Wolf of War III: Los secretos nunca acaban {Completa}

~Cap. XXXII~

Zusmann se encontraba junto a Stiles haciendo el tonto mientras esperaban impacientes la comida

-Zuss... - dijo su hermano dándole unas palmadas haciéndole levantar la mirada y dirigirla hasta la entrada de la carpa viendo a Agnes entrando por ella con un vestido corto y ajustado hasta la mitad del muslo de color azul eléctrico que junto con pequeñas piedras brillantes y su pelo castaño recogido la hacían ver hermosa

-E-es Heidi, osea Nessie, osea Agnes - dijo dándole unos eufóricos golpes a su hermano en el pecho. Cuando se levantó por la rapideza con la que lo hizo tropezó con una silla haciéndole caer sonoramente a los pies de la chica, Agnes apretó los labios intentando evitar soltar una sonora carcajada ya que su torpeza no había cambiado con los años.

  Zusmann se levantó colocando su chaqueta americana disimuladamente y le ofreció una gran sonrisa a la chica intentando ignorar lo que había pasado

-Hola, has venido... ¿Cómo estás?, ven podemos ir a sentarnos ya van a comenzar los mensajes dedicatorios hacía los novios. La verdad estoy algo nervioso, bueno la verdad no - miro el gesto fruncido de la chica el cual le hizo recapacitar que estaba diciendo - em creo que voy a parar de hablar ¿vamos?

-Si claro, ¿dónde me siento? - dijo mirando la mesa para dos personas en la que estaban los hermanos. Zusmann cogió el respaldo de la sillas en la que estaba sentado su hermano y sin apartar la mirada de la chica le tiro de ella sutilmente haciendole rodar por el suelo

-Aquí mismo - dijo ofreciandola una amplia sonrisa, dirigió su mirada hacia Stiles y le dijo en un susurró - ves a por una silla - Stiles se levantó sacudiendo su americana y frunciendo el labio

-Ten hermanos para esto - dijo alejándose

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Todos se encontraban calmados hablando formando entre todos las conversaciones un ambiente cargado de ruido en la carpa hasta que llegó la hora de hablar de los novios.

   Por parte de Lydia saldrían su madre, Chris y Stiles. El primero en salir fue Chris.

Chris salió al pequeño escenario preparado para ese momento y en el que posteriormente cantaría la banda contratada, se situó frente al micrófono y metió su mano en el bolsillo de su smoking sacando una foto de Lydia de pequeña vestida con un tutú rosa, un body color carne, una brillante corona y una varita mágica con su boca embarrada de chocolate, y la miró con los ojos rojizos mostrando la foto a los invitados

-Parece que fue ayer cuando me hacías jugar contigo a las fiestas de princesas - dijo sonriendo pasando su mano por su barba - y mírate ahora, la princesa se ha convertido en una verdadera reina, mi preciosa Lydia, desde que te ví, supe que estabas destinada a grandes cosas y no me equivoque. Tengo enfrente a la reina más bondadosa, cariñosa, valiente, especial y preciosa que cualquier cuento podría desear, me tienes, me tuviste y me tendrás hasta que de mi último suspiro, eres lo que más quiero en esta vida, eres mi princesa, mi reina y mi hija, te quiero mucho pequeña - Chris bajó tendiendole el micrófono a Daniels y se sentó al lado de Lydia, esta le abrazó y le besó en la mejilla.

-Gracias... Papá - Chris sonrió y rodeandola con su brazo sus delicados hombros puso atención en Daniels.

El chico miró nervioso el micro como si fuera algo que no había visto en su vida, cuando tragó saliva forzosamente se dispuso a hablar

-Prinston, William Prinston, Prins... Muchas maneras de llamarte pero lo que la gente no sabe es lo que se esconde tras ese nombre, detrás de ese nombre de encuentran los valores valentía, respeto, coraje, bondad, inteligente, atractivo aunque me duela reconocerlo, gracioso, fiel, buen amigo pero sobre todo para mi como un hermano y quiero decir que he tenido al mejor hermano mayor que jamás hubiera soñado. Me has cuidado siempre dándome miles de consejos que me han hecho crecer como el hombre que soy. Si me hablarán de una vida sin Prinston, me estarían hablando de una vida en la que no hubiera llegado a nada, esto - dijo señalando su nueva medalla - esto es solo gracias a ti. Os deseo lo más bonito del mundo porque solo alguien como tú, se merece lo mejor del mundo - dijo dándole el micrófono a la madre de Lydia y acercándose a abrazando a Prinston para abrazarle. La madre de Lydia subió al escenario, dijo el discurso que llevaba días escribiendo logrando emocionarse ella y a su hija la cual la abrazó y beso al sentarse en su sitio.

Ahora el micrófono estaba en manos de Zusmann que lo lanzaba nervioso de una mano a otra preparándose para hablar

-Prinston, Prinston el hombre más cabezota que ha podido pisar esta tierra y el jefe más insoportable que cualquier ser humano, mono, simio o orangután puede tener - la carpa se llenó de sonoras carcajadas, cuando se calmaron continuó hablando - Bueno era una pequeña broma, ahora enserio, gracias, gracias William gracias. Ya no se que agradecerte, si haberme salvado la vida cuando era un bebé indefenso, haberme criado como el mejor padre del mundo durante veintiún años sin volverte completamente loco con mi rebeldía, por aguantarme y soportar mis lloros de niñita, por haberme cuidado poniendo tu vida en riesgo. No existen palabras para un hombre como tú, gracias por haber sido mi guía de vida y nunca dejaré de seguir tus pasos ciegamente - Zusmann bajó del escenario dándole a su hermano el micrófono y reuniéndose en un abrazo con Prinston que aunque pareciera increíble tenía los ojos llenos de lágrimas.

   Stiles subió al escenario, sus manos temblaban más de lo normal debido a los nervios, dirigió su mirada a su hermano, al verle consiguió coger aire y lo soltó poco a poco consiguiendo calmarse

-Damas, caballeros, es un placer estar todos reunidos en la boda de esta princesa - señaló a Lydia que sentada frente al escenario - y el Terminator - señaló a Prinston - bromas aparte he tenido el maravilloso placer de conocer de primera mano a esa ojiverde, su obsesión por la ropa puede ser asfixiante, pero su sola presencia ilumina la estancia. He conocido todas las etapas de esta mujer, su risa, si sonrojo, su llanto, la etapa de hacerse la tonta delante de los chicos, la de ir de superdotada, todo y he de decir, que a quien no vea lo maravilloso que es, no tiene importancia, no tienen buenos gustos.
Estuve desde el principio y te digo lo mismo que te dije cuando se me rompió el jeep, jamás te abandonaré, felicidades chicos, os merecéis ser felices. - rápidamente su hermano acudió a su encuentro encerrandolo en un fuerte abrazo

-No pienses en ello, estoy contigo, no pienses, has estado perfecto - dijo acariciando su espalda