Tras haber dejado atrás a su familia junto con sus valores, Pax despierta en un mundo desconocido gobernado por una sociedad de la que nunca había oído.
Pronto, encuentra en lugar en esta sociedad, o al menos es lo que desea.
Las personas que parec...
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PAX
Recorrieron el pasillo de vuelta en un paso rápido. Bellamy la seguía detrás y fue ella quien ingresó primero a sala de criónica. Se detuvo frente al panel que había utilizado para despertar a Bellamy y se detuvo un instante al ver el círculo verde junto a su nombre. Aún le sudaban las manos por la pregunta de Milo. Hubiera preferido no responder, mucho menos con Bellamy presente, pero no había tenido opción.
—Espera.
Con la mano flotando en el aire, volteó hacia Bellamy, esperando que su mente le hubiera jugado una mala pasada.
—¿Por qué no le contaste la verdad a Milo? —preguntó.
Bajó la mirada hacia la remera negra de mangas largas que vestía; acentuándole los músculos de los brazos y su ancha espalda. Perdió el hilo de sus pensamientos por un instante.
—Tenías razón —replicó, levantando la cabeza hacia Bellamy. No porque quisiera mirar sus ojos marrones, más oscuros debido a la tenue luz de la habitación, sino porque no quería distraerse—. No los conocemos. Será mejor que vayamos despacio.
Bellamy se cruzó de brazos, asintiendo. Antes de que tuviera la oportunidad de hacer otra pregunta, volvió su atención a la pantalla y comenzó a bajar sobre la lista de nombras hasta encontrar el que buscaba.
Presionó el círculo junto al nombre de Octavia y al instante un sonido inundó el lugar como si hubieran abierto una gaseosa cuando en realidad era el tubo de Octavia asomándose de la pared.
Bellamy se acercó a ella en silencio, olvidando la conversación con Pax, quien se sintió aliviada. La tapa se levantó y segundos después Octavia tosió como lo había hecho Pax horas atrás. Al momento en que vio a su hermano, una sonrisa cruzó su rostro y lo abrazó.
Con todas sus fuerzas, volvió la vista hasta el panel para presionar el círculo de Harper y Murphy.
Dos tubos más se asomaron. Pax se detuvo ante ellos mientras Harper y Murphy tosían. Ambos se sentaron despacio, mirando confundidos a su alrededor.
—¿Ya han pasado trescientos años? —preguntó Murphy con voz ronca.
Le hubiera gustado abrazar a cada uno de ellos, decirles cuánto los había extrañado. También le hubiera encantado darles buenas noticias y se notaba que ellos las esperaban, ya que sus facciones cambiaron enseguida al notar que eran los únicos despiertos además de Bellamy y Pax.
—Bel... —Susurró Octavia mirando los tubos aún dentro de las paredes detrás de Pax—. ¿Por qué estamos despiertos?
Bellamy tensó la mandíbula, echándole un vistazo a Pax. Tomó aire, lista para hablar.
—Tenemos que hablar —replicó.
Una vez que Pax acabó su narración de los hechos desde que había despertado, ahorrándose el detalle de haber despertado a Bellamy y la pregunta al respecto de Milo, el silencio inundó el lugar como si aún estuvieran bajo la criónica. La primera en hablar fue Harper y Pax lo agradeció.
