Para volver a amar

🔹️Capítulo 28🔹️

Los meses se pasaron volando. Mayte estaba por entrar en su octavo mes de embarazo, ya llevaba siete meses de relación con Carlos.

Hoy Cami cumplía nueve añitos. Sus padres le tenían preparadas muchas sorpresas, sabían que ella nunca había festejado su cumpleaños. Así que con la ayuda de Isa le prepararon una fiesta sorpresa en su casa para que la niña no sospechara nada.

"Estas son las mañanitas que cantaba el rey David a las muchas bonitas se las cantamos a ti... Despierta Cami, despierta mira que ya amaneció..." - entraron cantando Mayte y Carlos con un pequeño pastel de chocolate con una vela encendida.

Cami al oírlos se despertó, se sentía muy feliz, nunca la habían despertado así el día de su cumpleaños.

-Buenos días a la cumpleañera más hermosa - dijo May sentándose en la cama - pide un deseo princesa.

-Gracias papis - quería llorar - no se que pedir, ya tengo todo lo que siempre quise. No esperen - pidió el deseo (un perrito) y sopló la vela.

-Listo - aplaudieron los dos.

-¿Qué pediste hija? - le preguntó Carlos.

-Si les digo no se va a cumplir, pero les voy a dar una pista, tiene cuatro patas - río.

Carlos y Mayte se miraron riendo pues ya sabían lo que su hija iba a pedir, les venía pidiendo un perrito desde que su amigo Tomas adoptó uno.

-Mmm ¿Qué será? - preguntó Mayte haciéndose la que no sabía.

-No se mi amor, está complicado - río Carlos - lo que si se es que hay una princesa que tiene que levantarse porque vamos a salir y ya son casi las once.

-Mmm ¿Quién será? - preguntó Cami haciéndose la desentendida lo que hizo reír a sus padres.

-Nos salió inteligente la chamaca - dijo May - bueno arriba hija que nos espera un día largo, sobre la silla te dejé ropa para que te vistas, te esperamos abajo - le dio un beso.

-Esta bien, ahora voy - dijo la niña.

*En la sala minutos después*

-Mi amor, siente como se mueven los bebés - le dijo a Carlos.

-Wow, niños dejen de pelear ahí dentro, la panza de su madre no es ring que boxeo - dijo Carlos lo que hizo que Mayte llorara de risa.

-Ay mi amor, me hiciste reír sin querer - seguia riendo.

-Lo siento - rio - voy a ir subiendo las cosas al auto, las espero allí - le dio un beso y se fue.

-Hija, apurate que se nos hace tarde - gritó Mayte.

-Ya voy bajando ma - venia Cami - ¿A dónde vamos?

-Ya verás, ven vamos que papá nos está esperando en el auto - le dio la mano.

Se subieron al coche y partieron para casa de Isabel. Donde se encontraba toda la familia reunida en el jardín. Había un inflable, una mesa llena de regalos, pastel y todo estaba decorado con mariposas, ya que sabían que Cami las adoraba. Después de unos cuantos minutos llegaron.

-¿Tanto apuro para venir a lo de la tía Isa? - dijo a sus padres.

-Si mi amor - dijo Carlos - ve bajando yo voy a ayudar a tu madre que no puede sola - bajo del auto y ayudo a May.

-Parezco un globo, ahí adentro me van a confundir con uno - dijo bajito para que su hija no escuchara lo que hizo reír a Carlos.

-Claro que no mi amor, estas hermosa con esta pancita - la besó.