auto.

-¡Bye, Losers!-grita Stan alzando una mano. Alexei sonrió imitándolo.

Widmore, Tozier y Hanlon por igual se despidieron viendo como se alejaban de el mall. La peliblanca subió su mirada, en donde los dragones volaban.

-Orión, ve con ellos-ordena la peliblanca, y al instante el dragón verde cambia su dirección empezando a perseguir el Cadillac amarillo de los chicos.

-¿¡QUE ES ESOOOO!?-se oye el histérico grito de Robin.

-¡¡AAAHHHH!!-chilla Erica.

-¡Niñas, Dios, acostúmbrense!-bufó Stanley.

Ellos sonríen divertidos para después darse la vuelta y volver a ingresar al mall para reencontrarse con los demás. Al llegar nuevamente al food court , Camila frunció el ceño acercándose a varias personas en especial.

-Cerradura inferior, segunda cerradura, tercera cerradura...-les iba diciendo Murray a Nancy.

-Amm perdón ¿para qué son las llaves?-pregunta la peliblanca curiosamente.

-Camila, vamos a Illinois para estar seguros en la casa de Murray-responde Jonathan con sus cejas alzadas.

-¿¡Qué!?-frunce el ceño.

-Será lo mejor para ustedes, niña-habla Hopper tras de ella, causando que se volteara confundida.

-Pero tengo que vencer a esa cosa-dice negando con su cabeza.

-Es justo por lo que estamos aquí-dice Jim utilizando un obvio tono.

-Pe-pero-

-Cariño-suspira una tierna Joyce, acercándosele-. Esa cosa anda detrás de ti y Eleven, no de nosotros-niega-. Tienen que estar a salvo, todos ustedes. No podemos perder a otro niño-habló con suavidad, curvando sus cejas.

Al instante Jacob se cruzó por la cabeza de la peliblanca, las facciones de esta se relajaron, y pasó su vista por todos sus amigos, se quedó en Richie, sintiendo escalofríos de tan solo imaginarse a alguno de ellos heridos, o peor, muertos. Eso la hizo suspirar.