S.D.E. Ágape

Epílogo

Espero que hasta este punto de nuestra historia comprendas mis sentimientos hacia ti, que nada fue casualidad y que no es un simple capricho lo que siento por ti sino un conjunto de cosas que me han hecho quererte de esta forma, que me han hecho levantarme cada mañana pensando en ti.

Después de esto siguen cosas que no quedarían acordes a esta historia de amor que te he escrito, no tienen nada que ver contigo sino conmigo, quiero que sepas que el que me haya alejado no fue tu culpa, no tiene nada que ver con lo que fue o lo que no sino con mis demonios internos contra los cuales tengo que luchar.

Pero te agradezco, a pesar de que quizás cuando leas esto nuestra relación ya no sea la misma siempre estaré agradecido por haberme permitido estar en tu vida, por haberme mostrado que no debo conformarme y que debo pensar en que es lo mejor para mi.

Recuerdo aquella frase que me dijiste alguna vez: "Para estar con alguien primero debes estar bien contigo mismo" y yo sabía que no lo estaba, a pesar de que tu detenías esos problemas nadie más que yo podía solucionarlos.

Si para el tiempo que regrese encontraste el amor espero pueda darse cuenta como yo de lo maravillosa que eres, que te de lo mejor de él porque sé que tu le darás lo mejor de ti.

Pero si algún día estamos juntos los dos te prometo que haré valer todas y cada una de las palabras que te he escrito en este libro, que le daré sentido a mis pequeños poemas escritos hacia ti y te demostraré cada día que eres la mujer más amada de este universo.

Pero no está ya en mi, sino en ti. Espero que decidas lo que te haga realmente feliz.

Muchas veces pensé que verte con alguien más me dolería y es cierto pero conforme pasaron los meses y terminé de escribir esta obra y continúe con la siguiente me di cuenta que había sido muy egoísta en mi vida, que eran incontables las veces en las que lo fui de la manera equivocada, ahora me doy cuenta que contigo no quiero ser así, que te he llegado a amar tanto que si debo dejarte ir lo haré, sin sentirme destrozado, claro que me dolerá pero no me derrumbaré.

¿Por qué? Tan sencillo como la vida misma.

Si tú eres feliz yo también lo soy.